Capítulo 11 - La noche más fogosa (Parte 6)

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- Lo dejé en el segundo cajón de la mesita de noche - susurró tímidamente Su.

Los labios de Moa se curvaron en una sonrisa lasciva, se bajó de la cama y fue hasta su mesita de noche en busca del strapon. Tras tomarlo, detuvo su marcha frente a la cama, sosteniéndolo en sus manos.

- No te preocupes, yo te ayudo - dijo dulcemente Suzuka, bajándose también de la cama y acercándose a Moa para asistirla en la colocación del strapon al ver la carita de desesperación de su amada por no saber bien qué hacer con todo aquello.

- Ahhh, conque así es como se hace... - musitó la dueña de casa al ver lo sencillo que era ponérselo, sintiendo su respiración acelerarse.

Todo era nuevo para Moa, pero igualmente excitante. El tan anhelado sueño definitivo de La Chica Koala estaba a punto de convertirse en realidad: por fin iba a poder tomar el control absoluto y penetrar a Su, por primera vez en las vidas de ambas, como tanto lo había fantaseado durante tanto tiempo. Moa deseaba poseer a La Reina y hacerla delirar de placer como nunca antes. La anticipación de lo que estaba por venir la asfixiaba. No podía ni quería esperar más. Necesitaba hacerle el amor a Suzuka, ya.

- Listo, amor - susurró Su al terminar de ajustar adecuadamente el strapon en la cintura de Moa y sin perder tiempo se arrodilló frente a la más joven, tomó el pene de silicona con ambas manos y comenzó a succionarlo. - Uhmmm Moa-chan, aún conserva tu delicioso sabor. Me encanta chuparlo - musitó con tono sensual, elevando su mirada hacia los ojos de Moa para encontrarlos y hacerla estremecer.

Su ejecutaba la mamada con maestría, combinando delicadeza y agresividad. A veces suave y pausada, otras veces rápida y enérgica. Ella podía llevar todo el largo y grueso miembro de silicona a lo más profundo de su boca, sin sentir la menor incomodidad.

- Mi Amor... - suspiró Moa, visiblemente excitada frente a la ardiente imagen que le brindaba su adorada Su. El tenerla a sus pies deleitándose con el falo de silicona era una escena sumamente sensual.

Moa no estaba segura de qué hacer a continuación por falta de experiencia, no obstante, se encontraba disfrutando intensamente del momento. De manera instintiva, ella comenzó a mover su cadera hacia adelante, pero se detuvo abruptamente, sintiéndose algo avergonzada por su accionar.

- Hazlo - ordenó con voz firme La Reina entre chupada y chupada. Suzuka sabía perfectamente lo que Moa había intentado hacer.

- Pero Su-chan, no quiero lastimarte... - murmuró genuinamente la más joven, esperando cambiar la opinión de la líder de la banda.

- Shhhhh, tranquila. Solo hazlo. Posa tus manos en mi cabeza y comienza a penetrar mi boca - pidió Su tomando a Moa por el trasero con ambas manos para acariciar su suave piel, sin dejar de succionarle "el pene".

- Uhmmmm, Su... - el deseo invadió a Moa al sentir las manos de Suzuka sobre sus glúteos - ¿Estás segura? - preguntó.

- Hazlo ya, Moa-chan - Su ordenó por última vez con decisión y firmeza.

Moa finalmente obedeció. Ella enterró suavemente sus dedos entre las hebras del cabello de Suzuka y comenzó a mover su cadera en un vaivén lento pero constante.

- Eso, amor, así - dijo como pudo Su con su boca ocupada, manteniendo el contacto visual con su compañera de banda mientras ella se hundía en su boca.

- Su-chan, debo decir que tenerte así a mis pies penetrando lascivamente tu boquita... es extremadamente estimulante. Juro que podría llevar al orgasmo con tan solo ver como te devoras "mi pene" y acaricias mi cuerpo - confesó la dueña de casa.

Amor Eterno - Temporada UnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora