Adolescentes Caóticas I

¿Será verdad?

SCARLETT.

'Scarlett Overdeen, hermosa, ingeniosa, espectacular, inteligente, audaz, amable y... perfecta."
Repito en mi cabeza, mientras me pinto los labios enfrente del espejo, con mi pintalabios favorito, de un color rojo que combina con mi cabello, que ahora está peinado en una cola de caballo. Bajo el pintalabios, y veo el trabajo de mi maquillaje; es tan perfecto para mí, unas sombras de tono negro bordean mis ojos verdes, mis cejas alineadas y depiladas perfectamente; y una capa de bases, iluminadores y contornos en mi cara, para perfeccionar mis facciones.
- ¿Por qué tenemos que hacer una fiesta aquí? – dice con tono de aburrimiento mi querida Viola, me volteo en mi silla para mirarla.
Viola… me da risa… y a la vez envidia, porque siempre anda perdida o en el aire, sin saber que sucede a su alrededor o que le pasa a ella misma. Siempre anda despelucada, o borracha o en sus pensamientos, pero eso sí, tiene un gran corazón aunque lo niegue, y es una buena amiga.
Ahora ella esta acostada en mi cama, desparramada mejor dicho, con unos shorts negros, camisa blanca holgada y unas botas negras, sus favoritas; al lado de una Emily sentada, viendo su teléfono.
-Porque… - contesto a su pregunta – Ellie quiere hacer una fiesta, y como es la jefa de la hermandad, la hacemos y ya. Igual, nos vamos a divertir… que tanto.
- Ellie es una vieja, que no se ha podido graduar, gracias a que es una retardada mental, de padres ricos… y no es la “jefa”, solo se encarga de la Hermandad y de quien entra. – dice Viola refunfuñando.
- Como también se encarga de quien sale. – digo sonriendo.
- ¿Es una amenaza? – pregunta Viola sentándose en mi cama, con una sonrisa.
- Tú sabes que soy la favorita de Ellie, y que entramos gracias a mis contactos, así que sí, una amenaza para las niñas que se portan mal.
- Bla, bla, bla, bla. Eso es lo que escucho…¡espera! pero… entonces también la amenaza va para ti, porque, si no me equivoco tú también te portas maaaalll – canturrea Viola.
- Ya dejen de hablar de tonterías ¿sí? – dice Emily mirándonos.
Me paro de mi silla y me veo en el espejo de cuerpo entero que tengo en el armario, mientras replico:
- Vaya Emily… ¿estás aquí? ¿Cuándo entraste, que no te vi?
- Ja, ja, ja – finge sonreír Emily – es que estoy pensando… en cosas…
Mmm, me queda muy bien este vestido…
- ¿En qué cosas piensas, cariño? – dice Viola, aunque no le presto mucha atención- ¿Quién te tiene así? – Pegunta con tono sinuoso - ¿un chico?
Se me ven más grandes los pechos con este vestido…¿le gustará a Greg?
Emily sonríe y me imagino que se ruboriza.
Es un vestido rojo, en forma de tubo, corto para que destaquen mis piernas y Greg solo piense en follarme.
- Si, es por un chico… - murmura Emily.
Eso detiene mis pensamientos, para ubicarlos en otros… ¿un chico? ¿Qué chico, Emily? Me atrevo a preguntar, pero no lo hago y solo digo viéndola a las dos:
- ¿Creen que le gustara a Greg?
Las miro a ambas, pero miro más a Emily y en sus ojos azules cielo, veo algo de culpa o ¿resentimiento? ¿Por qué? ¿Qué ha hecho Emily que no se atreve a decirme a la cara? Ella debe saber que la quiero, aunque en el principio me costó.
Me acuerdo de esos años, hace más de cuatro, cuando estábamos en décimo grado y Emily era nueva en la escuela, recuerdo que bajo del autobús que agarraba Viola para ir a la escuela y volver a su casa. Yo tenía a mis padres que me llevaban.
Ella y Viola se cayeron bien desde la primera vez, creo que son más unidas, y desde que fui conociendo a Emily, conocí los celos y la envidia; Em tiene mejor amistad que yo con Viola y eso que conozco a Viola desde los siete años… Emily tiene una familia que la quiere con todo y sus defectos, mientras, yo tengo padres ricos…mi padre, que para él no existo y mi madre que me quiere convertir en lo que ella nunca fue; en una doctora, hermosa e inteligente y seguramente casarme con alguien adinerado. Emily es tan natural y bella por sí sola, sin maquillaje ni nada. Es perfecta…
Bueno, es mi amiga, una buena amiga y la quiero.
Pero… ¿las dudas que tengo sobre ella serán ciertas? ¿Se quedara con lo único que no ha planeado mi madre para mí?
- Estas hermosa Scarlett, y si a él no le gusta, se pierde de mucho – dice Emily, y en sus ojos veo que lo dice de verdad. Siempre dice lo correcto, lo que uno quiere escuchar…
- Estas para follarte toda la noche – dice Viola gesticulando con el cuerpo posándose en posición de perrito, y sonrió.
Un ruido nos saca de nuestra burbuja de amistad, es la puerta, alguien toca. Voy y abro, y un Kevin gritón anuncia:
- ¡¿Quién Está Listo Para La Fiesta?! – y bebe un trago de su cerveza. Aishh su aliento es un asco, pero no me importa ya que mi atención está en Greg, en mi dulce, dulce Greg, rubio, con ojos marrones claros y de contextura gruesa, con unos músculos de acero.
Me echo a un lado para que pase un Kevin borracho mientras me tapo la nariz y dejo pasar a los chicos, a Steven, Greg, Fred y Eddie. Greg me saluda como siempre, con un abrazo el cual yo acepto con encanto y disfrute mientras escucho el grito de Viola respondiendo a Kevin.
- ¡¡Yo Estoy Lista Para La Fiesta, Baby!!
Luego Greg saluda a Emily y los veo a ambos… ¿Será verdad?
- Ya está llegando la gente, chicas, y todo esta listo así que ya pueden ir bajando a la sala – dice con voz de entusiasmo Ellie, parada en la puerta mirándonos a todos…
¿Seré yo así? ¿Cómo ella? Viendo a todos como si fueran hormiguitas y no valieran nada, como una reina en su trono ¿o ya yo soy así?... Y tenía razón Viola, con respecto a Ellie, ya se le nota que pasa de los 26 años…
Sonrió para contestarle, pero Viola contesta antes que yo:
- Elle, vaya, creí que ibas a estar durmiendo, - se acerca precariamente a ella para pincharla más… - ¿no estás muy “grande” para esto? – y pone justo el tono para que “grande” suene como “vieja” – no queremos que te canses hasta desmayarte, eh, no es bueno para tu salud... – y sonríe, con esa sonrisa suya de guasa, que solo ella sabe hacer.
Y Viola pasa de largo junto a ella tan descaradamente que mueve la cintura con cada paso, para bajar al salón principal, los demás la siguen, algunos ocultando la sonrisa que se formó en su cara, aunque otros no lo logran como Emily, que se rio sin pensar y cuando Ellie la miro, se ruborizo tanto que parecía un tomate, para luego bajar la cabeza y salir del cuarto.
Yo simplemente baje la cara y me ríe para mí misma… aishh Viola. Luego subí la mirada para ver a una Ellie enfadada, tal vez maldiciendo a toda la estirpe del que proviene Viola.
- Lo siento, tu sabes cómo es Viola, no piensa en lo que dice – le digo ocultando la sonrisa y mirándola con cara de apuro.
Ella suspira, y colocándome una mano en el hombro me dice:
- Tranquila, Scarlett, gente como ella no sabe con quién se mete…
Oh, no
- Por favor… no la expulses si eso es lo que piensas hac-…
- ¿Qué? – Me interrumpe – no, jamás, bueno, mientras seas su amiga depende de ti, sabes que no te haría eso y además, Viola no es tan mala, solo tiene muchas espinas.
- Gracias – sonrió, aunque no me quedo claro sobre lo de espinas y eso, aunque entendí muy bien, que mientras Viola sea amiga mía y yo amiga de Elle no la expulsara de la Casa, ¿pero eso también significa que Viola la puede llamar “vieja” enfrente de su cara? Sonrió y salgo del cuarto mientras bajo por las escaleras hacia el salón.
- Sabes… - me dice Ellie, mientras baja conmigo – eres una buena persona por responsabilizarte de Viola – la miro sin entender – solo, digo que es una chica muy problemática para ti y Emily…
- Estas diciendo – la corto, deteniéndome en la escalera, ya la música de la sala se escucha desde aquí – que ¿Viola es mi amiga porque le tengo lastima…?
- Claro que si o ¿por qué esa ratita seria tu amiga? – sonríe la asquerosa. Maldita mimada de mamá y papá.
- No, no es mi amiga por lastima, Ellr – le respondo con una sonrisa fría, de las que mi madre siempre me ofrece – ya que… yo no siento lastima por las personas, y menos por alguien que no lo merece, bueno, quien la merece según mi criterio, claro. – y vuelvo a sonreír, mientras retomo el camino hacia la sala…