Hits Different | Cuti Romero

Capítulo 21

2 de enero, 2019
Córdoba, Argentina

"Volver al lugar que la había hecho feliz y triste al mismo tiempo no era algo que Dalia ansiaba mucho. Había sido un año agitado en lo académico y en lo emocional los primeros meses. Por eso rondando abril había decidido bloquear a Cristian en WhatsApp, lo dejó de seguir en instagram y lo eliminó de sus seguidores también. Ver como continuaba su vida no le ayudaba en nada.

A partir de ese mes pudo pasar de página, aunque muy de vez en cuando su mente la hacía divagar y hundirse en los recuerdos. Pero volver al lugar de los hechos pegaba distinto. Fingía no saber la razón de sus nervios, pero la realidad era que era muy consciente de que el motivo era Cuti. La posibilidad de poder verlo después de casi un año hacía que doliera su estómago y no quería admitir que en el fondo quería tenerlo cara a cara nuevamente.

¿Qué le diría si se lo encontraba? ¿la saludaría como si nada o sería incómodo?. Cuando el avión aterrizó a Dalia le dolía la cabeza de tanto pensar y su madre se había dado cuenta de lo anormalmente callada que estaba, aunque no tenía idea de que era porque la que las iba a buscar al aeropuerto era Rosa, la madre de Cuti.

Cuando atravesaron la puerta de arrivos ubicaron a la mujer que los esperaba y Dalia sintió alivio de que no tenía a su hijo al lado.

—Qué pena que no pudieron venir para año nuevo —se lamentó Rosa en el auto, rumbo a la casa donde se iban a quedar.

—Pero viste que con el tema del trabajo... —dijo su madre.

—Sí, sí, me contaste. ¿La pasaron bien al menos?

—Fuimos con la familia de la mejor amiga de Li —Claudia la miró desde el asiento del copiloto y le sonrió.

—Ay que bueno, ¿acá ya planeaste salidas Li?

—Por ahora solo con mamá, mis amigos no están más en Córdoba.

—Su prima se fue a vivir con el novio a Estados Unidos y los otros dos chicos, Fran y Lucas, se fueron de vacaciones justo —le explicó Claudia a Rosa, que asintió.

—Así se van yendo los hijos che —suspiró Rosa. —Por primera vez pasé las fiestas sin mi Cuti.

—¿Cómo le está yendo en Italia?

Dalia frunció el ceño pero lo disimuló inmediatamente. Sintió los latidos de su corazón en sus oídos. No sabía que Cristian ni siquiera estaba en Argentina y aunque minutos atrás se alivió al no verlo, la noticia le había dado un impacto de decepción al confirmar que la posibilidad de tenerlo cara a cara se había reducido a cero. Ni ella misma se entendía.

—Se adaptó bastante rápido por suerte —contó con nostalgia —pero siempre que me llama dice que extraña mucho Córdoba.

—Me imagino, tiene veinte recién.

—¿A vos no te dijo nada Dali? —quiso saber Rosa, sacándola de sus pensamientos.

—Ehh, no... —se aclaró la garganta porque su voz había salido algo rasposa. —No solemos hablar —fue lo único que dijo para que no se ahondar más en el tema.