(34) ¡Cita!

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Narrador omnisciente

22/02/14

Hoy, en pocas horas, sería la cita a la que Tom había invitado a Samantha.

Ella no sabía que ponerse y estaba muy apurada. Quería verse linda y según ella, no tenía nada de ropa bonita. (Tenía un closet repleto de ropa).

Llevaba más de media hora revisando en todas las cajas y cajones de su habitación, sin encontrar algo que le gustara.

Hasta que de una maleta que estaba hasta el fondo de su armario, sacó aquel vestido que ella había ocupado en la primera cita con Tom, cuando la llevo a ese hermoso picnic, esos fueron los pequeños detalles que hicieron que Sam se enamorara completamente de él.

Samantha se puso ese vestido blanco que le traía tanta nostalgia, para su suerte, este aún le quedaba y perfectamente bien. El vestido era blanco, un poco pegado el cual resaltaba sus curvas, también tenía unas mangas bombachas muy lindas. Lo acompaño con unos tenis blancos para estar más cómoda y un bolso blanco.
Se puso algo de maquillaje y se planchó su cabello rubio, amarrándolo en una media coleta y acompañándolo con un listón.

Samantha también había cambiado un poco, ya no solía ponerse esa sombra negra en sus ojos, esto a cambio había cambiado por algo mucho más sutil, como lo era un poco de brillo y una sombra café claro.

El tiempo se había pasado demasiado rápido y según su reloj, faltaban 10 minutos para que Tom pasara por ella, como en los viejos tiempos.

Salió para pedirle su opinión a Harry, quien estaba jugando juegos en su teléfono como si de un niño pequeño se tratara.

—Harry, ¿que opinas? —Pedí su opinión con una sonrisa en mi rostro.

Harry subió levemente su mirada y abrió la boca en señal de que le había gustado.

—¡Wow!, ven acá reina. —Se levantó del sofá y le dio una vuelta para poder observar mejor su bello conjunto. —¡Te ves preciosa!, ahora entiendo a Tom.

—Gracias... este fue el que use en nuestra primera cita, ¿crees que lo recuerde?, fue hace mucho... —frunció el ceño y le dedicó una sonrisa con la boca cerrada.

—Si no recuerda a este pedazo de bombón, entonces no es el indicado. —Le guiño el ojo.

Samantha rio y de repente escuchó el claxon de un auto, lo que significaba que Tom ya estaba esperando fuera.

—Debo irme, regreso más tarde... o no... —Le regreso el guiño y antes de que Harry comenzará a protestar, salió de la casa.

Al salir vio a Tom recargado en su vehículo con un cigarro entre sus labios, intentando prender este.
Se veía tan similar al Tom de antes, pero tan diferente al mismo tiempo.

Al parecer Tom aun había notado la presencia de Sam por que estaba muy ocupado encendiendo el cigarro.

—¿Necesitas ayuda con eso? —Tom pego un pequeño salto al ser sorprendido por la voz aguda de Samantha.

—Carajo... me espantaste, bonita. —Dijo y después se dedicó a admirar aquel vestido blanco. —No puede ser posible. —Exclamó al notar lo que traía puesto, recordó aquel vestido que ella había usado en esa primera cita, por que fue el que poco después le quitó con sus propias manos.

—¿Lo recuerdas? —Pregunto con una gran tierna sonrisa.

—¿Que si lo recuerdo?, ¡claro que si!, ¿como olvidarlo? —Soltó este, introduciendo su cigarro en su boca, inhalando el humo.

What are the chances? - Tom kaulitz - Donde viven las historias. Descúbrelo ahora