Cómo en todo había dos lados del mundo, el malo y el no tan malo, en una de esas salas de ejecutivos se encontraba un hombre, el narcotraficante más temido y buscado de Asia, lo llamaban Magic, ¿Que por qué lo llamaban Magic? sus manos podrían hacer cualquiera tipo de magia que pudieras imaginar, en cuestión de minutos podía desaparecer y aparecer todo lo que quisiera, nunca vas a querer entorpecer su camino, a menos que no quieras seguir viendo el sol. Traficar armas era su trabajo o como el mejor le decía a su negocio, "traficar diamantes negros".
Nuevamente Magic estaba tratando de llegar a un acuerdo con los cargamentos, en su rostro jamás verías alguna buena expresión, se limitaba a solo a ordenar o decir lo que quería y creía correcto, después de todo un hombre como él no debería tener corazón para nada y menos después que su esposa lo abandonó por irse con uno de sus tantos enemigos.
— Magic, — se escuchó en la gran sala— necesitamos que consigas nuevas armas el negocio se está expandiendo no solo en Asia en Europa también—hablo su socio Sirius.
Sirius era uno de los mayores socios de Magic, un hombre que le había demostrado lealtad y que podía tener la confianza de este mismo de ser su socio, se escuchó un pequeño golpeteo en el escritorio su anillo de matrimonio era el que lo hacía.
—Los diamantes negros ya están por llegar, en cuanto estén dentro del país mis hombres comenzarán a entregarlos, así que espero que estén limpias las rutas no quiero que el gobierno ni la policía estén en esto— dijo sin titubear— doy por terminada la junta, estaré en el bar, así que no quiero que nadie me moleste, a menos que tenga que ver con dinero o muerte. — dijo al levantarse de la mesa, todos los demás hombres lo hicieron dando una reverencia ante su salida.
Metió sus manos a los bolsillos de su abrigo, su porte tan elegante; sobrio, pulcro eran su mayor encantó, ese exquisito olor a tabaco con menta y roble.
Llegó a uno de los bares más exclusivos del país, su chófer abrió la puerta de su "Marc clarence", todos los del lugar lo atendían con lo mejor del lugar sea mujeres o licores era para los hermanos y él, aunque las mujeres eran en segundo plano, para ellos lo importante eran los licores y algunas partidas de póker, en una de las mesas cerca de la barra se encontraba uno de ellos, mejor conocido como Black, en sus piernas tenía una hermosa latina que hacía poco había echo su prometida
— Pide lo que quieras preciosa solo quédate donde pueda verte—dijo aquel hombre rubio.
—Está bien amor— este se alejó y fue hasta la mesa con su hermano, nadie tenía que enterarse de sus negocios, ni siquiera su prometida.
—¿Hablaste con Sirius? — cuestiono al llegar a la mesa— iremos a Latinoamérica la próxima semana sé que tu esposa es tu distracción, pero olvídala, ya se fue-tomo un poco del coñac.
—¿Cómo dices eso?, es mi esposa ¿debería no importarme? —Magic mostró su expresión de molestia, esa que la mayoría conocía.
Tomo su vaso de whisky su bebida favorita " Macallan Fine and Rare de 1926" ,mientras lo bebía observo todo el lugar como habitualmente lo hacía, aunque está vez su mirada quedaría congelada en la entrada, los ojos de aquél elegante hombre comenzaron desde el piso pasando por unos delgados pies dentro de unos tacones de color oro rosa seguidos por unas largas piernas color dorado que lo llevaban por un escote hasta llegar a su cintura dejando todo a la imaginación un delicado ombligo y unos pechos que podía jurar que eran a la medida perfecta de sus manos, el cuello le provocó una inmensa sed, y el color negro de ese vestido era muy poco comparado al de sus grandes ojos, un cabello ondulado tan oscuro como un caballo azabache de esos que tanto le gustaban al llegar a los labios eran tan delgados y carnosos a la vez, una belleza que lo dejo cerca... de perder la cordura.
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❝ Seduciendo A Un Narco❞
Ficção Adolescente╰─►⸙͎ - Belice era hija de un magnate de América, su empresa había crecido tanto que fue muy reconocida a nivel internacional en el mundo de los negocios, su padre quería que los negocios crecieran aún más y aliarse con una de las empresas de Asia l...