11

55 21 4
                                    

Pueden oírla mientras lo leen, ya que se menciona la canción "Dandelions"
https://open.spotify.com/track/2eAvDnpXP5W0cVtiI0PUxV?si=LfT76ENIRwuP6gT3C7EiFw

· · · · ✦ · · · · · · · · · · · · ·

No eran los pétalos del aquel árbol de cerezo cayendo sobre su cabeza ni la brisa del aire chocando sobre sus mejillas, sino luceros brillando en su corazón que le hacían sonreír de par en par mientras seguía manejando su moto.

Le dolía el pasado del rubio, sin embargo, tenía la aceptación de su hermano para ser él quien pueda proteger a aquella flor de loto que sigue aferrándose a la vida por más cruel que sea.

Y es que así somos los seres humanos, nos sostenemos con fuerza a aquella pita delgada invisible para salir adelante y no dejarnos caer en aquel hoyo sin salida.

Jungkook le había confesado sus sentimientos sobre Jimin a Niki y aún no lo podía creer porque para alguien inexpresivo con personas a las cuales no tiene confianza, se le fue sencillo soltar lo que pasaba por su mente, corazón y ser.

Iba a lograr cada detalle de su propósito y resaltar siempre aquella galaxia que ya había encontrado.

A su mente vino una canción, pero no cualquiera ni de esas que solía cantar en el bar con un tono lascivo, sino una tranquila, calmada y llena de sentimientos.

"Dandelions" En efecto. Esa canción era perfecta para describir todo lo que sentía desde antes y en este preciso instante.

Porque él se hallaba dentro de un campo de dientes de león, deseando en cada una de ellas que el rubio sea suyo.

Nunca había igualado a Jimin con algo más que un ángel, se había limitado a más, sin embargo, ahora cuando el nombre de aquel rubio de ojos adoloridos venía a su mente, las flores de loto, las galaxias, los dulces con sabor caramelo y las galletas de vainilla, también llegaban a ser relacionadas con él.

—¡Min, Min, Min!—exclamó con una alegría indescriptible y con los ojos brillando como nunca. Se sentía con vida luego de mucho.

El mencionado direccionó su mirada hacía aquella voz conocida que gritaba sobre su moto mientras se aproximaba a su casa.

Sus ojos pequeños se abrieron al ver aquel radiar del menor. En verdad se veía como el antiguo Jungkook, aquel chico lleno de emociones cálidas que podía dar una explosión vibrante a la vista.

El alivio que no había sentido desde hace un año atrás llegó a llenarlo en ese preciso instante, sintiendo las suficientes ganas de llorar por tener de vuelta a su niño.

Si no hubiera sido por aquella fiesta, ese chico con ojos de bambi seguiría con esa linda sonrisa y expresiones hasta el día de hoy, pero el 27 de julio existía y siempre seguiría existiendo porque por más que lo deseé, nunca se podrá borrar de la faz de la tierra aquel mes ni aquel día.

—Guk—mencionó de pronto al sentir aquellos brazos envolver su cuerpo.

—Le dije a Niki que me gustaba Jimin y él me confió a su hermano. Esta vez sí podré mostrarle todo mi amor a alguien—soltó un ligero suspiro como si sus jóvenes hombros descargaran mucho peso por el recorrido de la vida.

Yoon Gi se quedó helado por unos instantes.

Aquello fue inesperado.

Su amigo había dado un gran paso y aunque aún no comprendía porqué escoger a Jimin ante muchas otras personas, podía darse cuenta que ese estado de ánimo se lo agradecería eternamente.

❥Through my eyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora