Capítulo 8

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Naruto y su guardia caminaban tras dos damas, una de las chicas veía con coquetería al Uchiha incomodando bastante al azabache, el pequeño veía a la atrevida chica, ¿no se suponía pensaban que era su prometido?, se preguntaba con duda, ¿eso no sería una falta de respeto hacia él?, el Namikaze levantó su mirada a su guardia con duda, se veía extremadamente serio como siempre, pero había un leve ceño marcado, se acercó al mayor, susurró -te molesta la dama de la señora Shijimi, ¿no es así? -Itachi levantó levemente la ceja al ser descubierto, asintió a su susurró -es bastante descarada y algo desagradable -

Naruto sonrió quedito, hizo una sonrisa de zorro -¿te hago una escena? -el Uchiha no entendió a qué se refería -¿escena? -el Namikaze movió sus cejas divertido. El mayor lo había ayudado a distraerse mientras viajaba y aquella tarde en el acantilado, le debía un poco de ayuda, giró su mirada, apretó el ceño bastante -oye dama, ¿qué estás viendo? -la chica abrió sus ojos bastante avergonzada -debería darte vergüenza ser tan descarada ttebayo -la chica realizó una reverencia. Itachi veía con sorpresa al pequeño, sonrió al entender, lo estaba ayudando a su modo, como pensaban que era su prometido en el palacio debía darse su lugar, sonrió divertido, el rubio se abrazó de su brazo confianzudo, el azabache se sonrojó un poco con esa acción -lo lamento Naruto-sama, no volverá a suceder -el rubio apretó el ceño -no mientas, si lo haces en mi cara es obvio que lo harás a mis espaldas, te vuelvo a ver y mi tía se enterará ttebayo, quedas advertida -

La chica negó con velocidad -no miento, se lo juro, no vuelve a suceder, no sé qué me sucedió -el pequeño afiló su mirada -yo sí sé que te sucedió, debes estar acostumbrada a hacerlo si te salió sin darte cuenta -la chica abrió sus ojos con vergüenza, la otra chica a su lado sonrió con burla, era verdad esa actitud resbalosa de su compañera -lo lamento Naruto-sama, Itachi-sama, disculpen la debilidad de mi compañera -Itachi giró su mirada al rubio, sonrió ligero -se suponía yo era el guardia, ¿no es así? -Naruto sonrió divertido ante el susurró cómplice -no te preocupes, yo te defiendo ttebayo -ambos sonrieron con diversión. El pequeño no se soltó del brazo, al contrario, se sentía cómodo con esa confianza. Itachi se sintió de igual forma bien, tal vez estar con el chico ese tiempo lo relaje, era divertido. Los veían con atención mientras caminaban, platicaban cómplices, hacían bonita pareja.

Llegaron ante la esposa del Daimyo -Naruto-chan -el rubio abrió sus ojos enormes al sentir a la enorme señora Shihimi abrazarlo con fuerza -estás tan hermoso -el Namikaze se dejó hacer, pero el aire faltaba. Itachi sonrió ligero con burla, el rubio afiló su mirada con advertencia -señora Shihimi, tiene tiempo que no nos visita en Konoha, la extrañamos y a Tora también -la señora sonrió escandalosa abrazando a su gato con fuerza -lo sé, mi marido me ha tenido ocupada con visitas de estado, próximamente iré, no he visto a Kushina en un tiempo -Naruto sonrió lindo -oh por Kami, mira que guapo prometido tienes Naruto-chan -el Uchiha se puso de un rojo evidente.

Naruto rió divertido, se abrazó presumido a su brazo siendo descarado -¿verdad que sí?, debo tener cuidado, a donde voy intentan robarlo señora Shihimi -el pequeño vio con filo a la chica tras la señora, está bajó más el rostro -imposible, hacen una hermosa pareja, díganme si los molestan, les prometo habrá castigo -la pareja sonrió -le agradezco madam Shihimi, es usted muy amable, Naruto es algo celoso -Naruto rió con diversión -debo cuidar a mi prometido ttebayo -la señora rio escandalosa. Itachi se puso rojo con esa afirmación, lo vio sonreírle cómplice, él hizo lo mismo.

…..

La modista tomaba medidas del pequeño con un enorme sonrojo -¿era necesario estar en pijama? ttebayo -la anciana negó -debías estar en ropa interior, pero tú prometido no saldrá de la habitación pequeño, el Daimyo fue claro -el rubio se puso rojo. Itachi parpadeó sorprendido, todos en ese palacio creían que era el prometido, el anciano no había aclarado, le restó importancia. Naruto lo veía por el espejo avergonzado con el rostro rojo, con la mirada pedía disculpas, el azabache negó con una sonrisa ligera, con los brazos cruzados recargado en la pared de atrás del pequeño veía con cuidado cada movimiento del rubio, el Uzumaki se sentía cohibido bajo su mirada -tienes un hermoso cuerpo, resaltaremos tu cintura y ese hermoso rostro que tienes -Naruto adquirió un nuevo nivel de vergüenza, humo salía de sus orejas. Itachi sonrió divertido al verlo así -ven aquí chico, tómalo de las manos, no se vaya a caer-

Naruto sentía que todo se hacía borroso, su rostro ardía. Itachi con algo de diversión tomó sus pequeñas manos, lo sostuvo suavemente con delicadeza, ambos sintieron una corriente eléctrica recorrer sus cuerpos. El Uchiha nunca se había burlado, pero siempre había una primera vez, más en esos días habían tomado confianza al convivir día y noche juntos -¿estás vergonzoso? -el Uzumaki abrió y cerró su boca sin saber qué decir, susurró -cállate bastardo -Itachi lo veía a su altura al estar el pequeño sobre un escalón para medidas, sus rostros estaban bastante cerca, pero eso no importaba, sonrieron por la broma entre ambos –creí que era un matrimonio arreglado, pero veo que ambos se gustan, eso es bueno, se ahorrarán bastantes problemas -el rostro de ambos chicos se puso rojo. Naruto no desaprovechó, sonrió divertido, susurró -¿estás vergonzoso acaso? -Itachi negó con diversión.

La anciana le dio un ligero azote al pequeño, el rubio abrió sus gemas bastante -este trasero es firme, lo haré resaltar pequeño, ya verás -el Namikaze se sintió totalmente violado por la anciana en presencia del mayor quien se asomó con descaro, en verdad nunca lo había hecho, pero habían pasado la línea de la intimidad al haber visto al menor en paños menores durante esos días, más en ese momento que pudo detallarlo mejor, además, no sabía el porqué, pero sentía confianza para molestarlo. Naruto apretó el ceño con un visible puchero, pellizco su mano -pervertido -susurró. Itachi sonrió arrogante -sólo certifico que la anciana no se equivoque -el Uzumaki abrió sus gemas bastante, ese sujeto serio e introvertido era un descarado -mamá dijo que eras bastante serio, yo no veo nada de eso en este momento ero-Itachi -Itachi sonrió divertido y sensual. Naruto soltó una mano, tapó su nariz con velocidad -ba… bastardo, te prohibo que sonrías así ttebayo-

El Uchiha nunca había sido de ese modo, le nacía ser juguetón con el pequeño, sus respuestas lo hacían reír, se sentía un niño a su lado, sonrió divertido al darse cuenta que no era tan indiferente para el Namikaze, se acercó un poco más -¿acaso te molesta que sonría? -susurró. El rubio levantó un enorme puchero, levantó su mano y tapó el rostro de heredero, Itachi se sorprendió por su reacción -harás que me desangre por la nariz ttebayo-

El mayor rio quedito, Naruto lo vio con cuidado, le había agradado lo que veía, una extraña tensión comenzó entre ambos, era agradable -bien, ya te puedes cambiar pequeño, pueden seguir coqueteando, ya terminé por hoy -ambos se pusieron en extremo rojos nuevamente viendo a la anciana recoger sus cosas y salir. Itachi la vio cerrar la puerta, giró su mirada ónix al pequeño quién estaba aún avergonzado, sus manos seguían unidas, sonrió ligero -te gusta que sostenga tu mano ¿no es así? -Naruto abrió enormes sus gemas, con vergüenza salió corriendo al baño -¡bastardo! -el Uchiha sonrió quedito.

Mi hada (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora