Me desperté por ruidos de golpes.
-No, si vais a romper las paredes.- dijo Julien.
Abrí los ojos, aún estaba en el pequeño cine de la casa, al parecer dormí toda la noche ahí. Salí del cine y vi a los chicos con bolsas de deporte y bien vestidos. Les miré confusa.
-¿A donde vais?- pregunté.
-A una pasarela de California.- me contestó Luke.
-¿Y yo?- seguí preguntando.
-No te enfades.- me dijo mi hermano.
-Bien.- dije no muy segura.
-Vas a quedarte en la casa de Jeremiah.- dijo Tim al fin.
-Pero...- solté, aunque me quedé callada.
-¿Sabes quien es Mike?- me preguntó Julien.
Negué con la cabeza mientras me frotaba los ojos por causa del sueño.
-Es el hermano de Jeremiah. Es buen tío y hablamos hace unos días con él para a ver si te podías quedar en su casa...- me contó mi hermano con cara culpable.
-Bien, no pasa nada, pero me quedaré aquí.- dije.
-No, te vas a ir a cambiar y enseguida vendrá Mike.- dijo mi hermano.
-¡Tengo 17 años, y no eres mi padre!- me quejé.
-Me da igual. Por Dios Addison, ¿puedes hacerme caso? Te mudaste con nosotros y les prometí a papá y mamá que cuidaría de ti.- me dijo Tim mirándome con algo de lastima.
-Encima, no volveremos hasta tarde.- comentó Luke.
-Bueno...- dije al fin sin ganas.
-Ya nos tenemos que ir.- comentó Julien enseñándonos la hora en su móvil.
-Bien, enseguida llegará Mike a buscarte.- comentó Tim abriendo la puerta.
-Ni que su casa estuviera a mil kilómetros, está al lado.- dije, aunque todos me ignoraron.
Jacob me dio un abrazo y mientras los demás subían al coche, me dijo:
-Te llamaremos para que nos veas.
Yo sonreí, él chico me devolvió la sonrisa. Cuando los chicos se fueron, subí a vestirme y prepararme. Me di una ducha muy rápida y me puse unos pantalones cortos de chándal y una camiseta larga y ancha negra con un coche dibujado que le robé a Luke y de zapatillas, me puse unas Vans negras. A continuación, me peiné y me maquille un poco. Cuando menos me lo esperaba, tocaron al timbre. Cogí mi pequeño bolso con los auriculares y el móvil y bajé. Abrí la puerta y, en efecto, hay estaba Mike, el novio de Heather.
-¿Se te olvida algo?- me preguntó con una sonrisa.
Negué con la cabeza cerrando la puerta después de salir.
-Bien.- soltó.
En el camino hasta su casa, no hablamos nada. Fue bastante incomodo, pero cuando llegamos, me dijo:
-Estas en tu casa.
Yo sonreí y comencé a mirar hacía todos lados, observando la casa. Era bastante bonita y acogedora, parecida a la nuestra. Esperé a que Mike siguiera andando hacía el interior de la casa, no me quería anticipar. El chico fue hasta la cocina, yo le seguí observando los alrededores. La cocina era blanca y bastante espaciosa, creo que algo más grande que la nuestra. De pronto, una mujer alta, con el pelo pelirrojo y los ojos azules, entró a la cocina. Sonreí en forma de saludo.
-Tu debes ser Addison...- comentó la mujer dibujando una sonrisa en su cara.
-Sí, vivo en la casa de al lado.- dije también con una sonrisa.-No era mi intención molestar en esta casa, pero mi hermano me dijo que tenía que venir... Por seguridad...
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Fue el destino
Teen FictionAddison Lewis ha vivido con su hermano y los amigos de su hermano desde los 14. Tres años después, los chicos han decidido comprar una casa de vacaciones en la playa de Readear. Addison no esta muy segura de si le gustará ese sitio, ya que en la pla...