Capitulo 37. Costras

458 14 93
                                    

POV. Mar

Ya había pasado un mes de aquella noche en donde la despertó abruptamente esa terrible pesadilla, sus sesiones de terapia comenzaron inmediatamente y aunque sabía que no era magia, que todo proceso lleva su tiempo, no podía evitar desesperase al encontrarse nuevamente sumergida en ese callejón, uno que por el momento parecía no tener salida, o mínimo así lo sentía ella.

Los episodios aún continuaban, una o dos veces por semana despertaba mal.

Su frustración crecía y ya no era solo por lo que ella estaba sufriendo con todo esto, sabía que ya estaba afectando a los demás, a su Familia... sus hijos no sabían a detalle que pasaba pero sospechaban que algo no estaba bien. Aunque en el día su vida era normal, sus mismas actividades, rutinas, podían percibir la preocupación de los adultos por su estado, por su poco descanso.

Consuelo estaba muy pendiente de ella, vivió en carne propia todo esto años atrás, era la mejor guía y apoyo para ella, pero también para Gael quien era ahora el que se estaba llevando el mérito y la responsabilidad de acompañarla.

Gael se la estaba rifando, estaba siendo el más paciente, protector, comprensivo, el mejor compañero que podía tener, definitivamente comprobaba la calidad de persona que era su marido y la manera en que la amaba.

Pasaba noches completas en vela junto a ella, cada día lo admiraba y amaba más, admiraba su esperanza y su confianza en que juntos lo lograrían.

Por lo mismo se molestaba más consigo misma de estar así, ver a Gael sufrir con ella era algo que no soportaba, sabía que a pesar del esfuerzo que el hacía le estaba afectando, ya lo había escuchado gritar de impotencia cuando después de creer que la había calmado y dejado dormida en su cama se encerró en el baño a sacar lo que no podía delante de ella, estaba completamente enfocado en ser su roca y ella lo agradecía, pero veía que también lo dañaba y no era lo que ella quería.

Esa noche se había despertado gritando nuevamente y después de lograr calmarse platicaba con Gael de su preocupación y miedo por afectar su relación y su matrimonio por esta mala etapa. Sentía que el no estaba siendo sincero con ella.

Mar: Gael, tengo miedo... - cuando escucho lo que dijo ella misma entorno sus ojos y aclaró- otro miedo - en estos momentos la palabra miedo en su vida abarcaba un sin fin de opciones- de que te canses de mi..... de soportarme.... no se cuánto tiempo seguirá pasando, no quiero que esto nos desgaste amor

Gael: Mar..... amor - la toma del mentón ya que ella había bajado la mirada al confesárselo - ¿Tu de verdad no mides el tamaño del amor que siento por ti? ¿De verdad crees que me pueda cansar de apoyarte.... De estar a tu lado? - le hablaba lo más pausado y tierno posible, sus miradas contestaban por ellos, Gael sabía la respuesta, de hecho no necesitaba ni preguntarlo solo necesitaba hacerla razonar para que deje de pensarlo - ¿Tú lo harías? ¿Te cansarías de mi si el caso fuera al revés?

Mar: Sabes que no.... Nunca

Gael: Entonces ¿porque yo si me cansaría de ti? si te amo igual o mas que tú a mi.... mivida.... Es fácil amar a alguien cuando todo es perfecto, mantener ese amor durante los momentos imperfectos es lo que hace un amor incondicional..... nos estamos haciendo mas fuertes juntos

Mar: Gael.... Te he escuchado - todo lo que le decía sonaba muy lindo pero la realidad era otra y era lo que la atormentaba, percibió como Gael se sorprendió un poco con lo que le dijo pero no entendió bien a qué se refería y continuó- el Lunes creíste que ya me había dormido y escuché como te encerraste en el baño a llorar y gritar de la frustración, no me mientas.. no me digas que no te afecta cuando no es así....

Gael: Yo no he dicho que no me afecta verte sufrir... claro que me afecta ver a la mujer que amo, a la mamá de mis hijos sufrir así

Mar: Vez.... Y Cómo crees que yo me siento, no solo tengo que cargar con lo que estoy sufriendo, ademas tengo que vivir viendo como te hago daño, como te desgastas junto conmigo

Un nuevo destino... GarenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora