Apocalypse no harem (T/N X harem)

Actúa, pinta, estudia.

-Bien el vestuario ha quedado genial, confío en vosotros, tu villano, no jodas la obra.-Dijo el profesor encargado.-Hoy han venido gente importante como Maruo Nakano un gran médico y su esposa así como la Idol Ai Hoshino.

-Con que no joda la obra...Ja,ja. Les voy a helar tanto la sangre que van a tener pesadillas conmigo.-Pense mientras Aqua me ajustaba la capa y una chica de maquillaje me colocaba una cicatriz en el labio y me daba una lentilla roja que me puse en el ojo izquierdo.

La obra comenzó y Akane actuaba de maravilla se acercaba mi momento de entrar a escena por lo que se me ocurrió un plan.

-Voy al baño.-Dije.

-Vale pero vuelve rápido ya casi te toca.-Dijo el profesor.

Akane y el protagonista fueron capturados y encerrados.

-Liberarnos malditos monstruos.-Dijo el héroe.

-Donde está el maldito nova--Fue cortado por un ruido.

Unas palmadas sonaron por detrás del público mientras un chico vestido se acercaba al escenario con una capa negra y una sonrisa en la cara.

-Vaya... Dos cervatillos perdidos ¿Eh? Y uno nos llama monstruos...Es gracioso...-Subí al escenario.-Lo que vas a conocer es a un verdadero demonio.-Dije sonriente retirando la capucha que cubría mis ojos haciendo que estos brillarán dandome un aspecto aún más intimidante.

-Sueltame maldit-¡Agh!-Le di una patada parando mi pie a milímetros de su estómago dando la impresión de que le había dado.

-Para de ladrar perro de La Orden.-Me agaché para ponerme cara a cara y con una mano apreté sus mejillas impidiéndole abrir la boca y dirigiendo su mirada a mis ojos.-Si no vas a morder no ladres basura.-Le solté y en sus ojos vi puro miedo.-¿Y que hago contigo?-Dije mientras agarraba el cabello de Akane obviamente sin causarle daño.-Eres bastante bella, podría divertirme un rato contigo o quebrar tu espíritu hasta que pierdas la voluntad.-Me puse serio.-Es más tengo una idea... Uno de vosotros va a morir, y uno de vosotros va a vivir, pero... Quien va a morir y quién va a vivir...-Puse una amplia sonrisa y mirando a los protagonistas.-¡Es decisión vuestra mis queridos heroes!-Miré al público.-¡¿No es divertido?! La cara de desesperación de alguien cuando su compañero le vende es sumamente excitante ¡Ah... Me emociono solo de imaginarlo!-Mire a los guardias.-Cuando lo hayan decidido avisadme, vendré y lo dejare hecho una pulpa sanguinolenta.-O para que lo entendáis mejor "héroes", car-ne pi-ca-da.
Ja,ja,ja...ja,ja,ja,ja...¡Ja,ja,ja,ja,ja... Ja,ja ja ja!-Solte una carcajada tras otra mientras me retiraba volviendo al fondo del patio de butacas ante las miradas de miedo del público y también las de sorpresa por parte de Rena, Ai, y las demás chicas y una pelirroja me miraba a lo lejos.

La obra siguió su curso y llegó la batalla final: Akane y el héroe contra mi.
Con la espada de madera empezé a dar golpes fuertes y agresivos.

-¿¡Vamos dijiste que me ibas a derrotar no!? ¡Vamos mátame, derrama mi sangre, claro si no te decapito antes.-Dije sonriendo de una man macabra.

La lucha siguió unos minutos hasta que el héroe me "venció" arrodillado el héroe me iba a dar el golpe final el cual yo me quite y agarré mi espada del suelo.

-Recuerda esto ¡La única persona que decide como muero soy yo!-Hice como si me clavara la espada en el estómago.

Los héroes proclamaron la victoria y los focos se apagaron para segundos después iluminarme.

-Ja, ja es irónico que después de matar a tanta gente, yo falle al clavarme la espada sin dar a ningun punto vital, es hilarante... Pero... Ellos se han adueñado del reino que yo hice prosperar. Hice como que me sacaba la espada y presionaba la herida, puse la espada frente a mis ojos y sonreí.-Parece que me toca robar un reino ja,ja. Masacraré a la Orden Áurea