𝙸𝚗 𝚊𝚗𝚘𝚝𝚑𝚎𝚛 𝚞𝚗𝚒𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎...

𝙎𝙩𝙖𝙧𝙩 𝙤𝙛 𝙨𝙤𝙢𝙚𝙩𝙝𝙞𝙣𝙜 𝙙𝙞𝙛𝙛𝙚𝙧𝙚𝙣𝙩

Desesperación, temor, enojo, miedo...

Esos eran algunos de los sentimientos que lo consumían por completo a medida que los latidos de su corazón se aceleraban con cada paso que daba, corriendo sin parar, sin notar contra quién o que chocaba o tropezaba.

Su respiración era agitada junto a las caladas de aire desenfrenadas que tomaba con su boca.
Su cuerpo doliendo desde su cabeza hasta los pies, teniendo su frente sudando sin control llegando a caer gotas pesadas y saladas que obstaculizan su vista.

Sin embargo eso no lo detendría, solo correría hasta llegar allí, con ella, aún si sentía que su cuerpo ardía en fiebre, no pararía, solo tenía que correr y correr.
Queriendo escapar del momento donde todo se derrumbó dentro de él, del momento en que sintió como el lazo familiar que los unía a los tres se desvanecía.

Las personas que lo veían pasar o que chocaban contra él lo miraban con extrañes y mala cara, lo veían como algo raro y molesto y más al ver que se trataba de un estudiante de una institución muy prestigiosa saltándose las clases o eso creían ellos, no importándoles que de esos hermosos ojos avellanados lágrimas caían y el aroma que desprendía era uno totalmente amargo, demostrando lo azotado que se encontraba con la lucha de sus sentimientos.

Siguió corriendo sin notar que a cada paso que daba se acercaba más a una calle muy transitada por carros que no pararían al verlo correr hacia ellos.

Y sin ser consciente de dónde pisaba o de su alrededor no notó como un auto negro aceleró al momento en que él cruzó la calle.

Las pocas personas que vieron lo sucedido exclamaron asustados y sorprendidos ante lo que acaba de pasar frente a sus ojos.
Asustados de ver como esa persona chocaba contra el auto y con una gran habilidad saltar sobre la parte delantera del auto y dar un salto mortal y caer con tanta elegancia y agilidad en el suelo sin recibir ningún rasguño o golpe grave.

Él aún sin asimilar lo que le acababa de ocurrir solo observó sus manos temblorosas, viendo con horror lo que acababa de hacer.
Observó a su alrededor notando como esas personas lo veían con miedo, asustados y extrañados, juzgando el porque había echo eso y otros se susurraban entre sí mientras lo veían, se sintió tan diminuto ante las miradas y palabras.

Sacudió su cabeza hacia los lados y retomo nuevamente su carrera solo que ahora escapando de todos, de esas personas, de las miradas, de las palabras, del mundo.

Corrió y corrió sin importarle como sus pulmones dolían, como el aire le hacía falta, como su vista se nubla ante cada paso, como todo su alrededor parecía derrumbarse.
El miedo le consumió por completo y ahora estaba totalmente asustado, no estaba seguro y quería desaparecer.

Vió que al doblar la esquina, el apartamento al que tanto quería llegar estaba a una cuadra de donde él se encontraba solo que ahora unas cuantas personas rodeaban la puerta principal del edificio.
Aceleró mucho más sus pasos y a cada acercamiento hacia ese lugar sintió su corazón doler, sus lágrimas caer sin parar y su respiración mucho más acelerada de lo normal. Gruñó molesto ante la presencia de esas personas estando cerca del que consideraba su territorio.