EL PRECIO DE LA VENGANZA (PAUSADA)

Capítulo 22

Daphne:

Permanezco acostada en mi cama, Jobbs me envió a mi departamento y cuando llegue me metí en la tina, luego de aplicar desodorante y crema sobre mi, seque mi cabello y me puse nada más que ropa interior, me acosté y dormí unas cuantas horas, ahora estoy observando el techo y no me gusta no tener nada que hacer.

Me estiro en la cama y cojo el celular, marco el número y lo llevo a mi oído hasta que escucho cuando toma la llamada

-Bonsoir Monsieur- (Buenas tardes señor) le digo a forma de saludo

-Quel plaisir d'entendre ta douce voix- (que placer escuchar tu dulce voz) dice en tono seductor -a que debo el honor, ma chère?- (mi querida?)

-Quiero follar- le hago saber

-Que directa- responde -J'aime- (me gusta)

-Donde estás?- pregunto

-Justo ahora desviando mi camino hacia tu departamento, te veo en 5 Fleur- corto la llamada con una sonrisa en mi cara, me levanto y aplico un poco de perfume sobre mi cuello

-Candy, reproduce Crazy de Aerosmith- pido y si, amo el Rock and Roll

-Reproductor encendido- informa y suena en los altavoces

-Desbloquea las entradas- digo mientras me coloco unos tacones

-Entradas desbloqueadas- avisa y unos minutos después escucho la puerta abrirse, sonrío de lado mientras camino hacia ella con dos vasos de mi whisky favorito

-Hola Francés- lo saludo con voz sensual y camino hacía el rubio que me come con la mirada sin pudor

-Fleur, no te haces una idea de cómo extrañe tu cuerpo- dice tomándome de la cintura y pegando sus labios a los míos en un ferviente beso al cual sigo gustosa, se separa unos segundos y me observa con deseo -soy tuyo por una hora, ma chére- dice mientras toma el vaso que le ofrezco y se lo empina terminando el liquido de un trago

-Aprovechemos entonces- digo siguiendo su ejemplo, dejo el vaso vacío sobre el mueble y el hace lo propio con el suyo

-Las ganas de follarte que traigo no son normales- avisa mientras agarra mi trasero con fuerza y comienza a besar mi cuello, le quito el saco con apuro y sigo con su camisa, tiro de su cabello hacía atrás y estampó mis labios con los suyos, nuestras lenguas se encuentran y se mezclan, me besa con hambre y yo le devuelvo el beso con la misma intensidad, paso una de mis manos por su abultada entrepierna y el gruñe sin soltar mis labios.. desabrocho su pantalón y lo dejo caer, saco su verga del bóxer y comienzo a masturbarlo tragandome sus gemidos al tiempo que magrea con fuerza mis nalgas antes de levantarme y ponerme contra la pared -ansiosa?- pregunta sin aire sobre mis labios

-Solo tienes una hora y yo muchas ganas de follar- le recuerdo y sonríe de lado mientras frota su dura ereccion contra la humedad de mi coño

-Me pones cuando estas mandona- admite entre gruñidos sin dejar de frotarse y yo me apoyo sobre sus hombros clavando mis uñas levemente en estos

-Te pongo cuando estoy de todas formas- le digo airosa

-Touche- vuelve a atacar mis labios mientras llevo mi mano hacía el mueble próximo y tomó como puedo un preservativo del cajón, el desabrocha mi brasier y se prende de mis pechos sin dejar de frotar su falo en mi coño

-Francés, dejate de previas que estoy lista desde que te llame- levanta su cara de mis pechos para apoderarse de mis labios clavando más su ereccion en mi centro, me besa con desenfreno y de forma bruta, abro el preservativo y lo pongo en su verga sin soltar sus labios, corre mis bragas a un lado y se entierra de una sola estocada en lo más profundo de mi interior, los dos soltamos un sonoro jadeo ante el delicioso contacto