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El lémur gris se encontraba justo en el centro de control caminando de un lado a otro. Se le podía notar perfectamente cuan nervioso estaba, aun así, a pesar de los nervios, en su rostro reflejaba lo satisfecho que se sentía.

En la gran pantalla se mostraban las ondas de movimiento al momento de hablar por parte del emisor.

– "Es bastante simple lo que debes hacer." – decía aquella voz alterada desde la gran pantalla – "No pido más. Fallame y serás severamente castigado."

– Sí, sí. – respondía indiferente el lémur – Tortura o muerte como castigo. – rodeaba los ojos – Estoy dentro.

– "Vas a informarme de todo y quienes estarán yendo a las misiones correspondientes."

– De acuerdo, mientras te encargues de Jehan. – miraba a la gran pantalla – Él nos va a llevar a la ruina y no permitiré eso.

– "Nos mantendremos en contacto, Jacob."

La gran pantalla se apagó dando por finalizado aquella llamada.

Jacob suspiró hondo y caminó hacia la puerta para salir lo antes posible, pero al momento de girarse se quedó en seco abriendo completamente los ojos.

– Parece ser que no fui lo bastante claro el día en que me nombraron líder. – decía seriamente el gato rojo mirando solamente al lémur.

– J-Jehan... ¿Qué...? – todo su cuerpo comenzó a temblar y sentía el miedo recorrer por su cuerpo.

– ¿Desconoces el significado de lealtad? – arqueaba una ceja.

Bastó con dar una señal con su mano y varios de sus soldados tomaron a Jacob por la fuerza sacándolo del centro de control.

Jehan se quedó ahí por unos segundos mirando hacia la gran pantalla y escuchando los gritos de súplicas por parte del lémur que trataba de escapar de alguna forma.

En cuestión de segundos llevaron a Jacob a la parte trasera del cuartel, justo donde en algún momento las fotografías habían sidos quemadas.

Lo aventaron al piso y todos los soldados presentes formaron un círculo dejando al lémur enmedio para que no pudiese escapar.

– ¿¡Qué creen que hacen!? – cuestionaba asustado el lémur – ¡Déjenme ir!

Dio algunos pasos hacia atrás en cuanto vio al líder entrar al mismo círculo que él. Los ojos azules mirando fijamente al lémur con mucho enojo y los pies llevándolo hasta él.

– Lástima que no pudiste iniciar con tu nuevo trabajo. – decía el gato rojo con algo de burla –Me hubiera gustado verte escabullir continuamente para dar tus "informes".

– Jehan... Por favor... – rogaba lleno de miedo – Estaba desesperado... Yo... – se dejó caer de rodillas y sus lágrimas salían sin parar – Quiero lo mejor para Vatra... Temo a que no seas un buen líder... Jehan...

– ¿Por qué no habría de serlo?

– J-J-Jehan, por favor... Perdoname...

El fuego se disparó hacia el cuerpo del lémur quemándolo por completo. Gritos llenos de dolor y agonía se escuchaban por casi toda Vatra.

Algunos soldados miraban con miedo el cuerpo del lémur consumirse por el fuego, otros lo miraban indiferentes mientras que el líder solo sonrió ligeramente y dio la vuelta para retirarse.














Los líderes de La Resistencia se encontraban en la sala de reuniones con el resto del equipo, veían cada aspecto pendiente tras los últimos acontecimientos y el nombramiento de sus posiciones. A la cabeza de la mesa, estaban sentados ambos erizos y el resto de su equipo estaban sentados a los costados de la mesa.

La luz de la oscuridad ~ ShadonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora