Había charlado con Mikhail un par de horas, hablaron sobre lo que ella esperaba del matrimonio y lo que él podía ofrecer de vuelta, Mikhail se había mostrado muy ofendido de que su padre pretendiera que él dependiera de la fortuna de los Sauvageau cuando él tenía su propio dinero y propiedades, le dijo que había adquirido recientemente un departamento en Paris para estar más cerca de ella y que pretendía que ella se involucrara en la sociedad parisina a su lado, tenían muchos negocios que al parecer ella no conocía y con los que él no estaba familiarizado, esperaba que todo eso lo resolvieran juntos.
Por supuesto que su padre estaba enfurecido y se lo hizo saber apenas Mikhail se fue.
La había seguido a su habitación prácticamente arrojando humo por las orejas, nunca lo habai visto tan enojado con ella, ni siquiera con lo de las llamadas de Alessandro se puso asi.
- ¿Te das cuenta de lo que acabas de hacer?
- Solo quiero conocerlo, fueron ustedes quien me comprometieron con un desconocido. Es tan malo que quiero conocerlo.
- No tienes para qué conocerlo.
Se sentía decepcionada de su propio padre, por años había tenido que memorizar los gustos de Valentino, ver las películas que veía, leer los libros que leyó, aprendió tiro con arco por él, incluso su comida favorita. La habían forjado para ser la esposa perfecta de valentino ¿Por qué no podía serlo para Mikhail?
- Estabas muy complacido de que Valentino fuera mi prometido, aun cuando yo lo detestaba.
- Por que Valentino es un idiota a quien podíamos tener entretenido con putas y alcohol, mientras recibiera nuestro dinero no se entrometería en nuestros negocios ni en tu vida, Mikhail es diferente, es astuto y controlador.
Eso quería decir que su padre la prefería casada con el estúpido de Valentino sin importarle si ella estaba interesada o no, si le importaba a su esposo o no.
No quería ser una muñeca de aparador, Mikhail le prometía libertad, mostrarle el mundo y hacerla participe de él, su padre prefería un hombre que la dejara en un rincón sin hacer nada mientras ellos controlaban su vida.
- Él quiere conocerme, está interesado en mí, me lo ha dicho.
- Está interesado en controlarte, en utilizarte a su antojo.
Le dolía que su padre le hablara de ese modo, acaso no podía creer que ese hombre pudiera amarla, acaso no al creía merecedora de ser amada.
Mikhail podría ser mayor y por supuesto que mas inteligente que su hermano, pero eso no quería decir que se estuviera aprovechando de ella, había sido sincero desde la primera noche. ¿Por qué regresó con un obsequio personal si para él solo era un negocio? Quería escucharla y tomarla en cuenta. Era mas de lo que su padre habai hecho esos últimos años.
- ¿Fue lo mismo que le dijeron de ti a mi madre?
Sivail se sintió herido, él se había resistido por años a estar con la Duquesa de Sauvageau a causa de posición social, tuvo que convertirse en un hombre digno para ella y aun cuando lo consiguió siguió sintiéndose inferior frente a su familia. Fue ella quien lo alentó a sentirse orgullosos de sus logros y lo mantuvo a su lado a pesar de las criticas de los demás.
Mikhail era frio y controlador, muchos en las hordas pensaban igual que él, si Valentino hubiese quedado al frente algunos podrían manipularlo, influenciar sus decisiones, Mikhail era inteligente, frio y un asesino consumado. No dudaba en cortar de tajo las ramas podridas, no se dejaba endulzar el oído y mucho menos influenciar en sus decisiones, además la unión con el jefe de la triada le daba ventajas sobre las otras familias. Pues tenia las armas y a los asesinos.
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Amor Ilegal 2
RomanceChristophine Daniau Sauvageau fue criada para ser la esposa perfecta, la mujer perfecta y la hija perfecta. Desde niña se le educó para ser la Princesa de la mafia, se casaría con Valentino Brooks y sería la consorte perfecta. Solo que no es perfect...