All You Need Is Love (En Edición)

Capítulo Quince.

Harley.

Miré una vez más el móvil, por octava vez en siete minutos.

No había mensajes de Archer, ni una sola llamada.

Eran las dos de la madrugada y no podía dormir si él aún no había llegado, estaba preocupada.

Después de cenar quise despejar mi mente haciendo Yoga para no pensar en lo que pasaba con Archer, pero fue imposible, aun acostaba sobre el MAT seguía pensando en él.

—¿Dónde estás? Solo necesito un mensaje para asegurarme que estas bien—murmuré mirando mi móvil.

Mis ojos se querían cerrar pero no lo conseguí y mucho menos cuando mi móvil comenzó a sonar.

—¿Harley Landers?—preguntó una voz aguda por el otro lado de la línea.

—Si, soy yo ¿quien habla?—acomodé las pantuflas en mis pies.

—Soy el bartender de "drink to death" , tu esposo está aquí y está demasiado ebrio para volver a casa.

—¿Puede describirlo?

—Claro—respondió dudoso el hombre—, tiene el cabello rubio oscuro y una mancha de nacimiento en la mejilla derecha y sin duda tiene la nariz perfecta. En su identificación leo el nombre Archer—agregó.

—Iré a buscarlo enseguida, ¿puede darme la ubicación exacta? Por favor.

Llamé a Taylor para que me prestara el auto que había rentado y llegó unos minutos después.

—¿A dónde vamos?

—Si quieres puedes ir a dormir a mi habitación Tay. Debes estar cansada, seguiré el mapa.

—No—se negó moviendo su cabeza frenéticamente—, olvida que conducirás sola, dime donde vamos y te llevaré.

—Está bien—accedí abrochando el cinturón.

El bar parecía nada ostentoso, más bien como un bar de pueblo, bastante rústico y hogareño.

Me bajé del auto siendo seguida por Tay, pasamos por la mesa de billar donde escuché algunos comentarios para nada agradable. Al llegar a la barra lo vi, Archer dormía sobre esta murmurando algunas cosas.

—Hola, soy Harley—saludé al hombre detrás de la barra levantando la cabeza de Archer para abrir sus ojos.

—Que bueno que vienes por él, mi turno casi acaba y mi jefe quería echarlo a patadas. Eres la embarazada de la que tanto hablaba—me señaló acomodando su mochila.

—Lo siento por el mal rato, pagaré lo que haya bebido.

—Él ya lo hizo—me extendió la billetera de Archer la cual guardé en el bolsillo de mi chaqueta.

—¿Puedes ayudarme a llevarlo hasta el auto?

—Si, seguro que sí.

Acomodé a Archer con su cabeza sobre mis piernas para ayudarlo en caso que quisiera vomitar. Agradecí al agradable hombre que me ayudó con él para acomodarlo en el auto.

—¿Por qué estará así?—preguntó Taylor virando el manubrio del auto para ir a casa.

—Quizá se le pasó una copa hasta que perdió la cuenta. Eso debió ser—acaricie el cabello de Archer quien murmuraba palabras aleatorias.

—También me ha pasado, pero solo cuando quiero olvidarme de algo. El nivel de borrachera que tiene es digno de un coma etílico. Hay algo mal con este hombre y ya no se si quiero que esté cerca de ustedes. Talvez deberías volver a casa cariño.