It's always you "Lee Heeseung„

Capítulo 28

| Eunji |

"Porque Sunghoon dijo que quería arreglar las cosas" Cuando dije eso me sentí idiota, siempre era lo mismo y aún así yo estaba de tonta esperando a que las cosas cambiaran, seguía haciéndole daño a Heeseung. "De verdad, no pasó nada más"

"Pues lo que yo ví parecía decir otra cosa, ¿Además como puedo estar seguro de que no hicieron algo más?" Al momento en el que eso salió de su boca toda mi lastima pasó a ser molestia.

"¿Si no confías en mí por qué lo estamos volviendo a intentar?" Yo grité alterada en respuesta a lo que había dicho.

"No lo sé, Eunji" Él susurró y yo pude sentir como mi corazón comenzaba a doler. "Tal vez porque estoy jodidamente enamorado de ti" Él volvió a hablar, pero esta vez gritando y entonces caí en cuenta, Heeseung me amaba y yo también lo hacía, pero yo, a diferencia de él, demostraba todo lo contrario. "Pero al parecer tú nunca sentirás ni la mitad de lo que yo siento" Una expresión de confusión se adueñó de mi cara en ese instante, eso era mentira.

"¿Que no siento ni la mitad de lo que tú sientes?" Le grité con un tono sarcástico y ví como su paciencia se estaba agotando.

"Yang Eunji, ya basta" Él gritó luego de unos segundos en silencio, haciendo que me asustara. Ya mi rostro estaba lleno de lágrimas y me sentía inútil. "Ya basta, ya está, necesito estar solo y tú también lo necesitas, cuando estemos más tranquilos hablamos las cosas, pero por ahora dejemos esta pelea aquí" Cuando dijo eso y comenzó a caminar, mientras yo caía al piso envuelta en lágrimas.

Sentía los pasos de las personas pasando por mi lado y sabía perfectamente que solo recibía miradas raras, parecía una idiota actuando de esta manera.

"¿Estás bien?" Escuché una voz aguda junto a un toque en mi hombro.

Levanté mi mirada consiguiéndome a un niño pequeño con mirada preocupada.

"Sí, estoy bien" Fingí una sonrisa y limpié mis lágrimas.

"Las chicas bonitas no tienen que llorar" El pequeño me sonrió y yo apreté mis labios.

"Junghee, ven aquí, ya nos vamos" Una voz a lo lejos se escuchó e inmediatamente el niño volteó y se fue corriendo.

¿Junghee? Definitivamente había escuchado ese nombre en algún lugar, pero dejé mis pensamientos de lado y me levanté con dificultad, haciendo camino a mi casa.

Cuando llegué, no había nadie y lo agradecí. Estuve el resto del día tirada en mi habitación, pensando en las cosas y llorando como una niña pequeña. No quería alejarme de Heeseung, pero no quería seguir haciéndole daño porque sabía que yo no estaba sufriendo ni la mitad que él y lo comprobé el día que lloró en mis brazos.

Escuché como tocaron mi puerta y no hice nada, hasta que siguieron tocando y rodé mis ojos soltando un suspiro, ya cansada. Me levanté y abrí molesta la puerta.

"¿Qué?" Expresé con amargura, pero al instante me sorprendí al ver quién estaba en la puerta.

"Eunji, necesito hablar contigo" El chico pasó sin que siquiera le diera permiso y se sentó en mi cama.

"Sí, ¿De qué?" Yo tragué en seco, sentándome frente a Jake en el piso.

"Es sobre Heeseung" Cuando escuché eso bajé mi mirada y comencé a golpear mis dedos contra el piso. "Mira, Eunji, realmente me caes muy bien y no tengo problema contigo, pero sí tengo problema con el daño que le haces a Heeseung. Siempre que pasa algo entre ustedes llega borracho a su departamento y hay días en los que ni siquiera llega, fuma bastante por día y hay veces en las que incluso intenta drogarse" Él intentó seguir, pero noté como su voz se cortó, le dolía ver a su amigo así, era evidente. "Solo te pido que te alejes de Heeseung si seguirás haciendo las cosas de esa manera, pero si piensas cambiar, hazlo, solo no sigas haciendo sufrir a Heeseung" Luego de decir esto, no esperó repuesta de mi parte y se levantó saliendo del lugar.