∆7: Parejas Disparejas∆

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Kardia y Sisifo se habían reunido para hablar del secreto que tenían en común, el de largos cabellos aún seguía divertido por la situación, el otro se hallaba confundido. Lo que había pasado con su mejor amigo lo estaba abrumando, le había dicho que la fogosa noche que compartió con Cáncer fue producto de un mero deseo sexual pero él no lo creía, conocía a El Cid lo suficiente para saber que no se dejaba llevar por cosas tan superficiales como el sexo y también sabía que odiaba tanto las relaciones entre el mismo género como al mismísimo Santo de Cáncer, nada tenía sentido a su pensar; Si su amigo hubiera buscado algo tan básico como satisfacción no sería con otro hombre, mucho menos con Manigoldo. El caballero de Escorpio pensaba justo lo contrario, creía en la idea de la conexión espiritual, de la maldición que unía las almas con su parte contraria, el llamado 'lazo'. Dicho lazo que él ya estaba experimentando y con gusto, pues su complementario no se había negado a esto y le había correspondido casi de manera automática. Estaba seguro que eso les había pasado a El Cid y Manigoldo, solo que el primero era tan orgulloso que no lo aceptaría tan rápido, se sentía humillado y necesitaba tiempo. Conocía muy bien a Manigoldo para saber que debía estar sufriendo mucho aunque no lo demostrara, su personalidad, sus acciones, su forma de ser completa era una máscara para cubrir todas sus debilidades, y también sabía, que mediante el lazo El Cid ya había descubierto eso. Ambos eran un libro abierto para el otro desde el momento en el que percibían la conexión. Kardia había descubierto eso primero que ellos y lo había usado bien para conquistar a su compañero, aunque también había usado parte de su naturaleza insinuante y atractiva.
Sisifo estaba muy preocupado, dos días completos habían pasado y las puertas de la casa de Capricornio no se habían abierto, ni siquiera hubo variaciones de cosmo, intentó atacar las puertas con todo lo que pudo pero nada funcionó, intentó hacerlo junto con Kardia pero ambos fueron inútiles allí. No quería avisar a los otros ya que se darían cuenta de que algo no estaba bien y comenzarían a preguntar, entonces todo acabaría saliendo a la Luz y estaría traicionando a su mejor amigo, (nunca lo perdonaría por eso) y él tampoco se perdonaría así mismo. Por lo tanto, ambos se encontraban hablando a las afueras de la casa de Escorpio mientras pensaban qué hacer.

-Dejalo ya Sisifo, no te metas tanto en la vida de El Cid, «habla desganado» es un hombre autosuficiente y toma sus propias decisiones.
-Es que no fue precisamente una decisión que pudiera considerar, solo, solo no pudo hacer otra cosa más que aceptar.
-Y si así fuera aún así aceptó. Sin pelear.
-No lo conoces tanto como yo, es muy fuerte y siempre mantiene todo bajo su control, pero cuando se ve acorralado tiende a tomar decisiones apresuradas sin siquiera pensar en las consecuencias.
-Entonces estás admitiendo que él decidió hacer esto. Sin ser realmente obligado.
-Bueno, más o menos. «duda» es confuso, no puedo entender nada sobre esa estúpida maldición, y tampoco me parece real.
-Oh claro que lo es! Es muy real... «habla con convicción y cierto desánimo» y no puedes imaginar cuánto duele, tener un lazo emocional con una persona que no conoces realmente bien, que antes era solamente un simple compañero para tí y de golpe se vuelve el pensamiento más importante dentro de tu cabeza «señala su cien» no puedes dormir sin soñarlo o sentirlo, más adelante todo empeora y descubres que lo deseas tanto como para cometer una locura, tienes una necesidad que solo puede ser satisfecha por ese compañero que irónicamente, talvez no va volteado a verte ni una sola vez «Kardia muestra un semblante de debilidad que oculta rápidamente» tienes que aguantar ser invisible para él un tiempo, hasta que lo acepte. Aún sabiendo que él está sintiendo exactamente lo mismo que tú pero no quiere verlo,,, cuánto más te esfuerzas por negar esos extraños sentimientos y mantenerte alejado de tu compañero, el lazo más te tortura para hacer que uno de los dos se acerque al otro, para que la angustia de verlo todos los días y tenerlo distante sea tanta que no te permita respirar.
-Kardia... «se sorprende y responde atónito» no sabía que te sentías así... Eso fue profundo.
-Si, fue cursi. Por eso puedo entender a Manigoldo.
-Por eso estabas de su lado... Vaya, «acomoda su vincha y su cabello» quién lo diría.
-Cuando miro a Manigoldo o converso brevemente con él puedo ver y notar todo su dolor, y si alguien menciona a El Cid en la conversación, no puede evitar mostrar cómo su alma se retuerce, entonces dice cualquier tontería y se las ingenia para huir del grupo y aislarse. Yo he visto eso Sisifo. Es Manigoldo quien sufre por El Cid, no al revés. Cid solo está consternado por no entender sus sentimientos, porque es muy orgulloso como para aceptarlo, es todo. Él es el victimario.
-Vaya, no lo había pensado de esa forma. Cid siempre me dice lo mucho que desprecia a Cáncer, le molesta completamente su personalidad, sin mencionar que desde muy joven él mostró un abierto rechazo hacia las relaciones entre el mismo género. Es por eso que está tan molesto «susurra» ahora lo entiendo. Siendo así, que bueno que no ataqué a Manigoldo, si es cierta la profundidad de la maldición, al lastimar a Manigoldo también estaré lastimando a Cid. «expone preocupado»
-Exacto, «lo mira a los ojos» si realmente quieres a Cid como dices, entonces no intervengas con la naturaleza del lazo. Hasta ahora no conocemos el verdadero alcance de sus consecuencias, no sabemos de qué forma se concretó el pacto ni cómo puede variar, no tenemos influencia en el Inframundo tampoco. La única persona que puede conocer todo esto, es quien selló el pacto.
-El mismo Manigoldo... Claro. Pero tampoco podemos preguntárselo a él, no creo que quiera hablar de eso. Así que tendremos que dejar las cosas cómo están? «se cuestiona»
-Si, yo ya lo he aceptado y no me resisto a las influencias. Todo debe seguir su curso al menos hasta que encontremos una solución viable.
-En eso concuerdo contigo, quiero que todo esto termine pronto. «el pelilargo niega»
-No terminará, recién comienza.
-Bueno, «replica» entonces estoy decidido a encontrar una solución temporal, algo que frene esto. Debe haber algo! Kardia, ayúdame «ruega» quiero entender completamente esto para poder ayudar a El Cid.
-Está bien, «le sonríe» lo haré. A pesar de ser inteligente, eres tan inocente a veces...

COMPLEMENTARIOS (El Cid X Manigoldo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora