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Octubre 2016

—¡Pendeja!— Ari había asustado a su amiga detrás de la puerta—. Wey, no mames.

Su amiga solo se limitaba a reír mientras que Samantha tomaba su pecho tratando de tranquilizarse, había estado esperando a que saliera de la biblioteca junto con una máscara, varias personas se habían quedado observando pero para Abril era lo de menos.

—Que increíble— Tomó su estómago para tranquilizarse.

—¿Cuál era la necesidad?

—Que ya casi es halloween— Miró divertida a su amiga.

—Mensa, ¿Qué haces aquí? ¿No tenías examen?— Samy caminó hacía afuera del sitio.

—No entré— La miró rápidamente —. De cualquier manera lo iba a reprobar, nunca entendí esa materia.

—Ay Abril— Siguieron caminando hasta llegar a las escaleras.

Samy volteó a verla rogándole con la mirada que lo hiciera, al instante supo de que se trataba.

—¿Quieres qué vaya?

—Por favor, prometo que será la última, las demás me las ingeniaré yo— Sacó discretamente un pequeño sobre de su mochila—. El chico no te conoce, y es muy poco probable que te vuelva a ver.

—Está bien, no me molesta— Sonrió con ternura al ver el esfuerzo que su amiga había dedicado a aquel obsequio—. Entonces voy, le doy la carta y le digo que se la entregue a Félix.

—Como todas las veces que me ayudas— Samy asintió consecutivamente.

—De acuerdo, disimula o algo, no tardo— Ari avanzó hacía el chico que se encontraba en su celular.

Samy giró levemente su cuerpo para caminar hacía el lado contrario para pasar desapercibida entre las personas, se detuvo en seco cuando su cuerpo quedó a centímetros de la otra persona, si no fuera por los reflejos ambos hubieran chocado.

—¿Félix?

—Samy, ¿Qué tal? ¿No me habías dicho que saldrías temprano hoy?

—Sí, pero me quedé... esperando a alguien.

—¿Me esperabas a mí?— La confianza en ambos había aumentado el último mes, solían bromar más e incluso se podría decir que ambos varias veces trataban de coquetear un poco con el otro.

—No tienes tanta suerte— Comenzó a reír con nerviosismo.

Había sido mala idea, pensó, si tan solo hubiera esperado un poco más de tiempo.

—Me hieres— Colocó una mano en su corazón haciéndola reír.

—Listo, ya...— Ari había bajado de las escaleras encontrándolos a ambos—. Ya te encontré, te fui a buscar arriba y no estabas— Trató de disimular—. Hey, ¿Qué hacen? ¿Los interrumpo?

—No, ¿Qué haces aquí?— Le siguió la corriente a su amiga.

—Estaba buscándote ya te dije— Le sonrió a ambos—. Félix, te la voy a robar, espero no sea molestia.

—No pasa nada, iba a clase— Las miradas de ambos conectaron cuando se encontraron—. Las veo después.

Se despidieron cuando Ari tomó por el brazo a su amiga para llevarla rápidamente afuera de la facultad.

—¿Por qué no me dijiste?

—No lo vi llegar— Samy volteó hacía atrás.

Su corazón latió rápidamente al ver como el chico lo detenía al final de la escalera, entregándole un sobre el cual tomó con normalidad, los perdió de vista pero esperaba que no se hubieran detenido para hablar sobre quien la había entregado.

Labios Rotos  ⸻  ❝Riverducción❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora