Al día siguiente del baile los jóvenes del clan Sakusei se levantaban un poco tarde de lo habitual- buenos días dormilones -dijo Karai mientras ayudaba a Yua a poner el desayuno en la mesa.
Si hubieras ido con nosotros también estarías igual -dijo Oshin viendo a Karai.
Pues que tal si mientras desayunamos nos cuentan como les fue? -dijo Yua. Los demás asintieron y mientras desayunaban le contaron cómo estuvo el baile.
Por cierto, Karai ya se encuentra mejor, así que mañana ya podrá irse -dijo Yua aprovechando que hubo un momento de pausa en la plática.
Es cierto, olvide que hablamos de eso ayer Yua -dijo Karai viendo a la mujer.
Y te quería pedir Miguelito, si no te molesta, podrías llevarla al hogar de los Hamato -dijo Yua viendo al mencionado que también le miró.
Todavía no recuerdo ciertas cosas como la ubicación de la guarida -dijo Karai rascando su nuca.
Mickey se lo pensó unos segundos- está bien, solo que la dejaré al lado de la entrada para que no vean
Gracias Mickey -dijo Karai con una cara que demostraba el gesto, a lo que el mutante asintió con una cara que decía "no hay de que".
El resto del día pasó con normalidad y al día siguiente las Sakusei se despedían de Karai que llevaba consigo las cenizas y objetos de Destructor, sin más la chica y el mutante salieron de la guarida.
De camino hacia el próximo destino nadie dijo nada, pues no tenían nada que decir, hasta que cercas de llegar, Karai habló- les puedo contar?
Mickey le miró, a lo que Karai continúo- sobre cómo estás en tu nuevo hogar, las personas con las que vives y sobre el clan Sakusei? Solo si no tienes ningún problema
Mickey dejo de verla un momento para pensar en lo que dijo, volvió su mirada a ella con una pequeña sonrisa- no veo ninguno, claro que les puedes contar, así sirve que ellos saben me encuentro bien, solo te pido no les digas la ubicación de la guarida, si te preguntan el lugar donde puedo estar les dices que no sabes porque ocupe mi elemento de rayo para llegar aquí muy rápido
Okey -dijo Karai, pues entendía que no quisiera que ellos supieran uno de los lugares donde puede estar.
Dieron unos pocos pasos cuando llegaron a la entrada de la guarida de los Hamato, se asomaron y no vieron a nadie- o están en el dojo o patrullando -dijo Karai y Mickey le encontró sentido.
Le entrego las cosas de Destructor y seguido puso una mano en su hombro- cuídate Karai
También cuídate -dijo Karai antes de darle una abrazo que fue correspondido, seguido se separo dando unos pasos atrás- nos vemos
El mutante se despidió con su mano y en su lugar quedó el rastro de un rayo. La joven se quedó mirando por dónde se había ido el chico.
Karai! -escuchó la voz de Leo a lo que giro su cabeza a la izquierda.
Mientras Mickey llegaba a su hogar, pues acordaron que después de que dejara a Karai fuera a casa donde lo esperarían su familia, al entrar vió a sus hermanas y madre hablando en la sala- hogar dulce hogar -se dijo antes de cerrar la puerta y unirse a la plática.
~Pocos días después~
Había pasado un tiempo desde que Karai se fue y se tomaron un tiempo de los patrullajes, a pesar de ya no haber amenaza Krang o del Pie, aún estaban los Dragones Púrpura y otros delincuentes.
En ese tiempo también fueron a hacer oficial la alianza entre su clan con el consejo Utrom, una noticia que llegara a todos los universos y dimensiones, pues será una noticia impresionante la razón de la alianza.
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Una Vida, Mi Gran Felicidad.
Ficção GeralAhora que Mickey se fue de los Hamato y está con las Sakusei, veremos su nueva vida con su familia de hermanas y madre, la nueva realidad para los Hamato; la vida de Mickey como un joven, llendo a la escuela, estando fuera de las alcantarillas de dí...
