TE AMO EN LA MODERNIDAD [Brahms Heelshire X Tú]

Primera pieza: Sueños VIII

4 / 7 / 11

La morena se despertó por la ruidosa alarma. Un tanto desganada la apagó, vaya que se había acostumbrado a levantar tarde. Se estiró aún acostada, cuando su brazo cayó en el otro lado de la cama se dió cuenta que estaba sola.

Oh... Claro, se me había olvidado...__ comento nostalgica

Se incorporó por fin y se levantó, lentamente camino hacia el baño y tomo una ducha. Una vez salió, se vistió "estrenando" aquel ropero viejo con un gran agujero en la puerta, ella sabía por qué tenía aquel hoyo Brahms se lo contó. Suspiro de tan solo imaginarse aquello, aquel hombre del cual está enamorada alguna vez fue el acosador de la güera que quiso matarlo.

Que locura...__ susurró

Escogió un cómodo atuendo para poder moverse por la mansión fácilmente y se ató el cabello. Vio de reojo el reloj y ya eran las 7:30 que rápido pasa el tiempo.
Abrió su maleta y saco el papel, eran las reglas, leyó una por una nuevamente y las analizó.

1.- No se permiten invitados...
2.- Nunca dejar solo a Brahms... Que egoísta...__ río.
3.- Guardar la comida en el freezer... Creo que deberíamos actualizar estás reglas, nisiquiera hay luz
4.- Nunca cubras la cara... ¿De Brahms? ¿Por qué le cubriría el rostro? Es lo que menos quisiera, es muy apuesto...__ sonrió.
5.- Leer siempre un cuento. Pues me parece que ya es mayorcito como para leerle cuentos__ exclamó.
6.- Música fuerte... ¿Fuerte? ¿Rock?__ río por su tonta broma.- Obvio no... Mmm la 7 está tachada...
8.- Brahms no debe comer solo o sino que... ¿Se muere? Son demasiadas exageradas estás reglas... Que barbaridad__ suspiró.
Y por último y la que ya conozco a la perfección 9.- Siempre darle un beso de buenas noches...__ hizo una pausa y sonrió al recordar aquella vez dónde Brahms le había exigido un beso.- Me gusta cuando es así...

Después de volver a la realidad, guardo las reglas en su pantalón y se dirigió al cuarto de Brahms.
Primero dio unos leves toques y al no escuchar respuesta abrió lentamente la puerta.

¿Brahms?...__se asomó desde la puerta

La morena vio que Brahms estaba aún acostado, se rió silenciosamente cuando notó como la cama se hundía por el gran peso del hombre, se veía divertido un hombre grande durmiendo en la pequeña cama de un niño.

Se acercó con cuidado y se puso a su lado, observando como este dormía. Dudo en si debería despertarlo pero las reglas eran estrictas, aunque nisiquiera ella quería seguirlas, estaba segura que quizás esto ayudaría a poder comprender mejor a Brahms. Aún así, no quiere ser estricta con él, eso no ayuda a que progrese, a nadie le ayuda tener un horario estricto, dónde no puedes decidir que quieres hacer, solamente debes seguir reglas sin protestar.

Eso es un asco...__ comentó triste.- Tú no eres un esclavo... Nadie debería de serlo, nisiquiera de uno mismo__suspiro.- ¿Por qué te aferras en seguirlas?¿Por qué quieres vivir según lo que diga un simple papel?...

Extraño a mis padres__ respondió en voz baja

¿Estabas despierto?__ comento sorprendida, él asintió.- Discúlpame por decir eso, es que yo también lo viví y ahora lo detesto, por eso me preguntó por qué tú te aferras cuando yo lo único que quería era huir de eso...

Él se giró para verla.- Nisiquiera se por que lo hago... Ame mucho a mis padres, ellos siguieron las reglas para darme a entender que aún cuando sucedió todo aquello, no había cambiado nada, que yo no era un mounstro... Cuando las dejo de seguir, siento que soy un mounstro, uno que no merece ser tratado como humano