CUANDO TE VI | Fanfiction Álvaro Fidalgo & Tú

Capítulo 9: divertirme con estos chicos es de lo mejor.

SEMANAS MÁS TARDE.....

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Ya habían pasado algunas semanas desde que llegué al nido, casi siempre estaba encerrada en el consultorio checando las dietas de los jugadores del primer equipo. Algunas ocasiones salía a las canchas, presencié los entrenamientos del equipo de Fernando y del equipo femenil, las ganas de tener ese balón en mis pies me picaban, de correr y de dar pases.

había afianzado algunos lazos amistosos, entre ellos eran Emilio , Laínez, Sebas y Malagón. Ellos se habían hecho mis amigos, casi siempre todas las tardes, salíamos a cenar tacos o incluso bebíamos algún frappé y yo se que está mal por la cantidad de azúcar y de grasas que tienen, pero aquellas grasas se quemaban con el ejercicio.

¿Qué había pasado con Fidalgo?, suspiro y los corazones imaginarios flotan al rededor del lugar, recordar lo que pasó en aquella noche.

FLASHBACK

—¿Qué película quieres ver?, bonita —habíamos llegado al cine, el español y yo nos habíamos tomado de la mano desde que entramos— ¿Bonita? —pregunto una vez más, nuestros ojos se conectaron.

—Uhmm, —observé la cartelera— hay que ver una de comedia, esa está bien —habíamos visto el tráiler, este nos convenció y ahora compraríamos las entradas.

Asientos en la parte superior, estábamos en las esquinas del asiento y ahora tocaría ir por los dulces, ahí fue donde nos separamos, él fue a comprar las palomitas y demás snacks mientras que yo iría al baño.

Entré al lugar, había algunas niñas, dos chicas más y yo continué mi camino para poder hacer mis necesidades biológicas. Terminé, salí y me lavé las manos.

La función iba a empezar, esta película es de Adam Sander "Una esposa de mentira". A medida que pasaba la película, más nos moríamos de la risa pero lo lindo de aquí es que a cada nada nos dabamos piquitos, nos tomábamos de la mano y se sentían tan bien estar con él, como si fuéramos novios.

—¿Ese de ahí es Fidalgo? —unos murmullos atrás se escucharon.

—Ohhh —otro murmullo se escucha—la enfermera es muy linda.

No sabía cómo sentirme, Álvaro de seguro no había escuchado aquello. Pues nuevamente me dio un beso con el cual me hizo olvidar que estábamos en ojo público. Salimos del cine, algunos aficionados se acercaron a pedirle fotos, yo caminaba lejos de ahí, pues entre menos sepan de mi, será mejor, no podría sobrevivir al acoso de medios.

Luis Ángel llama a la puerta, le indico que entre y este lo hace pero no está solo, lo acompañan Laínez y Sebas. 

—Mañana tenemos partido, Doc —empieza Malagón— y queríamos ver si hacíamos una concentración en casa de alguien.

—Sí, podemos hacer una especie de pijamada —le sigue Laínez— llevamos comida, bebida.

—¿Y todo el equipo está de acuerdo? —cuestiono, aunque ya sé la respuesta.

—Sí, hasta el Profe irá —habla Córdoba— será en casa de Edson, para que nos acompañe Doc.

—Bien, pero con la única condición de que se dormirán temprano para que mañana rindan bien —sonrío, ellos me imitan y después se retiran del consultorio.

Tecleo algunas cosas en el ordenador, hago correcciones en el peso y talla de los chicos, la dirección me pidió las tallas para las nuevas jerseys que portarán, mañana sería el último día en donde usen la jersey que habían usado esta temporada. Mi teléfono vibra, son tres mensaje del grupo familiar, dos de mis padres y uno de Jimena.