CORAZON DE ARRECIFE PRÓXIMAMENTE EN FÍSICO

Capítulo 31

Demian

Mientras escuchaba su historia lo único que podía sentir es dolor por aquella niña que fue maltratada por sus padres y odio hacia ellos, en ningún momento deje de estrecharla entre mis brazos, cuando terminó giró su rostro para poder verme a los ojos, no había lágrimas, ni culpa, solo tristeza y aceptación. Deje un dulce beso en sus labios y confesé lo que siempre he pensado, que no es una asesina, no es su culpa la muerte de su hermana.

Entrelazando nuestros dedos, dijo que gracias a sus sesiones por fin pudo entenderlo y sanar. Antes no hubiera podido contarme esa historia sin quebrarse o sentirse culpable desde el primer segundo, pero ahora era diferente, esta parte de su vida estaba cerrada.

Reflexionar todo esto mientras estoy en el auditorio de la universidad sentado junto a otros miembros principales para dar inicio a la ceremonia de graduación de los nuevos maestrantes, me hace ver en la maravillosa mujer que se ha convertido.

Pasamos cinco docentes al escenario y nos paramos en el centro para entregar los títulos, Adrián empieza a llamarlos uno por uno. Siento que el aire se detiene en mis pulmones cuando escucho su nombre y la veo ponerse de pie, su cuerpo está cubierto por un elegante vestido de seda, sus tacones stiletto combinan con su atuendo color palo de rosa, se acerca con unos pasos, firmes, elegantes, seguros y una hermosa sonrisa en sus labios.

Arreglé todo para ser yo quien le entregara su título, se posiciona frente a mí y extiendo el papel, lo toma con una de sus manos mientras extiende la otra para que la estreche.

—Felicidades magíster Alaia Miller.

—Muchas gracias, Dr. Brown.

Aprovecho que nuestras manos siguen juntas para dibujar un corazón con mi pulgar sobre el dorso de su mano derecha, nos separamos y se acerca a los demás docentes para agradecerles y regresar a su puesto.

Mi amigo da el discurso final, una vez termina todos los graduados lanzan sus birretes al aire mientras gritan y aplauden emocionados, miro como mi pequeña hace lo mismo tan feliz y alegre por haber alcanzado otra de sus metas. Siempre que la veo encuentro una nueva razón para seguirla amando.

Me tranquiliza tanto saber que está disfrutando completamente de este momento, con el tiempo me he dado cuenta de que tenía una lucha interna al seguir con sus sueños relacionados con la biología marina por culpa de los maltratos que sufrió por parte de sus padres durante años. Sé que cuando se graduó de bióloga no lo disfrutó tanto, una parte la hacía creer que al estudiar eso estaba deshonrando la memoria de su hermana.

Sin embargo, desde que empezó a asistir a sus sesiones con la psiquiatra pudo entender que estaba equivocada y que no hay nada de malo en seguir con su sueño; hubiera deseado tanto ser yo quien la ayude a entender eso, pero estoy consciente que este tipo de temas, en los cuales intervienen traumas del pasado, deben ser atendidos por un especialista y que el amor que siento por mi novia no la iba a sanar mágicamente, pero lo que sí puedo hacer es estar presente apoyándola y valorándola.

Pasamos a la recepción que se encuentra en el mismo edificio, mesas con un elegante mantel blanco se encuentran en el lugar, una barra con distintos bocadillos y una zona de bar forman parte de la celebración. En el escenario un DJ es el encargado de poner música.

Varios colegas hablan de lo rápido que ha pasado el tiempo y las últimas investigaciones que se han hecho, intervengo en la conversación, pero estoy esperando que Adrián junto con Tomas regresen pronto.

Una risa que reconozco se acerca, giro y veo a mi mejor amigo acercarse junto a quien considero un segundo padre, saludan a las demás personas y se posicionan a mi lado, así que aprovecho e informo que debo retirarme un momento, caminó cerca del escenario y tomo una copa de champaña, el DJ ve mi señal y pone en marcha el plan.