Moriré de amor

No es para ti

La casa de Amber no estaba muy lejos de donde estábamos, el pueblo no era grande y podías llegar de un lado a otro en menos de 20 minutos.

Los suficientes para pensar en tanto, me causaba tanto temor la palabra asesinato, no era lo mismo que la situación de todos aquí, para mi era diferente, a los 9 años mi vida cambió por completo después del asesinato de papá, quisiera de verdad saber qué pasó en aquella madrugada donde yo solo dormía y el estaba fuera de casa; nunca fue un secreto, nadie me lo oculto pero mi cabeza bloqueó recuerdos de todo eso, como si un día simplemente el ya no llegó a casa y ya.

Quisiera pensar que es algo que creo mi mente pero cada que visito el lugar en el que descansa me doy cuenta que es completamente verdadero.

Entre mis recuerdos vagos se que quien asesino a mi papá está tras las rejas pero era alguien muy cercano a él, desde entonces me cuesta muy confiar en la gente, no necesariamente necesito pensar que alguien me va a asesinar pero si que me puedan dañar; lo ultimo que haría es mostrar mi miedo ahora mismo, hacerme la valiente me sale muy bien cuando se trata de dar todo por alguien que amas.

Tara llegó a mi vida sin yo pedirlo o buscarla, de un día para otro nos volvimos demasiado cercanas, una amistad que de a poco fue mostrando las verdaderas intenciones de ambas; desde que lo aceptamos puedo decir que daría mi mundo entero por ella, ¿pero ella? ¿También lo haría?.

Mi miedo más grande ahora mismo era eso, minimizar mis sentimientos y traumas que cargo desde hace años para que al final me falle, no quiero decir que sea así; pero yo no sé nada de su amistad con Amber.

-¿Te sientes bien?- me tocó la mano para llamar mi atención.

-Amm si... todo bien- por impulso quite mi mano.

-Acompáñanos, nadie se puede quedar solo- me baje de mi lado y fui a ayudar a bajarla.

-Entramos, tomamos el inhalador y nos vamos de inmediato- se apresuró a decir Sam con la desesperación de ya irnos.

-Sam, nos pueden dar unos minutos- la cara de la mayor no transmitía exactamente un contento -Por favor, será rápido-

-Tienen 5 minutos, vamos para allá a darles su espacio pero igual no nos alejaremos tanto, ¿ok?-

-Gracias Sam- nos dejaron junto al auto mientras ellos se fueron a la entrada de la casa, Tara me miro directamente como si esperara a que yo hablara.

-¿Para que el tiempo?, ¿te sientes mal?, sería mejor decirles-

-Estoy bien, el problema no soy yo, eres tú-

-¿Yo? Estoy bien, ya casi no me duele la pierna, me siento como si no me hubiera pasado nada y la cortada del brazo no es para tanto-

-No me refiero a eso, los últimos 15 minutos del viaje estuviste muy apagada, te apartaste de mi desde que dijiste lo de Amber, quizás hace unas horas estaba alucinando por tanto médicamente pero ahora se perfectamente que estabas llorando, dime que te pasa-

-Es inmaduro lo que dije e hice, perdóname por eso-

-Inmaduro o no, si sientes algo lo tenemos que hablar, somos... bueno hay algo-

-Exactamente es "algo" no una relación, no tengo el derecho ni ahora ni aunque lo fuéramos de celarte porque no está bien, dejemos de lado eso, vamos por tu inhalador y terminemos con todo esto-

-T/n entiendo que lo tomes así y agradezco que pienses de esa manera pero yo también ya lo sentí y se que es horrible pensar que alguien más puede quitarte a quien tanto amas, tú misma lo acabas de demostrar, llorar no es cualquier cosa y es lo que me preocupa, dime ¿se trata de Amber?-