Apática

Capitulo 2

(Antes de comenzar):

—X hablando —

—X pensado—

(Intervención o aviso)

Autor hablando

CAPÍTULO 2:

Divertido...

La gélida brisa perteneciente del vistoso viento nocturno, se abría paso entre las rígidas aberturas provenientes de las expuestas ventanas, en consecuencia, la heladura afectaba hasta el último rincón de su remoto hogar

Kanao de igual modo sufría constantemente todo el frío al que era expuesto, su amplia manta la cubría por completo pero era evidente el temblor de su cuerpo

—Es-te frío e-es insoportable— La tartamudez de su voz ya no era resultante de los nervios, sino del intolerable frío que se ha manifestado por la engorrosa ventisca y la cegadora niebla

Sus dientes rechinaban con fuerza, contrajo sus piernas en una posición fetal mientras rogaba que su cuerpo lograra encontrar algo de calor, por un leve instante dio un vistazo al reloj posicionado por encima de la pequeña mesa que posaba junto su cama

2:34 am

Era un hecho, sus hermanas le mintieron, kanae le había dicho que vendría antes de las nueve, eso fue hace 5 horas, y shinobu... bueno, ella técnicamente jamás confesó si vendría tarde o temprano.

Era bastante tarde, y no estaba segura que sus hermanas hayan llegado, hay veces en las cuales se quedan en el hogar de sus determinadas parejas

Ellas podrían negar todo lo que quisieran pero el hecho es que ellas ya salen con alguien... y ella siquiera ha podido hacer un amigo

Sí, era todo un fracaso en establecer amistades, sobretodo cuando E trataba del sexo opuesto.

De tanto pensar en temas deprimentes su cuerpo llegó al punto del colapso, no sabe el momento en el cual cerró los ojos para no abrirlos en unas cuantas horas. Solo se dio cuenta de su yacer el día siguiente.

...   

Ya era viernes por la mañana, y la azabache se encontraba completamente arreglada, su uniforme limpio de cualquier rastro de suciedad y sorpresivamente nuevamente su corbata se encontraba perdida

—No puedo creer que se haya extraviado ya dos veces seguidas — Bufo con vacilación

Esta vez si fue culpa de ella, y en un acto desesperado busco y busco. Indago por toda la casa, reviso la alcoba, los cuartos, inclusive los baños tratando abrumadoramente de hallar el paradero de su infeliz corbata sin éxito alguno.

Supongo que es un hecho que está difundida, pero antes de rendirse decidió buscar en el último lugar que no fue y a la vez el más obvio posible

La caneca.

Sí, esa donde permanecen los atuendos recién lavados.

Efectivamente, su corbata se encontraba allí, esperando a ser usada.

Esperaba que su corbata no estuviera húmeda y mucho menos empapada, la última vez tuvo bastante suerte de no estar mojada,pero desafortunadamente para horror de ella, seguía húmeda y estaba bastante helada, nada atrayente a decir verdad, era un hecho que la noche anterior no aportó mucho a resecar la tela de su prenda formal. No había más alternativa, tenía que irse sin importar del mal estado de su corbata,sin embargo ya era demasiado tarde para desgracia de ella, finalizando el día, un sermón de su hermana era todo lo que la esperaría en casa