Una academia que se encarga de criar a los herederos al trono. En esta se encuentran criaturas de todo tipo, la fantasía abunda en este lugar. Tienen la llegada de un nuevo aprendiz: Han Jisung, un lindo elfo, no tiene mucho de fantástico pero él tr...
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La realeza está acostumbrada a que, antes de la diversión siempre tiene que existir una condición y esa academia jamás los haría perder esa costumbre, era una sorpresa para los estudiantes de aquel lugar, pero se podía sentir la presión en cualquier rincón. Jisung no lo entendía, pero de la nada todos prestaban más atención que de costumbre a las clases, entregaban todos sus trabajos a tiempo y competían por ver quién era el mejor, no solamente notó eso en sus compañeros, también lo notó en sus propios amigos. En ese momento se encontraban en una zona especial de estudio, era mucho menos concurrida que la biblioteca, es por eso que se encontraban ahí, lo mejor es que se permitía hablar así que no había problema si querían quejarse o simplemente maldecir a lo alto, ya que el lugar tampoco tenía supervisión.
–¿Cuántos puntos te dió Lisa?– Preguntó el rubio pecoso al pelirrojo.
–Doce– Se cruzó de brazos orgulloso moviendo sus cristalinas alas con estilo.
–Me estás jodiendo– Escupió molesto –Nadie había superado el ocho ¿Haces trampa?– Arqueó una ceja mientras metía un trozo de manzana a su boca y lo masticaba.
–Solo soy bueno bailando, puedo sentir la música en mi ser y eso me hace aún mejor, debes disfrutarlo para hacerlo bien– Hyunjin era bastante presumido con sus talentos y habilidades, no para hacer sentir mal a sus amigos, pero le gustaba mucho hacerse lucir.
–Claro, con el sexo es igual– Soltó una risa el pelirosa sin quitar la mirada de su enorme libro.
–Este sinvergüenza, solo piensa en sexo– Dijo indignado el hada mientras volvía a leer un pequeño libro.
–¿Podríamos dejar de hablar sobre eso?– El peliazul cubrió su rostro avergonzado, no estaba muy acostumbrado a hablar sobre aquellos temas tan delicados, todavía le costaba creer que había hecho el amor con Minho.
–Como sea, pienso superarte en la clase de Lisa, Hwang– Retó el pecoso al pelirrojo mirándolo de forma amenazante.
–¿Qué tiene de relevante superar a alguien en una clase? ¿Por qué todos están tan raros últimamente?– Preguntó ya harto de todas esas conversaciones.
–Es verdad, no lo sabe– El pelirosa cerró aquel enorme libro con hojas desgastadas, ya harto de estudiar, debía distraerse con algo antes de volver a hundir su cabeza en letras y hechizos –¿Sabes que el baile está a nada de suceder?– El elfo asintió –Antes de eso, los padres vienen a la academia a revisar los avances que han tenido sus hijos, obviamente todos estamos necesitados de elogios después de que nos trajeran a esta enorme prisión– Explicó ante la atenta mirada del menor.
–Suena tonto pero en verdad la mayoría necesita cumplidos de sus padres– Rió el pelirrojo acomodando su cabello.
–En serio suena tonto– Hizo una mueca de disgusto –No necesito la aprobación de nadie– Dijo molesto.
