Anomalía (Pavitr prabhakar)

Discusión

El sábado y domingo pasaron normales; hablaron, bromearon y rieron.. pero había algo.

Algo no estaba bien.. ambos se sentían incómodos uno por mentir y el otro por sospechar.

Mía estaba nerviosa y estresada ya que el siguiente día "S" le daría los papeles tan importantes para ella y no sabía cómo le explicaría a Pav sobre eso.

.....

Esa misma mañana sus ojos se abrieron al no poder conciliar el sueño eran alrededor de las cuatro de la mañana..

Se levantó liberándose de los brazos del muchacho que la rodeaban hace unos segundos atrás.

Comenzó a caminar hacia aquel hermoso cuadro que detrás tenía la caja que aún no había podido abrir ya qué era una caja diferente que no hacía ni un solo pequeño sonido sin importar que número pusiera en ella.

Con un suspiro saliendo de sus labios resignada quito el cuadro una vez más para tener enfrente asu, ahora su peor enemiga.

La caja...

Apenas sus dedos la tocaron; para descifrar nuevamente su código su cuerpo se tambaleó y su vista se torno borrosa sintiendo las consecuencias de no estar durmiendo bien.

Fue un fragmento pero en su cabeza pudo ver unos números..

Dos..cero..

Ocho..

Dos,cero,cero,seis..

Sus ojos volvieron abrirse y su cuerpo reacciono antes de caer.. intentando tranquilizar su respiración agitada..

¿Que había sido eso?

Fue rápidamente hacia esa maldita caja y puso cada número antes de que su memoria resolviera los números.

Un ligero "Clik" fue percibido por sus sensibles sentidos..

.....

El chico se removió en sus sábanas apenas despertando, para su sorpresa la que se supone tendría que estar junto a él, ya no se encontraba asu lado, cosa que lo hizo abrir los ojos de golpe.

Buscándola con miedo inexplicable sus ojos recorrieron la habitación.

Ahí se encontraba sentada en su silla mirando directamente la ventana. Su corazón que latía rápido y con preocupación se tranquilizo al verla que se encontraba ahí...  con el.

Pero la observo con detenimiento y noto que expresaba un aire melancólico esa mañana sin si quiera estar serca de ella, el se sentía mal y no sabía por qué.

Sus ojos se encontraron con los del otro y Pavitr podía jurar que nunca había visto una mirada con tanta tristeza como la de esa mañana.

No sabía por qué pero no se sentía con tantos ánimos esa mañana que cuando Mía no quiso hablar con él..  esta vez el no fue tras ella para saber que tenía.