La luz de la oscuridad ~ Shadonic

14

– Yo no lo hice... – negaba con mucho temor – Antes de que Eggman muriera la mató con uno de sus robots...

Recibió una fuerte bofetada provocando que cayera al suelo.

Tembló aún más, miró primero a su pequeño hermano quien se alejaba poco a poco lleno de terror en sus ojos, luego miró a su padre quien solo lo miraba con indiferencia.

– No es casualidad que hayas desatado el caos y ella... Muerta. – decía con seriedad y entre dientes sin apartar la vista – mrzim slučajnosti. (Odio las casualidades).

Caminó hacia uno de los muebles de la habitación, abrió un cajón y sacó un par de anillos bañados en oro y regresó hacia donde estaba su hijo mayor quien aún lo miraba con mucho temor.

Levantó al pequeño erizo con brusquedad, tomó duramente sus manos y colocó los anillos en sus muñecas.

– Ovo će zadržati dio vaše moći. (Esto retendrá parte de tu poder.) – mencionaba con mucha seriedad el gato adulto – Nitko neće znati što se dogodilo. (Nadie sabrá lo sucedido.) – suspiraba – Napravili ste mi ozbiljan problem s kraljicom i sa zapovjedništvom... (Me has causado un grave problema con la reina y con el Comando...)

– ¡¡Yo no lo hice!! – decía con desesperación y temor, al mismo tiempo trataba de no soltar ni la más mínima lágrima – ¡¡Yo no la mate!!

– ¿Por qué le haces eso? – cuestionaba con cierto temor y también enojo el pequeño gato – ¡Mi hermano no es un asesino! – miraba a su hermano mayor con mucha preocupación.

Hubo un gran y tenso silencio en la habitación, bastó con una mirada para que los pequeños dieran unos pasos hacia atrás llenos de miedo.

Se acercó a los dos pequeños tomándolos cruelmente de las muñecas y salió con ellos de la habitación con algo de prisa y brusquedad. El pequeño erizo miraba el eterno camino con mucho terror, no sabía qué hacer, además aún estaba impactado por los anillos que le fueron colocados como si se tratara de un preso de alto riesgo, pero lo que les aproximaba en ese momento por retar a su propio padre no iba a ser fácil de olvidar.

Abrió los ojos mirando directamente al techo, suspiró hondo y se sentó despacio en la cama. Miró a su alrededor, ahora ambos líderes dormían en la habitación principal que era de un excelente tamaño y la cama era lo suficientemente grande esta vez para que ambos pudieran dormir cómodamente.

Miró a su esposo, él aún seguía dormido y luego miró hacia la ventana, la cortina dejaba pasar los primeros rayos de sol a la habitación. Suspiró hondo y miró sus anillos con cierto desprecio.

Todos estaban reunidos en las afueras de la base Vatra, era un lugar que habían construido para las batallas para sus próximos líderes. El público estaba muy entusiasmado, incluso los niños se habían unido a aquella celebración.

Kwan estaba aún más entusiasmado, apoyaba sin duda alguna a su mejor amigo que se sentó en las primeras filas para tener una mejor vista.

Entre el público se encontraba la reina de la Ciudad Ruins quien había sido cordialmente invitada a la ceremonia portando un elegante traje blanco que era compuesta por botas color oro, pantalón y una blusa sin mangas que dejaba ver sus fuertes brazos. Portaba unas hombreas del mismo color, en los costados de las caderas se desprendía tela fina que volaba al compás del viento, un cinturón de color oro que llegaba hasta parte de la pierna izquierda.