Family at heart

11

Estaba comprando unos materiales para la Universidad cuando un extraño sentimiento se preocupación me invadió, ya había terminado de pagar las cosas que necesitaba para el proyecto y justo cuando estaba metiendo todo en mi carro, mi celular empezó a vibrar avisandome que me entraba una llamada.

— "nuestro Omega" — no entendía el porqué, pero desde hace rato eso era lo único que me decía mi lobo —

Con el ceño arrugado tome mi celular y conteste al ver que se trataba de Saint.

— ¿qué sucede? Ahora me encuentro un poco ocupa...

No pude terminar de hablar porque Saint me empezó hablar de una manera tan alterada y descontrolada, que no sabía ni como procesar todo lo que decía.

— ¡estaba hablando con Win y de repente dejó de hablarme! — se oía bastante agitado, como si estuviera corriendo — ¡despues se escucharon unos gritos, Win estaba con alguien más y por los gritos pude saber que se trataba de una pelea! ¡Estoy tratando de llegar a su casa lo más rápido que puedo, por favor ve rápido!.

Sentí mi respiración pesada y olvidando me de todo entre a mi auto y conduje lo más rápido que podia.

Me sentía estúpido al no haberle hecho caso a mi mal presentimiento.
Ahora entendía porque mi lobo se comportaba de esa manera, él solo trataba de advertirme que nuestro Omega estaba en peligro.

Cada vez me sentía peor y mis colmillos había empezado a salir de la ira que tenía en ese momento conmigo mismo, de verdad no podía creer que no había captada ninguna de las advertencias de mi lobo, me sentía inútil a la hora de defender a mi Omega.

— por fin —

Dije al poder ver la casa y poder estacionar me.

Pude ver que la puerta principal estaba abierta y eso hizo que soltara un gruñido, había un intruso en mi casa y lo podía sentir con mi olfato.

Corrí lo más rápido que pude pero mis ojos se abrieron de la sorpresa, para luego volver a gruñir y lanzarme sobre él alfa que se había escabullido en mi hogar.

Saint tenía muchos golpes en su rostro y pude ver cómo una ligera línea de sangre salía de sus labios, pero aún así eso no le importó y corrió al lado de Win para poder protegerlo, podía ver que Saint se encontraba completamente asustado y eso me lleno mucho de coraje porque no podía entender como algunos alfas se aprovechaban de su fuerza y golpeaban a los omegas, cuando lo único que ellos hacen es apoyarnos y darnos mucho amor.

La poca cordura que tenia se me había ido y lo único que mi mente me decía era que no parara de golpear al intruso

— ¡no te vuelvas acercar a mi omega! — grite sin parar de golpearlo. Estaba fuera de mi mismo —

Mi lobo había tomado por completo el control de mi cuerpo, quería matarlo, quería que no se volviera acercar a mi omega y cachorro.

— ¡vas a matarlo! —

Escuche el grito de Saint a lo lejos pero hice caso omiso y fue cuando sentí como se aferró a uno de mis brazos.

Soltando un gruñido lo mire y pude ver como sus ojos estaban llenos de miedo. Volví mi mirada al intruso y gruñi para luego alejarme del alfa sin apartar mi mirada de él.

— maldición — murmure para luego mirar a mi omega y ver en el charco de sangre que se encontraba —

Rápidamente lo tome entre mis brazos y sali prácticamente corriendo de ahí.

Saint trataba de seguirme el paso, se hizo en el asiento de piloto empezando a conducir mientras que yo en la parte trasera con Win.

— por favor no me dejes — rogue al ver cómo la piel de mi omega se estaba poniendo pálida —

Podía sentir y ver cómo el cuerpo de Win se contraía. El miedo se volvió apoderar de mi al pensar que perdería al amor de mi vida y a mí cachorro.

— no los debi dejar solos — dije empezando a soltar lágrimas pesadas —

— ahorita no hay tiempo de arrepentimientos, tienes que ser fuerte por Win y él cachorro — me dijo Saint sin apartar la vista del camino — los tres tienen que ser fuertes.

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Cuando llegaron al hospital atendieron rápidamente a Win y lo llevaron a la sala de partos, ya que según lo que les había explicado él doctor él bebé tenía que nacer ese mismo día si no querían que ambos perdieran la vida, además de eso existía un 30% de posibilidad de pérdida del embarazo.

Bright no sabía que haría si llegará a perder a alguno de los dos, para él su omega y su cachorro eran toda su vida y perder una parte de ella lo destruiría por completo.

— se que es duro, pero debes de calmarte un poco — dijo Zee al ver cómo su primo ni siquiera parpadea al mirar la puerta por donde se llevaron a Win —

— no puedo — fue lo que respondió Bright, para luego caminar al frente de la puerta — ya han pasado dos horas.

— no se mucho de partos, pero se que no es de un minuto a otro — volvió hablar Zee — no es fácil para nuestros omegas pero se que ellos dan todo de si mismos, para que nuestras crías nazcan sin ningún problema.

Con delicadeza Zee tomó la mano de Saint y dejó un dulce beso en ella.

Zee sabia que muchas veces se podía comportar como un idiota, pero lo que siempre sabría y lo demostraría es que tiene un hermoso y gran omega que sería capaz de dar toda su vida por él.

— "los alfas somos unos idiotas" — dijo él lobo de Zee mientras sus ojitos brillaban, al ver a Saint — "nuestros omegas son nuestras vidas".

Bright logró sonreír un poco al ver a ese par, seguramente muy pronto estara acostado junto a su omega y cachorro. Sabía que Win estaba herido cuando llegaron al hospital, pero tenía que confiar en que Win podrá salvar a su cachorro y así mismo, ya que a pesar de que los doctores son los que operan, todo depende de la resistencia del omega.

— tu puedes mi amor —

— "tu puedes mi omega" —

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Hola a todos ¿como están?...
Espero les halla gustado este capítulo y perdon por si hay errores de ortografía.

Nos leemos pronto.
Bye.