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A Jeno no le agradaba para nada el hecho de lo extrañamente cercanos que se hicieron su lindo bebé y el tonto del Alfa que se atrevió a usar su voz de mando en él

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A Jeno no le agradaba para nada el hecho de lo extrañamente cercanos que se hicieron su lindo bebé y el tonto del Alfa que se atrevió a usar su voz de mando en él.

Es decir, solo habían pasado tres días después de lo sucedido y ahora andaban al frente suyo contentos teniendo una conversación. Era sábado y su Alfa le había invitado a salir a la ciudad a pasear en el centro comercial

Ellos vivían en un pequeño pueblo un poco alejado de la ciudad, tenían algo de suerte de que llegara electricidad hasta allá, aún así el lugar es muy pequeño y tiene pocos habitantes, no había muchos establecimientos en donde vendieran ropa, entre otras cosas como comida y muebles para la casa, la mayoría de veces tenían que salir del bosque para ir a la ciudad y comprar sus necesidades.

—Te veo tenso. —La suave y ronca voz del Alfa puro llamo su atención, por lo que dejando de mirar a los más pequeños, se giró para encontrarse a unos centímetros el rostro del mayor.

Renjun llevaba puesto su típica y conocida chaqueta de color verde (se preguntaba si realmente la lavaba, ¡No la soltaba para nada en el mundo! La mayoría de sus outfit sólo se basaban mayormente con esa chaqueta), una camiseta beige con un estampado gigante de un gato y un conejo en el centro y unos simples pantalones shorts.

Parecía todo un vago ya que de por si la ropa era ancha y su cuerpo al ser delgadito la ropa parecía quedarle aún más grande. Aún así, ¿Cómo podría verse tan guapo siempre?

—Hablaste sin tartamudear. —Habló ignorando lo que había dicho el contrario— De hecho, creo que lo has hecho varias veces.

Renjun sonrió tímidamente antes de mirar a otro lado mientras caminaba perezosamente, el sonido de sus chanclas era algo fuerte que llamaba un poco la atención.

—Bueno... M-me cuesta un po-poco ha... hablar co-corrido. —Respondió mirando a los más pequeños sin desear apartar la mirado de estos, tenía miedo a que se perdieran— Pero si... si m-me acos-tumbro y tengo co... confianza, podría hablar b-bien.

—Hmm, entiendo. Eres un poco tímido e introvertido, la verdad puedo acostumbrarme, aunque me cuesta un poco entenderte, a veces hablas bien bajito.

—Sí, discúlpame. —Avergonzado se disculpo pensando que tal vez si manera de hablar no le agradaba a su pareja.

El Alfa menor solo sonrió un poco. Le parecía tan gracioso y lindo.

—Deja de disculparte, es tonto que te disculpes por cosas sin sentido.

—Perdón. —El pobre Alfita cubrió su boca con su mano libre en el momento que Jeno lo miro con ojos acusadores, la verdad estaba apunto de volver a disculparse por eso pero pudo contenerse.

Luego de eso notaron como Chenle y Jisung se habían adelantado para adentrarse a una tienda con temática linda la cual en su mayoría de trataba de sanrio. Jeno pudo notar eso y no dudo en sujetar fuertemente a Renjun del brazo para literalmente llevarlo arrastrado hasta donde estaban los niños.

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