IV

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(Antes de leer el capítulo, quiero hacer la recomendación de leer el mensaje que dejé en mis historias de instagram —también en la destacada de getaway car— para evitar cualquier "malentendido" // ig: jkluvsam) ★

—¿Qué estás haciendo...?—

Murmuré, sintiendo mi piel helarse al escuchar su voz, sonriendo al ver mi rostro y sentándose en la silla que estaba a una pequeña distancia de la mía.

Me quedé sin palabras cuando no respondió a mi pregunta, ignorando lo que dije, pero continuaba con su vista de reojo clavada en mí.

¿Por qué alguien como él estaría ahí? Era un futbolista, de los más prestigiados, pero a aquella premiación no podía entrar alguien externo sin tener una tarjeta de invitación.

Lo miraba fijamente, dándome cuenta como observaba a su alrededor y estaba algo inclinado apoyando sus brazos sobre la mesa, tratando de esconderse de algo o alguien.

Su conducta era sumamente sospechosa, y sabiendo que podía meterse en algún problema en cualquier momento no me quedé callada al respecto. —¿Tienes algún problema?—

—No.— respondió, haciéndolo parecer simple, pero no dejaba de parece nervioso.

Sabía que era un riesgo entablar una conversación con él. Si alguien difundía la noticia que nos encontrabamos sentados en la misma mesa y hablabamos, definitivamente pensarían que las cosas entre nosotros mejoraron luego de los sucesos ocurridos hace algunos años, lo cual no era así.

Tenía miedo de que se comentara sobre la situación, no quería generar problemas ni dudas entre los fans, pero al verme en algo así era inevitable. Al paso de alguno minutos, traté de de mantener mi atención en el presentador, un hombre que desconocía, pero vestía de la manera más extraña. Era claro que iba a llamar la atención de los demás y siendo sincera, no hacía tan mal su trabajo de introducir los premios.

Podía sentir algunas miradas sobre mí. Ya estaba acostumbrada a que los demás me miraran, pero no de esta forma. Estaba nerviosa por el simple hecho de voltearme y ver a los demás con su vista clavada en mí, pensando cosas que ni siquiera podía imaginar.

—¿A qué premios estás nominada?—

Escuché su irritante voz a mi lado nuevamente. Mi estómago dio un vuelco, pero me giré de inmediato a entregarle la atención que él quería, mientras tomaba mi copa de champagne y me la llevaba a la boca, tomando una cantidad considerable.

—Álbum del año.—respondí con un tono neutral. Mis palabras inexplicablemente me sacaron una sonrisa, en el fondo estaba orgullosa de mis logros y luego de mi esfuerzo arduo, al fin pude cumplir el sueño de toda mi vida.

Cada vez que recordaba sobre todos los premios y reconocimientos que había recibido, sólo podía pensar en una persona, en Shidou. Desde que estabamos juntos siempre estuvo a mi lado, apoyándome en cualquier cosa que me propusiera, aunque fuese lo más mínimo.

Siempre al momento de pensar en él, o en las canciones que había escrito pensando en él y describiendo su apoyo o todo el amor que me entregaba a diario, podía sentir como en mis ojos aparecían corazones invisibles.

Me sentía como una adolescente enamorada junto a él, sabiendo que llevabamos juntos ya un largo tiempo. A veces pensaba que, todas las desiciones de mi vida me habían conducido a estar a su lado, acompañándonos mutuamente hasta que fuesemos dos ancianos sentados en nuestras respectivas sillas mecedoras, mirando el jardín de nuestra casa, mientras nuestros nietos corrían por el césped.

Pero en este momento, lamentablemente no tenía a Shidou a mi lado, si no al hombre que hizo que parte de mi fama no fuese por mi talento exactamente.

Nunca pensé que una pequeña "aventura" pudiese terminar de aquella forma. Yo no quería que nos persiguieran como si fuesemos dos ladrones, siendo que ambos estabamos sintiendo cosas nuevas, que nos merecíamos sentir luego de todas las adversidades que habíamos pasado juntos.

Getaway Car | Michael KaiserDonde viven las historias. Descúbrelo ahora