Capítulo 04

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Me besó.

Sus labios eran más suaves que cualquier cosa que haya sentido antes, encajaban tan perfectamente con los míos que me costaba trabajo no pensar que estaban hechos para que yo los besara.

Bill abrió su boca dándome el pase que necesitaba para enrredarnos totalmente en un beso lujurioso. Subí mis manos hasta su pequeña cintura y lo apreté.

Quizá era efecto de todo el alcohol que habíamos
estado bebiendo pero todos mis sentidos estaban alterados, mi sangre hervía como el infierno y Bill no parecía quedarse atrás. Sus manos recorrían mi pecho y abdomen con desesperación y torpeza, aprecia tan absorto en la situación como yo.

Metí mis manos debajo de su camiseta y lo sentí temblar bajo mi tacto. Su piel era tan suave como podría haberla imaginado.

Bill Llevó su mano a mi entrepierna y presionó ligeramente mi miembro haciéndome soltar un jadeo en su boca.

-Espera. -Susurré sobre sus labios.

-No... -Mordió mi labio inferior y tiró de él levemente. -No pienses. -Subió sus manos hasta mis mejillas evitando que me alejara de él. -No pienses ahora.

-No es eso. -Sonreí. -Alguien pude salir y vernos.

Como si lo hubiera invocado escuché la chapa de la puerta sonar anunciando que alguien estaba abriendo la misma, ambos nos separamos de golpe.

-Chicos. -Georg salió riendo. -Tienen que entrar, Derek está apostando que puede beberse toda la botella de vodka en treinta segundos sin vómitar.

Maldije mentalmente a Georg por ser tan inoportuno.

-¿Con quién apostó? -Bill trató de seguirle la conversación como si realmente estuviéramos interesados en la soberana gilipolles que estaba pasando dentro.

-Jens.

-Por qué no me sorprende -Acomodé mi gran camiseta para ocultar que estaba totalmente excitado.

Derek y Jens siempre competían entre ellos para demostrar quién es el mejor en todo lo que se les ocurría.

-Bien, entremos -Carraspee. -Quiero ver a Derek perder.

Georg se apresuró a entrar, seguido por Bill y finalmente por mi.

-¡Que puto asco! -Sara soltó una carcajada y le dió unas palmadas en la espalda a Derek.

Él estaba en medio de la sala empinandose una botella de vodka a la que aún le quedaba un tercio de alcohol.

-¡Tu puedes hijo de puta! -Animó Kay.

Derek bajó la botella un momento y cubrió su boca. Jens sonreía con seguridad.

-Si me vomitas la alfombra te voy a cortar el otro ojo. -La amenaza de Georg hizo reír a Bill. Su risa era muy linda.

Me acerqué un poco más a él y aproveché que la atención de todos estaba sobre Derek para abrazarlo por detrás y darle un pequeño beso en el cuello.

(...)

Desperté con la cabeza dándome más vueltas de lo habitual, fruncí el ceño e intenté abrir los ojos poco a poco, la luz del sol entraba a mi habitación por un pequeño espacio que quedaba entre mis cortinas cerradas y me daba justo en la cara. Estiré mi brazo hasta encontrar mi teléfono y miré la hora.

10:27 am.

Me levanté lentamente para evitar una jaqueca y fui al baño a asearme, tomé mi cepillo y comencé a lavarme los dientes.

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