Capítulo 7 - 14 años

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Estaba dormida en mi cama, cuando de repente empecé a escuchar a mis padres pelear. Me levanté de la cama y encendí la luz de mi habitación, al tener la puerta cerrada, no podrían verme. Cogí mi móvil de la mesilla de noche y miré la hora, eran las 2 de la madrugada. Abrí la puerta de mi habitación sin hacer mucho ruido y me asomé por la barandilla de las escaleras.

-¡Ya me tienes harta!- gritó mi madre.

-¿De que? Tu no dejas de mentirme y a Addison tampoco.- contestó mi padre.

-¿De que hablas?- preguntó mi madre.

-No te hagas la tonta, se que tienes otra familia, se que tienes otro marido y otros hijos. ¿Te parece bien hacerle eso a Addison?- respondió mi padre.

-¡Eso es mentira!- gritó mi madre.

-Tengo pruebas.

-A ver.- dijo mi madre desafiante.

Escuché a mi padre andar un poco y a mi madre seguirlo por detrás, yo baje unos cuantos escalones con cuidado. Vi a mi padre en el salón con un montón de fotos entre las manos.

-¿Como es que todos los días tienes tenis? Contraté a un espía y te sacó estas fotos.- contestó mi padre.

-¿¡Cuanto dinero te gastaste en ese espía!?- gritó mi madre.

-¡Que más da eso ahora!- le interrumpió mi padre.

Mi madre de repente miró hacía las escaleras, conseguí esconderme algo en la oscuridad, pero ella se fue acercando lentamente, yo subí las escaleras rápido y me cerré en mi habitación. A continuación, apagué la luz y me hice la dormida. Tenía la respiración acelerada pero cuando mi madre entró a la habitación, conseguí controlar mi respiración haciéndola mas lenta. No sabía lo que estaba haciendo mi madre, pero supuse que estaría frente a mi, porque note su respiración. Cuando salió, yo aún seguía haciéndome la dormida, pero aún escuchaba los gritos de mis padres.

-¿Y tú cuando pretendes contarle a Addison que le hacen bullying por tu culpa?- preguntó mi madre.

-No fue por mi culpa.- contestó mi padre firmemente.

-¡Tu fuiste el que le rompió los dientes al pobre chico!- gritó mi madre.

Ahí lo entendí todo. Rápido, cogí mi móvil temblando y llamé a mi hermano, mis padres aún peleaban. La primera vez, no me contestó y la segunda tampoco pero a la tercera sí, solo que no era él.

-¿Si?- preguntó alguien al otro lado del teléfono.

-¿Quién eres?- pregunté yo sollozando.

-Jacob, ¿va todo bien?- preguntó él.

-¿Está mi hermano?- seguí preguntando ignorando al chico.

-Sí, pero está dormido.- me respondió.

Ahí aún no conocía a Jacob, no lo había visto nunca.

-Venga, ¿que pasó?- volvió a preguntarme.

-Mis padres están peleando otra vez.- respondí.

-¿Quieres que vaya a buscarte y pasas la noche aquí? Tenemos una habitación para invitados.- comentó.

-Está bien.- contesté.

Al rato, alguien tocó al timbre. Yo cogí mi móvil y bajé rápido, mi padre ya estaba abriendo la puerta.

-¿Que quieres a estas horas?- preguntó mi padre.

-Viene a por mí.- respondí saliendo de la casa después de apartar a mi padre.

Mi padre me agarró del brazo tan fuerte que me dolía.

-Tu no vas a ningún lado.- dijo firme.

-No quiero escucharos pelear más, escuché cada palabra que dijisteis.- y me solté de mi padre bruscamente para darle la mano al chico.

-Vamos.- dijo Jacob.

Nos subimos al coche de Jacob mientras mi padre me gritaba que no podía irme. Cuando ya nos alejamos bastante de mi casa, Jacob me dijo:

-Estate tranquila ¿si?

Yo asentí. Cuando llegamos a la casa, entré detrás de Jacob. Yo ya había estado en esa casa 3 veces (aunque las veces que fui, solo estaba mi hermano en la casa), sabía como era, pero aún así, esperé a que Jacob me hablara.

-¿Te acompaño a la habitación de invitados?- me preguntó.

Yo asentí sonriendo falsamente, estaba destrozada por dentro. Cuando subimos las escaleras, mi hermano se encontraba saliendo de la habitación.

-¿Que?- preguntó confuso.

-Mamá y papá...- no pude terminar de hablar, tenía los ojos inundados de lagrimas.

Tim me abrazó instantáneamente.

-Ve a dormir, mañana si quieres me lo cuentas todo, ¿vale?- me dijo con una voz que me tranquilizó.

Yo asentí pasándome el antebrazo por los ojos para secarme las lagrimas y me fui a la habitación de invitados.

A la mañana siguiente, cuando me desperté, bajé a desayunar y Luke ya me había hecho el desayuno, aunque aún tampoco lo conocía. Después de desayunar, le expliqué la pelea que tuvieron mis padres a mi hermano y Tim se fue a casa de mis padres. No se que les dijo, pero me trajo dos maletas con mis cosas. En una semana, ya estaba instalada en la misma casa que mi hermano con todas mis cosas y no volví a ver a mis padres.

757 palabras, cortito otra vez por ser otro recuerdo pero espero que os haya gustado <33

Fue el destinoWhere stories live. Discover now