TOM KAULITZ... PARA MÍ.

Destino Alemania.

Cap. 1.

By Stephany.

El rostro de Tom estaba desfigurado en placer, soltaba gemidos jodidamente excitantes, sus ojos estaban achinados y su boca entre abierta. Soltó mis glúteos y buscó desabrochar la parte superior de mi bikini, Cuando lo logró, mis pechos quedaron descubiertos y marcados por el placer qué Tom me produjo, mis pezones estaban excitados, Tom me tocaba ambos senos con apretones y se los llevaba a la boca para lamerlos. Eche mi cuello hacia atrás y Tom lo afirmó con una mano, apretó con leve fuerza, era tan dominante. Gemí fuertemente y pude ver que a Tom le gustó oirme, cada vez que me escuchaba hacerlo fruncia el ceño como si sufriera de tanto placer.

Empezó a tocar mi vagina, buscando por el lado de mi bikini para poder entrar. Me acarició un poco, eh introdujo dos de sus dedos en mi interior, moviéndolos de adentro hacia afuera, se sentía delicioso, lento, pero lo más profundo qué podía llegar.
Gemí descolocadamente ...
Tom me entrelazó en su pelvis para sacarme del jacuzzi y me dirigió hacia la cama.
—Quiero verte.— Dijo.—Necesito ver todo tú cuerpo cuando te haga mía.—
Me puso sobre la cama y mi cuerpo húmedo mojó las sábanas, me quitó la parte de abajo del bikini y yo me retorcí del placer, abrí mis piernas para él y pude ver como mordió su labio inferior al verme, bajó su bóxer lentamente y vi su enorme pene frente a mí, erecto y duro.
Comenzó a golpear su miembro en mi vagina de forma obscena me sentí tan caliente que me deshice en gemidos para él.

(Pude captar tu atención?? Espero que si!! Esto es parte de uno de los capítulos qué aparecen en esta historia... Ahora comencemos desde el principio... Para que entendamos el contexto.
Qué la disfruten!!)

By Stephany :

Eran las cuatro de la madrugada y no podía dormir, definitivamente ansiedad es mi segundo nombre.
Me defino una mujer extremadamente ansiosa, perfeccionista, apasionada y difícil de conquistar, bueno la verdad no suelo enamorarme ya que no me relaciono mucho con la gente, tengo solo una amiga y los demás son solo conocidos de parrandas, nada importante.

Casualmente lo que me robaba la calma en estos momentos, era precisamente mi ansiedad de una nueva decisión que había tomado y no dejaba de sobre pensar si lo que haría, traería buenas o malas consecuencias a mi vida.

Tengo dieciocho años de edad y estaba apunto de viajar a Alemania con mi amiga Cinthia.
Ha que íbamos a Alemania?
Bueno, sencillo, hace algunos años Cinthia y yo nos prometimos qué cuando termináramos de estudiar la Secundaria, viajaríamos juntas, sin nadie más, solo nosotras dos,
para conocer algún país
antes de ir a la universidad, las opciones eran, Japón, París, y Alemania.
La verdad yo quería un lugar más soleado, más tropical, pero Cinthia no es amiga de los bikinis, tiene mil complejos porque según ella tiene varios kilos de más, y descartó de inmediato la opción de ir a Hawai.

Cinthia a diferencia de mí, es muy romántica, enamoradisa y muy alegre, a mí me encantan sus cualidades, es muy buena pero aveces, eso le juega en contra ya que se aprovechan de su bondad y siempre termina sufriendo.
Cinthia, Cin, cómo le llamo yo, sufre pensando en que sus kilos de más son motivo de burla para los demás, cree que no es suficiente para ningún hombre y peor aún, cree que ningún hombre se fijará nunca en ella, pavadas qué piensa, yo siempre trato de subirle su autoestima, le digo que es hermosa, que tiene un cabello castaño precioso, que su sonrisa es única, que amo su alegría y mil cosas más y ojo que también la insentivo a hacer ejercicio para que baje esos kilitos qué le acomplejan, pero la verdad es difícil de hacer entender.

En resumidas cuentas el día de mañana viajabamos juntas a Alemania a probar suerte y ha divertirnos.
Cinthia tiene una tía viviendo en el norte de Alemania, en Hamburgo. Es una tía soltera de cuarenta años, que trabaja en un estudio de grabaciones musicales, sala de ensayos para bandas musicales de todo tipo, un lugar muy grande y famoso en Alemania, ya que es el centro de encuentro de muchas bandas muy famosas.
Nos quedaremos un tiempo en la casa de su tía, mientras encontramos un lugar para vivir.

Nuestro vuelo era a las siete de la tarde, quisimos viajar a esa hora ya que de Chile a Alemania eran quince horas de viaje y queríamos llegar de día a nuestro destino.

Estuvimos ahorrando durante un año para viajar, trabajamos y guardamos cada peso para lograr juntar lo suficiente para la fecha.
Los Padres de Cinthia no estaban de acuerdo con nuestro vije no les parecía la idea de que nos fuéramos ya que son muy sobre protectores con ella, los míos, bueno mi madre, qué es la única familia que tengo, es menos drástica,por no decir que no le importa, ya que está demasiado ocupada en su vida llena de jodidos problemas.

Dejé echa mis maleta ese mismo día, pero a pesar de eso las volví a revisar  para asegurarme de que llevo absolutamente todo lo que necesitaré y probablemente en unas horas más las vuelva a revisar.

Preparé dos cosmetiqueros con todos mis maquillajes y uno con todos mis productos de skin care, además de mis perfumes, cremas de todo tipo, etc... Mi alisador de cabello infaltable, porque salí rubia sí, pero con el cabello completamente indefinido, ni risado, ni lasio y la verdad para ser sincera lo odio.

En fin, me preparé demasiado para este día, hice deporte sin parar durante el año completo, logré al fin tener el cuerpo que deseaba tener.
Puedo decir que estoy en mi mejor versión y que estoy muy ansiosa de llegar a Alemania con ésta yo, qué he preparado física y he interiormente para este viaje.

Aprendimos con Cinthia, Inglés y Alemán, nos costó bastante pero lo logramos, si hay algo en lo que nos parecemos Cinthia y yo es en lo aplicada qué somos, a ambas nos gusta leer y la verdad somos bastante equilibradas en lo que significa momentos de diversión y momentos de aprendizaje y seriedad, eso me gusta de mi relación con ella, que nos complementamos bastante bien, y que contamos la una con la otra en absoluto para cada momento y etapa de nuestras vidas.

Eran las dos de la tarde y yo seguía en mi cama dormida como si no tuviera nada que hacer este día. Desperté porque mi teléfono no paraba de sonar, obviamente porque Cin estaba llamándome para saber si al fin me salí de la cama, porque sabe perfectamente que no lo he hecho aún, ya que si hay algo en lo que nos diferenciamos Cin y yo, es que yo duermo demasiado y ella no.

By Cinthia:

Era la séptima vez que le marcaba al celular a Stephany y no me contestaba, empece a preocuparme y  cuando me estaba abandonando el alma del cuerpo, al fin, contestó...

—Aló. —Se le oía peresosa.

—¡Amiga!... ¡Al fin! ¿Pero qué pasa qué no respondes?. — Le pregunte.

— Me dormí casi a las cinco de la madrugada y pues aquí... acabo de despertar. —Yo la mataba.

—¿¡Qué!? ¿Pero qué, se te ha olvidado que hoy viajamos? Tenemos que preparar mil cosas y tú aún en la cama Stephany?.

—Ya lo sé... y lo siento, me levantaré de inmediato, tomaré una ducha y salgo para allá. 

—Debemos estar una hora antes en el aeropuerto, no quiero que nos retrasemos porfavor amiga.

—Tampoco quiero eso, tranquila, juro que llegaré a tiempo.

—¡ok! Suerte con la despedida con Elena, nos vemos... Adiós.

—Sí claro, Adiós. —Respondió lúgubre, sabía perfectamente que no se despediria de su Madre y conociendo a Elena, creo que también ella prefería evitar esa despedida con Stephany, eran tan poco cariñosas entre ellas qué me asustaban, tenían una relación bastante fría y extraña desde siempre.

By Stephany:

Levantada, duchada y desayunada, debía salir de casa antes de que Elena regresara a casa.
Le eche la última miradita a mis maletas para estar cien por ciento segura de que todo estaba perfectamente guardado, limpié mi habitación y dejé todo en orden.
Efectivamente pude salir de casa antes de que Elena llegará, pedí un taxi para que me llevara a la casa de Cin y aunque estaba demasiado nerviosa y preocupada, me sentía entusiasmada y con infinitas ganas de estar ya, en Alemania.

Cuando llegamos al aeropuerto los Padres de Cin lloraron un montón, nos dieron mil sermones y nos pidieron llamar apenas el avión aterrizara.
Era lindo ver a la familia de Cinthia tan preocupada por mi amiga, aunque me ahogaba de sólo ver la situación.
Cinthia también lloró y temí qué en algún momento se arrepintiera de viajar y tuviéramos qué devolvernos, pero eso no pasó.

"Atención pasajeros del vuelo 591 dirección a Alemania...dirijirse a la puerta de embarque."

¡¡Ahí te vamos Alemania, prepárate!!