*Punto de vista de Kisumi*
Llegué a casa después de la escuela, me había quedado en la biblioteca repasando un tema de biología que no lograba entender muy bien y para cuando menos lo imagine pasaba de las 16:30.
Rápidamente subí hasta el cuarto de mi hermano, Hayato, al que debía de llevar al club de natación dentro de un par de minutos. Tras llamar a la puerta entre para encontrarme a Hayato tendido sobre la cama leyendo un libro.
-Hayato- Me acerque y tome asiento en la orilla de la cama -, ¿por qué aún no estas listo?
Pasó su mirada a mi y una sonrisa atravesó su rostro, dejo el libro de lado y se echó a mis brazos.
-¡Oni-chan!- Habló dulcemente, sus brazitos rodeaban mi cuello.
-Que tal, pequeño- Sacudi sus cabellos rosados tiernamente -. ¿Estas listo para el club?
Se separó y clavó sus pequeños ojos en los mios. Sabia lo que eso significaba. Suspire.
-Hayato, tenemos que ir. Se lo prometiste a mamá, ¿recuerdas?- Llevé una mano a su mejilla.
-Pero... Yo no quiero- Protestó débilmente sabiendo que, aunque dijera que se negaba a asistir, lo llevaríamos de todas maneras.
-Te prometo que después del club te llevaré a la heladería mas cercana del lugar, ¿te parece?
Se volvió con entusiasmo, no podía negarse a esa oferta.
-¡Si!- Saltó de la cama y fue a cambiarse de ropa lo mas rápido posible.
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*Punto de vista de ______*
¡Maldicion, voy demasiado tarde! ¡Y es mi primer día! ¿Como pude dejar que pasara esto?
Encima de eso, el tren esta repleto de gente y para mi mala suerte tuve que ir de pie. Sentía como mi cuerpo estaba apretado por otros, y de vez en cuando las manos rozaban lugares que no debían haciendo que la experiencia fuera aún mas incómoda.
Una vez llegada a mi parada salí como pude y me eché a correr hasta el club. Sólo eran unas cuantas cuadras, pero con el tiempo encima la distancia se multiplicaba. Un alivio se extendió por mi cuerpo al ver a lo lejos el edificio.
Entré y caminé hasta el mostrador donde una mujer mayor a los 25 se encontraba del otro lado de este.
-Hola- Dije agitada -, yo... Vengo por el... El empleo...
-¿Eres la recomendada por Tachibana?- Habló mientras me veía a través de sus lentes.
-¡Si!
-Sigues por ese pasillo hasta el fondo y doblas a la derecha, ahí encontraras la entrada a la piscina y otras puertas delante, esos son los vestidores de los empleados.
Antes de que pudiera agradecer ya me había echado a correr, fui algo descortés pero el tiempo vale oro.
Miré la hora en mi reloj, diez minutos tarde.
-¡Joder!- Chillé por lo bajo.
Alce mi vista para ver hacia donde debía doblar, cuando estaba a sólo centímetros un cuerpo apareció repentinamente frente a mi provocando que chocara fuertemente contra este.
Me tambalee hasta caer al suelo, aterrice con mis manos lo que hizo que el golpe fuera menos doloroso. Como un rayo me puse de pie, tomando mi bolso y volviendo al camino. Detrás de mi una voz masculina resonó en el pasillo.
-¡Lo siento!- Grite sin siquiera mirar atrás.
Vi la puerta que la mujer había mencionado anteriormente y entré.
Hola a todos. Espero que las historia les vaya gustando, se que es poco pero a medida que avance se que les llamará mas la atención. Los capítulos serán tal vez de este tamaño, por aso decirlo, pero puede que vayan a variar n.n Las dejo por hoy, nos vemos en otro capítulo de esta su novela o pueden pasarse por mi otra novela de Rin llamada Sólo por ti que la pueden encontrar en mi perfil en ya saben donde ;)
Gracias y coman bien.
~Tess
