capítulo 3O.

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—Perdón, pero tengo que irme —avisó Kuanjui mientras soltaba a Zhanghao —No puedo seguir contigo, se me hace tarde

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—Perdón, pero tengo que irme —avisó Kuanjui mientras soltaba a Zhanghao —No puedo seguir contigo, se me hace tarde.

—No Kuanjui, quédate —pidió mientras se aferraba de nuevo a él— Te necesito, llévame contigo.

A Zhanghao no le habían reconfortado los brazos del chico, mucho menos sus besos y no entendía porque él no le daba esa paz y tranquilidad que Hanbin le daba, pero quería aferrarse a que él era el indicado.

El celular de Kuanjui comenzó a sonar, por lo que se alejó de nuevo y contestó.

—¿Dónde carajo estás? llevó rato esperándote, si no te apareces aquí en los próximos minutos vas a lamentarlo —le advirtió Sung y sin dejarle responder, colgó la llamada.

—Escucha Zhanghao —le tomó de las manos— En verdad tengo que irme, estaré contigo después, ¿si?

— Por favor, no vayas —rogó Zhanghao y Kuanjui soltó sus manos y negó con la cabeza.

— ¡Ya te dije que tengo que irme! —alzó la voz haciendo que él pelinegro pegará un brinco del susto— Entiende, me meteré en problemas si no llegó.

—No tienes porqué gritarme, ¿sabes? —le reclamó— Bien, vete Kuanjui.

— No quería hacerlo, pero estabas insistiendo y no entiendes que... —no terminó la frase porqué Zhanghao había entrado a su casa cerrando la puerta de un fuerte golpe.

Él chico soltó un suspiro de frustración y estaba decidido a tocar la puerta para pedirle perdón a Zhanghao, pero ya no podía hacerlo, era tarde y necesitaba estar en su casa, así que comenzó a correr sin parar. 

— ¿Este chico cree que puede verme la cara de idiota? —se preguntó a si mismo, sabía que Kuanjui no iba a llegar tan pronto como le había pedido y eso lo hacía todo mejor, pues sería su excusa para golpearlo

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— ¿Este chico cree que puede verme la cara de idiota? —se preguntó a si mismo, sabía que Kuanjui no iba a llegar tan pronto como le había pedido y eso lo hacía todo mejor, pues sería su excusa para golpearlo. Si, así eso desquitaría todo su coraje, ¿estaba mal? tal vez, pero no le importaba.

Le había dolido ver a Zhanghao besándole, tanto que quería bajar del auto y alejarlo de él, de llevárselo y dejarle en claro que era solo suyo, pero no podía hacer eso, pero no, él no era un loco obsesionado, o ¿si?

oh, daddy ✧ haobinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora