31 De Octubre | Heesun os

Parte Única

En el hermoso altar de bodas, se podía apreciar la felicidad qué demuestran la pareja de novios, Lee Heeseung y Kim Sunoo; quiénes son los prometidos de está noche.

La boda de Heeseung y Sunoo era en secreto, debido qué los padres del pelirosa jamás aceptaron su relación con Lee, todo porque a fuerzas lo quieren emparejar con el hijo menor de su socio, todo para aumentar aún más la economía y el negocio de los Kim con la riqueza qué obtienen la familia de aquél socio de los señores Kim y más de juntar al jóven Kim con aquél jóven atractivo y desconocido, pero para el jóven Kim no le agrada para nada la presencia de aquél jóven desconocido; la familia de Sunoo nunca aceptaron a Heeseung cómo su futuro yerno y cómo alguien de la familia, nunca fue bienvenido para la familia Kim todo porque no forma parte de una familia rica incluso lo juzgaban tan mal por su forma de vestir y nada les parecía qué Sunoo saliera con Heeseung ya qué eso arruinaría la gran reputación de los Kim; Sin embargo, los padres de Sunoo le presentaron a su hijo al hijo menor de su socio cómo su futuro prometido y con quién formará una familia perfecta terminando la universidad y esa noticia destrozó el corazón de Sunoo ya qué eso le dio entender qué sus padres no aceptaron para nada su relación amorosa con Heeseung. Al igual, al pelirrojo también le destrozó esa noticia proveniente de sus "suegros".

Es por eso, qué Heeseung y Sunoo planearon hacer su propia boda secreta cerca de la iglesia de Seúl, en un 31 de octubre, dónde le pagaron a un sacerdote para qué los casará en secreto y sobre todo, le explicaron toda su mala situación hasta qué el sacerdote comprendió. Entonces se realizó la ceremonia para unir el amor eterno de Lee Heeseung y Kim Sunoo y para declararlos cómo futuros esposos hasta el final de sus días.

Es verdad, qué Heeseung y Sunoo siguen estudiando en la misma universidad y desde qué iniciaron su relación amorosa han luchado por mantenerse juntos y al ser juzgados tan mal por los Kim. Ambos chicos decidieron casarse en secreto y al terminar la universidad se irían del país para ser felices en otro lado y ser libres con su sincero amor.

La ceremonia de la boda ya dio el inicio de proseguir con la siguiente página, qué en esté caso, es la unión del matrimonio de sellar completamente el compromiso de unir el amor de ambos comprometidos enamorados.

El sacerdote habló y miró atentamente a la jóven pareja.

- Jóven Lee, ¿Aceptas al jóven Kim cómo su futuro esposo, en la salud y en la enfermedad y le jura amarlo hasta qué la muerte los separe?-preguntó el sacerdote mientras leía las líneas del fragmento del libro, esperando la respuesta del pelirrojo.

- Aceptó.-respondió Heeseung sin ninguna duda.

- Está bien, jóven Lee. Jóven Kim, ¿Aceptas al jóven Lee cómo su futuro esposo, en la salud y en la enfermedad y le jura amarlo hasta qué la muerte los separe?-preguntó el sacerdote mientras leía las líneas del fragmento del libro, esperando la respuesta del pelirosa.

- Yo, acep-...-iba a responder a la pregunta cuándo algo se le atravesó en el pecho, o más bien, lo habían interrumpido a propósito con su futura respuesta qué en esté caso, su bonito traje blanco se había manchado de su propia sangre, él mismo sentía qué no podía seguir respirando normalmente por culpa de aquella bala qué atravesó en su corazón, causándole una muerte rápida.

Aquella bala fue quién le terminó la vida de Kim Sunoo, arrebatándole su futuro lejano, su final felíz y su posible futuro a lado del amor de su vida con sólo respirar lentamente hasta cerrar sus lindos ojos y su corazón dejó de latir poco a poco.

El pelirosa cayó repentinamente al suelo con la poca resistencia qué soportó todo su cuerpo con esa bala tan profundamente dentro de su corazón, qué lo está acabando con aquella cosa dañino y lo está acabando con su propia vida.