Amor Transgresor

*Cap. 6*

Llegué a casa y me dirigí de inmediato a la habitación de mis primas. Subía las escaleras, muy feliz, cuando me doy cuenta que mi madre me llama desde su habitación. Claro ¡papá! debí ir de inmediato a ver cómo se sentía. Bajé las escaleras y relajé mi rostro.

-¡Voy!-le dije. Llegué a la pieza y la hallé recostada al lado de papá. -¿Cómo sigue papá?-pregunté a penas abrí la puerta. 

-Se quedó dormido luego de tomarse el té. ¿Cómo te fue? -me preguntó.

-Bien. Entregamos la carta. Dijo que vendría. Todo bien de regreso- le respondí.

-Tomaré una siesta también, unos minutos antes de almorzar- me dijo.

Salí de la habitación y retomé mi rumbo a contarles con lujo de detalle todo sobre Steve. Se veía tan woow hoy. Sobre todo lo sexy que se veía cuando nos abrió la puerta. ¿Creo que es mejor que no les diga tantos detalles?, quizá debiese quedármelos todos para mí.

Como que su cabello se veía dorado al sol. Que lo traía desordenado y eso lo hacía ver aun más alto de lo que ya es, casi llegaba al marco de la puerta, o quizá la puerta era relativamente baja. Como sea, su cabello desordenado sí que es lo suyo. Luego su piel clara pero evidentemente tostada con el sol, sus cejas y pestañas oscuras y pobladas y esos maravillosos ojos verdes. Además su nariz, no sé, siento que es perfecta para él, para su rostro. Sus dientes grandes y blancos y sus labios totalmente adorables, quisiera besarlo. No me decido aún si en mi mente besar sus labios o su cuello, que cuello más hermoso, que con esa camiseta ¡woow! sus brazos tan firmes. Steve era de complexión delgada sin embargo me atrevería a decir que tiene mucha fuerza. Sus brazos y los pectorales que se marcaban levemente en la camiseta me dejaban a la imaginación muchas buenas ideas. Su pantalón era... claramente venía levantándose recién. Y recién ahora me cuestiono ¿en qué trabaja? ¿Tendrá trabajo? Despertando a mediodía un día martes es bastante extraño. Sin embargo, lo agradezco mucho. ¡Ah! si, la vela a la virgencita.

Entro a mi habitación, busco una vela entre mis cosas y la encuentro. Voy hacia la habitación de mis primas, entro y les resumo mi ida a dejar la carta. Les comento que Miriam tocó la puerta, que él salió con camiseta sin mangas, me miró a los ojos, le costó reconocernos, al presentarnos le dio vergüenza mostrar tanto y se cubrió, que había aceptado venir a la cena y los motivos para encender la vela. Lo hice y ellas comenzaron a hacerme preguntas. Le conté que Miriam había visto como le coqueteaba, les conté lo que ella me había dicho y que estaba confundida. Pero no sobre lo que sentía sino sobre qué hacer de ahora en adelante. Les dije lo que más me atormentaba: -¡Y si de algún modo lo que siento aumenta y es realmente amor por él, y el no siente nada! ¿Qué voy a hacer de mi vida? Nunca he sido rechazada. De soltera pasé a comprometida. Carl llegó a mi casa y toda mi vida cambió- les dije.

Bárbara me dijo: -A ver, primero que todo y antes que nada ¡cálmate! Lo que tienes que aceptar es que ya te atrae, sientes algo, sueñas despierta con él... -me dijo. -Y dormida también- le interrumpí.

-Está bien. Nunca antes te habías enamorado...- dijo. -Solo una vez cuando pequeña...-le interrumpí nuevamente. -...de este modo- me interrumpió ella para terminar la idea e hizo una seña de "silencio" con su dedo índice, entonces entendí.

-Quiero decir, que no sabes si esto es amor, no sabes si este amor es correspondido por él o no y si los esfuerzos coqueteándole, la otra noche, sirvieron de algo o no. No sabes muchas cosas pero si sabes una sola cosa y es que tus padres cuentan contigo para estar bien. Sabes que te casas por el dinero que Carl tiene, que ese es el acuerdo. Y si rechazas el matrimonio, ¿de qué modo ayudarás a tus padres? o es que piensas proponerle a Steve, en el hipotético caso de que él te corresponda, que tengan algo a escondidas solo estos meses en donde Carl te corteja. Si fuera así te apoyo pero ¿Estará de acuerdo Steve con eso?-dijo y quedé varios segundos pensando qué decir.