Capítulo IX "Promesa de las dos primaveras"

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Narra Zhu Yintai:

Durante los siguientes días esperé impacientemente noticias de Shanbo, pero fue en vano. No había una carta contestando la que le envié, ni una señal, ni absolutamente nada. Tal vez él no quería perdonarme, y si así era sería totalmente comprensible ¿Cómo podría confiar de nuevo en alguien como yo? Que viví de contar mentiras a todos los que me rodeaban durante los últimos meses. Estar en casa era una tortura, mi padre me había hecho conocer a quien él decía que sería mi futuro esposo, su nombre era Wang Ziháo. No era un mal chico, me trataba cariñosamente, era respetuoso e inteligente pero aún así yo no lo amaba, mi mente sólo estaba enfocada en la persona que realmente había robado mi corazón. No podía pensar en nadie más por mucho que lo intentara.

Una tarde, mientras admiraba el atardecer al caer, viendo el horizonte a lo lejos noté a un jinete que se acercaba apresuradamente en un hermoso caballo color azabache.

-Debe ser uno de los guardias de mi padre- No le dí mucha importancia y me volteé, dispuesta a entrar a la casa. Ahí fue cuando lo escuché:

-¡Zhu Yintai!- Alguien gritó mi nombre.

Nunca confundiría esa voz. Si no estaba alucinando, esa persona que se acercaba a toda velocidad era Liang Shanbo. Esperé que se acercara un poco más, hasta que pude reconocerlo. Cuando se bajó no me lo pensé dos veces antes de lanzarme a sus brazos, alegre de verle.

-¡¡Pensé que nunca más iba a verte!!- No podía parar de sonreír al saber que él había venido por mí.
- Creí que jamás llegarías- le dije abrazándolo fuertemente.

No debí haberlo soltado nunca.

-Te eché mucho de menos.
Leí tu carta, no tienes de que preocuparte, perdóname a mí por haber sido tan idiota, nunca te entendí realmente.- Dijo mirándome a los ojos.
-No. No eres idiota nunca digas eso otra vez- contesté.
-¿Cómo supiste mi nombre?-
-Xiao Xinyue me lo dijo cuando estaba a punto de irme y recordé el día que te presentaste cuando nos conocimos, con ese mismo nombre. Le agradezco por haberme echo llegar tu carta.-

Nuestras miradas se cruzaron y sólo tenía ganas de besarlo y escapar de todo, a su lado. Pero nuestro mágico momento fue rápidamente interrumpido.

-¡Zhu Yintai! ¡Ven aquí ahora mismo!-
Exclamó mi padre que estaba parado en la entrada de la casa, mirándonos con desaprobación.

-Señor, permítame presentarme mi nombre es Liang Shanbo. He venido porque me gustaría pedirle su bendición para nuestro matrimonio- Tomó mi mano y me miró decidido.
-¡¿Quién te crees que eres niño?! De qué familia provienes?-
-Vengo de una humilde familia. Vivimos al oeste de aquí, en un pequeño pueblo-
-¿Un campesino pidiendo a mi hija en matrimonio? Jamás lo permitiré. Márchate antes de que te saque por la fuerza. No quiero verte nunca más por mis tierras o acabaré contigo-

-Padre por favor ¡yo quiero casarme con él!- le dije, esperando que de alguna forma entendiera. Debí haber sabido que no daría resultado.

-¡Silencio Yintai! Entra a casa. ¡Ahora!¡Guardias saquen a esa rata de aquí inmediatamente! Y escolten a mi hija de vuelta a su habitación.

¿Por qué era tan injusta mi vida?

¿Acaso no tenía derecho a ser feliz como cualquier otra persona?

Por mucho que forcejeé y me resistí no podía hacer nada para evitar que se lo llevaran. Entonces me miró decidido y me dijo:

-¡Voy a regresar por tí! ¡¡No importa de la forma que sea, regresaré y seremos felices Yintai!! Lo prometo-
-¡Te amo! Esperaré tu regreso.- Le dije con todas mis fuerzas, desde el fondo de mi corazón.

Al parecer algunas promesas no son tan duraderas como deberían cuando las hacemos y las cosas tomaron un rumbo distinto. El tiempo pasó, el invierno acabó y con eso la primavera llegó. Así siguió corriendo el tiempo, pasaron 2 primaveras más y aún no sabía nada de él. Jamás regresó.

Fin
Continuará

The Butterfly Lovers: Second Chance #PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora