The Part Time Worker | Sunghoon Park

capítulo 2

— Hola.—saludé con una sonrisa al entrar a la tienda, Sunghoon miró en mi dirección y me sonrió ampliamente.

— Hola, Yerim.—me acerqué a él y le entregué su chaqueta en una bolsa de papel.— Gracias... ¿Cómo te fue en la universidad?—preguntó poniendo la bolsa detrás de él.

— Normal, ni bien ni mal, sólo... Normal.—respondí apoyándome en el mostrador.— ¿Cómo te fue a ti?

— Pues... Bien, supongo...—un suspiro salió de sus labios, notándose algo desanimado.— ¿No te ha pasado que a veces tienes días donde te arrepientes de haber escogido la carrera que estás estudiando?

— La verdad no... ¿Así te sientes tú?—asintió sin mirarme.

— Yo no quería estudiar comunicación y aunque le tomé el gusto conforme pasaban las semanas, hay días como hoy donde simplemente siento que estoy perdiendo el tiempo, no lo disfruto, no me apasiona...—apretó los labios y volvió a suspirar.— No, no es la carrera de comunicación, sentiría lo mismo si estuviera en cualquier otra carrera... Me siento así porque mi carrera soñada se arruinó...—murmuró, parecía estar hablando más consigo mismo que conmigo.

— ¿Y cuál era esa carrera?—pregunté con curiosidad, levantó la vista mirándome con expresión seria por varios segundos. 

Abrió la boca para comenzar a hablar y justo en ese momento unos clientes entraron a la tienda, me alejé del mostrador para fingir que estaba viendo los productos y tomé un paquete de goma de mascar sabor uva, leyendo sus ingredientes.

— Te vimos perfectamente, Yerim, así que no finjas que estás leyendo eso.—me sorprendí al escuchar la voz de Inhye y la miré, me sonrió divertida. A su lado estaban Taehui y Sungkyung, una amiga de la secundaria.

— ¿Qué están haciendo aquí?—me acerqué a ellas.

— Vinimos a comprar algo de alcohol y frituras, ¿no es obvio?—Taehui respondió yéndose por los pasillos hasta llegar a los refrigeradores.

— ¿Es él?—Sungkyung me susurró mirando de reojo a Sunghoon, asentí ligeramente.— Es muy guapo, te envidio.—me sonrojé por sus palabras y me aclaré la garganta.

— ¿No vas a presentarnos?—Inhye me codeó.

— Ah sí... Sunghoon, ellas son mis amigas, ésta de aquí es Kim Inhye.—señalé a Inhye.— Ella es Kim Sungkyung y la borracha de allá es Park Taehui. Inhye y Taehui son mis roomies, ya te había hablado de ellas.—más bien me había quejado de ellas, esperaba que Sunghoon no mencionara eso.— Chicas, él es Park Sunghoon.—comenzaba a preocuparme que mis amigas hicieran una broma para hacerme quedar frente a Sunghoon, las conocía muy bien.

— Es un gusto conocerlas.—Sunghoon les sonrió.

— El gusto es nuestro.—Inhye respondió por las tres y se le quedó mirando a Sunghoon, luego ladeó la cabeza.— Oye, me pareces conocido...

— Pues sí, lo has visto aquí antes.—Taehui apareció con un paquete de cervezas, Inhye negó din dejar de mirar a Sunghoon.

— No... ¿Has salido en la televisión?—le preguntó y pude notar que Sunghoon se ponía nervioso.

— No, no, jamás he salido en la televisión... De seguro estás confundiéndome con alguien más.

— Mmm... Puede ser... Bueno, vamos por unas frituras, Kyung.—tomó del brazo a Sungkyung y se la llevó al pasillo de las frituras, Taehui las siguió.

Apreté los labios y miré a Sunghoon, estaba mirando algo en su celular, ignorándome. ¿Por qué se puso nervioso por la pregunta de Inhye? Me parecía algo raro pero no me atreví a preguntarle. Me removí incómoda y jugué con mis manos.

— Oye.—lo llamé acercándome al mostrador.— ¿A qué hora sales de trabajar?

— A las nueve... ¿Por qué?

— ¿Te gustaría cenar conmigo?—le sonreí.

(...)

— Creí que me llevarías a un restaurante cuando me invitaste a cenar.—Sunghoon dijo con una sonrisa burlona mientras sacaba la comida de mi cesto y la ponía en la mesa, nos encontrábamos en el parque al que fuimos el día anterior.

— Perdóname pero soy pobre, sólo puedo ofrecerte comida hecha por mí.—me senté y Sunghoon tomó mi mano, dándome suaves caricias.

— Estoy bromeando, Yerim, no me importa que la cena sea en un parque a las casi diez de la noche.—ambos reímos, tomé unos platos desechables y serví la comida para los dos.— Mmm, huele muy bien.

— No es por presumir pero todos los que han probado mi comida quedan encantados.—dije con una sonrisa y le di su plato. 

— Ya veremos.—tomó unos palillos y probó la comida, sus ojos se abrieron en grande y me miró sorprendido.— ¡Wow! Esto en verdad está delicioso, Yerim... ¿Cómo puede ser posible?

— Mi madre es chef y cuando era niña me enseñó a cocinar, esa es la razón por la que sé cocinar tan bien.—dije con orgullo, me ponía muy feliz cuando la gente probaba mi comida.

— Sería el hombre más feliz del mundo si comiera esto todos los días.—dijo arrasando con la comida en su plato, solté una pequeña risa.— ¿Puedo comer más?—asentí sirviéndole otra ración.

Cenamos entre risas y chistes malos... En verdad disfrutaba mucho la compañía de Sunghoon. Cuando estaba con él sentía algo que no había sentido antes, sí, me había enamorado en el pasado pero lo que sentía por Sunghoon era diferente... Aunque bueno, fue el primer chico que correspondió a mis sentimientos o que al menos se sentía atraído por mí.

Me acompañó a mi edificio cuando dieron las doce de la noche, el tiempo se pasa volando cuando se disfruta de la compañía de alguien. Nos despedimos con un beso pero éste fue diferente al otro, éste duró más y Sunghoon me tomó de la cintura para acercarme a él, cuando nos separamos teníamos la respiración agitada y las mejillas sonrojadas.

— Nos vemos, Yerim...—susurró acariciando mi mejilla.

— Adiós, Sunghoon....—nos separamos y lo miré irse para luego subir a mi departamento. Apenas me estaba quitando los zapatos cuando Inhye llegó y me jaló del brazo llevándome a su habitación.

— ¡Yo sabía que lo conocía de algún lado!—dijo histérica.— Es Park Sunghoon, el patinador artístico que le gustaba a mi hermana... ¡Mira!—señaló su computadora donde se estaba reproduciendo un vídeo. Alcé las cejas incrédula, era Sunghoon patinando en una competencia internacional.— Le diría a mi hermana que lo conocí pero me da pena decirle que su patinador favorito ahora es un simple cajero en una tienda de conveniencia.

Ignoré lo que decía y miré los comentarios, había un comentario fijado donde explicaban lo que había sucedido con Sunghoon... Se lesionó durante una competencia en Bangkok, se arruinó su oportunidad de ir a las olimpiadas y su carrera terminó ya que después de la cirugía su rodilla quedó mal. Había un enlace al vídeo de su caída... No me atreví a verlo.

Salí de la habitación de Inhye sin decir nada y fui a la mía... Su actitud áspera, el dolor de rodilla y su nerviosismo por la pregunta de mi amiga, todo cobraba sentido. Me senté en la cama todavía conmocionada por la información que acababa de conocer.

¿Debía decirle a Sunghoon que sabía de su pasado o esperar a que él me lo contara? No estaba muy segura...