Capitulo 36. Monstruos

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POV Gael.

Lograr calmar a un niño de 8 años que había vivido el mejor día de toda su vida, dicho por su propia boca fue de las tareas más difíciles..... ya que como papás no querían ni siquiera hacerlo, disfrutaban tanto ver a su hijo así de feliz.

En 8 años nunca había visto esa emoción y felicidad extrema en el, y eso que Oliver era un niño expresivo y alegre.... mas aún este último año, pero este día había sobrepasado sus expectativas, no paraba de hablar de todo lo que vivió, todo lo que sintió, todo lo que le gusto de ese día, agradeciendo mil veces por todo lo que le prepararon y lo especial que fue.

Estaba desesperado por abrir sus regalos, y aunque ya era tarde lo complacieron, al día siguiente no había clases así que si se desvelaba no había problema.

Fue un momento solo de los tres, sus hermanos salieron con sus parejas después de cambiarse y quitarse los disfraces que traían, y aunque Danilo moría de ganas de acompañar a su primo en la tarea tan divertida que comenzaría, Matias y Jacinta se lo llevaron para cuidar que ese momento especial quedara entre ellos.... gozaron junto con el cada que abría uno nuevo, tomando foto y video de cada expresión en su rostro.

Ambos estaban sentados en el suelo del cuarto de Oliver frente a él viendo como terminaba de abrir el último regalo de la noche. Tenía a Mar entre sus piernas, ella estaba apoyada en el y el a su vez en la cama mientras observaban a su hijo, estaban agotados, Mar tenía ya los pies hinchados pero esta felicidad valía el esfuerzo extra.

Gael: Hijo, mamá y yo estamos muy felices de verte así... tu felicidad es la nuestra siempre - Oliver sonreía sin quitar la mirada del pedazo de cinta que quería arrancar

Oliver: ¿Saben cuál fue mi parte favorita del día? - ahora luchaba por quitar el último pedazo de papel de la caja que le faltaba por abrir que ya se podía apreciar que era un rompecabezas mientras conversaba con ellos

Mar: ¿Cual mi amor?

Oliver: Cuando me cantaron el pastel... sentí que viví una escena de película que siempre quise - volteó a verlos con los ojos abiertos repletos de ilusión- esa donde el hijo está rodeado de amor, junto a sus papas y hermanos.... mis amigos vieron que tengo a la mamá más buena y al mejor papá del mundo - esto último lo dijo en un tono más elevado casi gritando de lo feliz que lo ponía

Ambos se miraron muy enternecidos por el comentario tan sincero que su pequeño acababa de hacer de una manera tan natural. Pero las palabras de Oliver iban mucho más allá para ellos, lo que para el fue un simple comentario de un sueño de película para ellos significaba que su hijo sentía seguridad y pertenencia por primera vez y que era tan feliz que quería presumirlo como todo niño ante sus amigos.

Gael: y así estaremos siempre, a tu lado mi vida

Mar: hijo.... ven- observo como Mar llamaba a Oli le estiraba su mano para acercarlo a ella y sentarlo en su regazo abrazándolo - tu... me haces tan feliz a mi solo con existir, desde la primera vez que te vi, te sentí mío... - al decirle esto lo apretó aún más contra ella- hoy se lo conté a tu papá por la mañana cuando recordaba tu cumpleaños de hace un año - Mar volteó a verlo sonriendo para luego regresar a su hijo- la vida nos tenia reservados mi amor, y aunque te trajo al mundo a través de otra mamá el destino ya estaba escrito y en tu corazón y el mio ya decía mamá e hijo

Oliver: Yo también lo sentí mami, desde que te conocí como Leona te quise mucho sin saber porque

Mar: sabes cuánto me gusta escucharte decirme mami - nota como Oliver sonríe feliz ante lo que Mar le dijo y provoca que el también lo haga,- para mi es una dicha ser yo tu mamá, escuchar de esa boquita esas palabras..... ser yo la que esté ahí junto a ti en todos los pasteles de tus cumpleaños, en todos tus logros de la escuela, hechando porras en un partido de fútbol, curando tus lastimadas y golpes, secando tus lagrimas, acostándote todas las noches hasta que crezcas

Un nuevo destino... GarenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora