Anomalía (Pavitr prabhakar)

Sand-Man

Realmente no lo podía creer, los únicos dos villanos de los que Pavitr le había hablado había sido una versión masculina del la Duende verde y la Doctora Octopus.

No de ningun hombre de arena.

Ella miro a Pavitr que ladeo la cabeza mientras miraba al hombre alto, con un corte militar y una camisa de rayas negras y verdes.

Era verdad.. El apenas estaba empezando en todo esto, aun no había aparecido Electro, Veneno, Rhino, Mysterio esos y muchos más villanos..

Ella apretó sus manos sabiendo perfectamente lo que le esperaba a Pav, quería protegerlo de alguna forma, evitar de alguna manera que no pase por todo lo que le espera, pero tenia que pasar.

Quiera o no, el tiene que luchar..

Perder..

Caer y levantarse denuevo..

Y aceptar que no se puede salvar a todos..

-¿Lo conoces?-. Le pregunto Pavitr que noto al instante la mirada preocupada de la chica.

Ella se quedo callada, pensando que tanto debería decirle. Ese era SU villano, no el de ella ¿como peleria Pavitr si ella no estuviera ahí?

–En mi universo había una villana igual a él creó..- Ella lo miró ignorando los pensamientos que le decían que no debería de ayudarlo, que el debería hacerlo solo, por que ella podría alterar algo–. Escucha Pav el puedo materializar su cuerpo en lo que sea, puede convertir cualquier parte de su cuerpo en arena y‐

-¡OK! Es arena, ¡entendido! ¡Yo me encargoo!!-. El chico la interrumpió, para ponerse su máscara e irse hacia una de las columnas del lugar dejándola con las palabras en la boca.

"Lo siento Mía pero no puedo arriesgarme"

Pensó el chico que se balanceaba entre las columnas del templo, acercándose cada vez más hacia su objetivo, no podía arriesgarse que la información de ella cambiará algo.

Apesar de que sabia por que el, se había ido de esa forma y que no quisiera escucharla.

A pesar de saberlo no evitaba que sintiera una presión en su pecho, y las palabras "yo me encargo" habían sido más que claras para ella.

No la quería en la pelea, y ella no era nadie para contradecirlo, esos días haciéndola reír, esos días en la que pasaban horas platicando de lo que sea, esos días junto a él y Maya y ese paseo la habían echo olvidar.

Ese no era su universo y nunca lo hiba hacer.

Se levantó dispuesta irse, vajando y adentrándose al templo observando el gran lugar que alguna vez era adorado.

Sin poder evitarlo preocupándose por el, se sentía como si lo dejara atrás pero si se quedaba ahí lo ayudaría en algún momento sin dudarlo.

Su primer enfrentamiento con la villana salió mal herida, pero no de gravedad, el chico terminaría igual, ¿no?

Mientras caminaba hacia la salida sus pensamientos se hacían más altos tanto que sentía como si le susurran en el oído, unos por la preocupación que sentía y otros recordando las últimas palabras que le dijo Miguel.

.....

"-¡Deja de huir Mía!-. Le dijo el hombre acorralando ala chica cansada.

-¿¡Que no lo entiendes!? Ya no hay nada que hacer..-. Dijo iracundo y cada vez estaba más cerca de ella, sus ojos rojos y sus colmillos grandes y sus garras listas para desgarrarla en cualquier momento.

Estaba molesto MUY molesto, mentalmente luchaba para tener control para no hacerle daño más de lo necesario ala chica.

Mientras que ella, sentía que su corazón saldría de su pecho y que sus pulmones no tenían el suficiente aire y sus ojos no dejaban de buscar cualquier ruta de escape.

Cuando el se acercó lo suficiente ella intento huir en vano, ya que el la atrapó y la lanzó contra la pared con brusquedad, ella cerró los ojos por el golpe y no tardo en cerrarlos denuevo por un golpe seco que estampó cerca de su rostro, cuando los volvió abrír se encontró con esos ojos carmesí inyectados de ira.

-Ya no importa a donde vayas.. -Comenzó con lentitud -. O donde te escondas -. El se acercó asu oído para que escuchara claramente sus palabras -Eres una anomalía y me encargo de atrapar y encerrar alas anomalías.

Los ojos azul claro de la chica se cristalización por sus crueles palabras, sabiendo que tenía razón, aún con tantos universos ya no podía pertenecer a ninguno de ellos, era una anomalía, una falla a donde sea que fuera.

Por eso..

Antes de que Miguel se alejara de ella, tomo su cabeza dándole un cabezazo, obviamente eso no lo noqueo como le hubiera pasado a una persona normal, pero lo desoriento lo suficiente para que ella escapara con su telaraña y abriera su último portal.

Por eso hiba a recuperar su universo

Sin importar cuando le cueste.

Para que nunca nadie le llamara anomalía, falla o fugitiva como ahora la conocían todos."

....

Con esos recuerdos rondando su mente, tardo un poco en percatarse del peligro, pero a tiempo se dio cuenta que en la entrada se acercaban tres hombres.

Subió a una de las columnas del lugar notando que dos de los hombres hiban armados y el hombre del centro no llevaba arma pero era el único con la mitad de la cara tapada con una máscara de gas.

Solo vasto ver sus ojos para saber de quien se trataba.

Solo alguien tenia una mirada tan intensa e intimidamte aparte de Miguel.

S...

Lo pensó un momento y miró el maletín que llevaba uno de ellos, y pensó en el villano con el que se estaba enfrentando a Pavitr, no sólo era un villano si no un ladrón, dispuesto a cualquier trabajo que le de dinero..

¿Quién era S?

¿Que nisiquiera le daba miedo hacer tratos con un mutante?

Lo pensó un momento, talvez no ayudaría a Pavitr a pelear, pero podría deshacerse de esos hombres armados y alejaría lo más que pudiera a S.

Quiera o no, lo necesitaba y hiba a alejarlo de ahí.

Ese era el plan, ¿fácil no?

Lo había decidido
Ya muchas vacaciones
Ya muchos descansos

Basta de fingir ser la chica feliz
Tenia algo que hacer.

Algo que recuperar.
Y algo que hiba tener devuelta.

Dicen que mientras más
Te aferras a algo, no solo te dañas
A ti su no a las personas que te aman
Las arrastras contigo
Junto a tu dolor aun así no sea
Tu intención hacerlo.