Fuyuhiko: ¿Se puede saber que demonios te pasó?
Dentro del cuarto del yakuza, el suertudo de la clase 77 era interrogado por su compañero. Lo que había visto allí fuera en el comedor junto a la reacción de su amiga de la infancia y guardaespaldas no fue para nada buena. Ya habían pasado cosas así antes, ya sea por un acercamiento excesivo por parte de Souda o por quien tenía enfrente por sus constantes cambios de comportamientos, así que, para evitar problemas prefería encargarse de esto por sí mismo antes de que terminen en un viaje al hospital o peor, sin retorno.
Nagito: En serio, no necesitas...
Fuyuhiko: No me vengas con esas mierdas Komaeda Nagito. Contrario a Nanami y a Naegi, yo no soy tan ingenuo como para dejarlo pasar así sin más.
A la sola mención del castaño suertudo, su rostro pasó de la misma sonrisa que siempre ponía cuando preguntaban sobre él (una muy similar a la de Naegi, quitando el autodesprecio claro) a mostrar un rostro en blanco, sin emociones, únicamente siendo traicionados por la ira y frustración en sus ojos.
El pecoso rubio solo suspiró ante esto. Lo único que no le cabía en la cabeza era una sola cosa...
¿Quién podría odiar al castaño?
Fuyuhiko: 'Ahora que lo pienso, están esos dos idiotas...' Escúchame bien porque estoy seguro de que Nanami ya te lo habrá dicho. Tenga talento o no, es un tipo respetable, deja de enfocarte en que si es o no un Definitivo, le das mucha importancia a algo como eso.
Valoras mucho los talento Komaeda-kun...
¿Cuántas veces más oirá la misma frase? La gamer y representante de clase se lo dijo en una de las tantas idas hacia el Curso de Reserva, él se lo dijo hace tiempo y ahora el yakuza...
¿Era alguna especie de castigo divino?
Lo único que deseaba era proteger la esperanza de de la escoria de la desesperación, tenerla en un pedestal y admirarla, evitar que alguien le hiciese algo a esa luz que tanto amaba.
Aquella luz la cual no merecía...
Fuyuhiko: Y para rematar, de no haber sido por mi hermana yo ni siquiera estaría en el curso principal...
La reciente declaración de su compañero provocó un cortocircuito en su mente...
¿Qué acababa de oír?
Fuyuhiko: Por la cara de sorpresa que tienes supongo que no te esperabas que dijera algo así, pero créeme que es cierto.
Nagito: ¡¿Pero cómo puedes decir eso?!
Fuyuhiko: - con una vena en la frente - Cálmate carajo. Primero escucha y luego opina. - masajeando el puente de su nariz - Haah, como sabes de sobra, somos dos hermanos, por lo que uno de nosotros heredaría el puesto de líder.
Nagito: Eres el mayor, así que era algo obvio de suponer...
Fuyuhiko: En eso te doy la razón, sin embargo, en mi clan este no es el caso. Lo que te voy a contar ahora, más vale y se quede en estas cuatro paredes...
Levantándose de su asiento, fue hasta el pequeño refrigerador y sacó dos latas de alcohol para ofrecerle una al albino.
Fuyuhiko: Seré directo... Desde hace años sentía que... no merecía ser el heredero de los Kuzuryuu...
________________________________________________________________________________Tenko: ¿Eh?
La genuina mirada confusa de la neo-Aikidista hacia la maid era esperada, después de todo, oír tal cosa viniendo de ella era realmente... raro, o mas bien imposible.
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DANGANRONPA: Un vistazo al multiverso
FanfictionVarios jóvenes de diversos talentos son transportados por un ente superior a un sitio completamente desconocido, en donde, según él, afirma que verán varios universos... Y quien sabe si también presenciarán... SU FUTURO