Old Ways - Jenlisa G!P

Capítulo 35: Peticiones

— Como vera señora Manoban, si tienen una dieta sana y se abstiene de sustancias alcohólicas o variantes esto podría extender su esperanza de vida —

Me tensé y Jen al sentirlo tomó mi mano para demostrarme que estaba ahí conmigo, pero ni eso me sacó de los pensamientos que elevaban mi enojo, al salir del consultorio me di cuenta que si no lo dejaba salir iba a explotar.

— Jen, podrías esperarnos con Somi en el auto —

Jen me miró un poco preocupada, pero asintió para luego permitir que Somi se subiera en su espalda, Somi hacia mucho eso últimamente, decía que los koalas se aferraban unos a otros para ayudarse.

Espere que mi novia se fuera junto a mi hija mientras platicában de cosas que tal vez solo ellas entienden y me lleve a mamá a la zona verde del hospital muy alejadas de todos para que empezar la plática que no podía dejar pasar por nada.

— ¿Qué piensas hacer? — Pregunte directa.

— Bueno hija...creo que no hay más que hacer —

— Escuchaste a la doctora —

Habíamos venido al mismo hospital en donde atiende a Somi ahora pero el doctor Jin nos citó con una de sus colegas que se especializaba en el tema.

— Si lo hice, no tiene caso —

— ¿Deseas morir? Porque si ese es el caso no entiendo porque me buscaste —

— Para pasar mis últimos días con mi hija y mi nieta —

— Podrías pasar muchos más si haces caso a lo que la doctora dijo —

— Imposible —

Mi paciencia llegó a su límite...

— ¿No puedes dejar el alcohol porque no puedes o no quieres? —

— No lo entenderías, quiero, pero no puedo —

— Pareciera que ni siquiera luchas... —

— Estoy enferma hija...no hablo físicamente sino mental y emocional, dependo mucho del alcohol para ser feliz y si lo dejo es probable que muera por no tomarlo, yo necesito seguir tomando —

— Al menos inténtalo... — Dije dolida por no verla poner de su parte.

— No sé si podre —

— Lo único que veo que no puedes es tratar porque ni siquiera quieres y escúchame bien, si esa es la actitud que tienes con morir pronto pues hazlo lejos de mi vista y de mi hija porque si no vas a intentarlo no te dejare irte con la conciencia limpia —

No dijo nada solo me miro de forma culpable para luego agachar la cabeza, hice un gesto para irnos y en el matador silencio nos encontráramos con Jen.

[...]

Jennie se la paso preguntando si estaba bien cosa que afirme, aunque la aparición de mi mamá no sea del todo de mi agrado aun así le dije que no habláramos del tema y que únicamente nos concentraremos en nosotras.

¿Cómo estas linda? —

— Muy bien...que bueno verte —

Me la comí con la mirada ya que el outfit deportivo que llevaba le tallada muy bien y las gotas de sudor por el ejercicio que hacía me recordaban a cuando solo somos ella y yo en busca de placer en el cuerpo de la otra.

Sonrió de lado y reviso que nadie nos viera para jalar mi cintura y besarme un momento.

— ¿Tienes tiempo? — Susurro