Capítulo 3.

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         Después de aquella plática, George me dejó en casa. Me arreglé con rapidez y bajé a comer algo puesto a que dentro de unos minutos pasaría por mi.

- Papá, hoy hubieron muchos clientes en la tienda. - Sonreí sentandome frente a él en la mesa del comedor.

- Gracias por atenderla hoy. - Me sonrió y volvió su vista al periódico.

- ¿Cómo vas con Paul? - Preguntó mi mamá colocando un sándwich en mi plato, la miré y luego bajé la mirada.

- Terminamos. - Recosté mi rostro en mi mano sintiendo la mirada de mis padres.

- Es un idiota. - Habló mi padre.

- No sabe lo que se pierde. - Habló esta vez mamá haciéndome reír.

- George pasará por mi dentro de un rato. - Les comenté.

- ¿A dónde irás? es muy tarde. - Respondió mi padre.

- ¿George? - Preguntó mi mamá interesada por saber quién era el chico que pasaría por mi.

- Respondiendo a lo de papá, mis amigos me invitaron a verlos tocar en un club cerca. - Le mentí, algo que me hizo sentir muy mal, no podía decirle que estaba en una banda de solo chicos porque no me dejaría salir más nunca. - Y respondiendo a lo de mamá, George vive a unas cuadras, ha venido a aquí, no sé cómo no lo recuerdas.

- Ah! si lo recuerdo, es el chico amigo de John. - Asentí.

- Bueno en realidad todos somos amigos. - Me alcé de hombros.

- ¿Nunca tendrás amigas? - Preguntó mi padre.

- Por ahora ninguna ha sido buena conmigo. - Me alcé de hombros. - Ellos me cuidan y ninguno se sobrepasa conmigo, son buenos.

- Quiero conocerlos. - Habló mi padre dejando el periódico de lado al sentir el timbre, mi madre fue directo a la puerta.

- Lucy, ya llegó tu amigo. - Anunció desde la entrada.

- ¡Ya voy! - Me levanté rápidamente y dejé un beso en la mejilla de mi padre. - Nos vemos papá.

- Espera. - Se levantó de su asiento y caminó detrás de mi hasta la puerta donde estaba hablando mi madre con George.

- ¿George, no? - Habló mi padre y le extendió una mano. - Francis Jones. - Se presentó educadamente y rápidamente George le estrechó la mano.

- Así es, George Harrison. - Le sonrió. - Es un gusto conocerlo señor Jones.

- Igualmente, mi hija me ha hablado bien de ti. - Habló mi padre. - La dejo a tu cargo, no la traigas tarde. - George asintió rápidamente y salí luego de despedirme de mi madre.

Caminamos por las frías calles, hacía tan solo unos minutos había anochecido así que hacía más frío de lo normal.

- Tu padre da miedo. - Habló el castaño a mi lado.

- No es cierto, solo fue amable. - Me alcé de hombros.

- Estás a mi cargo así que tendré que cuidar de ti. - Me dió un pequeño empujón y yo reí.

- Tampoco es como que haga tantas locuras, Geo. - Negué sonriendo.

Llegamos al lugar y saludé a los chicos.

- ¿Quieres algo de beber? - Me preguntó John a lo que me acerqué a él, en el camerino había una mesa con algunas bebidas.

- Solo una cerveza. - Dije colocándome a su lado.

Got my mind set on you. | George Harrison.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora