Seattle

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Lewis entró a la sala de George y dejó caer el casco sobre el sofá. Fue hasta la nevera y tomó una botella de agua. Sebastian y George entraron unos segundos después. George lo miró fijamente, como si tuviera algunas preguntas atoradas. Sebastian permaneció en silencio, algo incómodo.

—Deja eso en la cocina.- le dijo George al rubio mientras se quitaba su bufanda y su abrigo, colgándolos en el recibidor. Sebastian asintió y fue hasta la cocina con los paquetes de yogurt de fresa. Al pasar junto a Lewis le dedicó una mirada culpable, pero no dijo nada. Lewis notó que Vettel había comprado sus yogurts favoritos, no supo exactamente qué pensar al respecto.

—Ven acá.- George le hizo un gesto con su mano para que se acercara. Lewis dejó la botella sobre la mesa y obedeció.

—¿Que?

—Tienes que hablar con él. Ni se te ocurra ignorarlo.

Lewis enarcó una ceja.

—¿En serio? Yo no estaba jugando al vaquero con Raikkonen, ¿sabes?

Vettel regresó en ese momento, agachando la vista en cuanto escuchó lo que había dicho Lewis.

—Yo... lo siento por eso.- musitó.

—Creo que los tres tenemos que hablar.- continuó George, lanzándole una mirada a Lewis.— ¿Quién era ese?

Lewis le devolvió la mirada, aun con su ceja enarcada.

—¿De quién hablas, George?- Sebastian se acercó a ellos, mirando a ambos en búsqueda de respuestas.

—Él sabe perfectamente de quien hablo.- fue la enigmática respuesta de Russell.

—Eso no te incumbe.- Lewis se giró y tomó la mano de Vettel.—Ven, vamos a hablar.

Highway; chewis. AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora