Capítulo 5: Primera misión

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Anteriormente:
"Joder... Quiero tocarla aún más, pero creo que eso lo debería hacer con Aki" pensó el chico para tomar la regadera y activarla - Ponte de pie - dijo con un ligero sonrojo.

La chica hizo caso, así que el chico procedió a enjuagarla pasando el agua por todo el cuerpo de esta.

Después de varios minutos la chica ya estaba cambiada y sentada en la cama de Denji junto a Nyako, hasta que el rubio entro con una camiseta blanca y pantalones grises claros.

- Bien, tú dormirás al filo y yo al rincón - dijo con autoridad, pues no se dejaría mandar al piso.

- Está bien - respondió para levantarse para ver cómo el chico alzaba la frazada y le hacía espacio en la cama.

La chica se acostó junto a Denji, el cual le dió la espalda a la pelirosa pero esta le pidió una última cosa - Denji... ¿Me puedes abrazar? - pidió mientras le tocaba la espalda al chico.

- Bueno - dijo mientras daba una sonrisa pervertida y se daba la vuelta para abrazar a la pelirosa, así aprovechando para tocarla un poco.

- Gracias - dijo la chica para caer dormida y después de unos minutos toqueteando, Denji también se durmió.

Actualidad:

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Otra vez se encontraba en ese raro lugar parecido al infierno - Denji... Denji... - de nuevo esa voz, aquella que despertaba frenesí y éxtasis en el chico.

- Denji... Destroza... Desgarra... - aquella voz decía en un tono que tiraba a uno demoníaco y frenético, repitiendo lo mismo que ya había escuchado - ¡Destroza y desgarralo todo! ¡Pon fin al Averno! ¡Golpea y arranca su trono! ¡Denji!... - la voz parecía estar completamente emocionada y en éxtasis, justo como la anterior vez.

- ¡Se abrirán las puertas a un mundo desconocido, nuevo y oscuro!... ¡Se el héroe del infierno! ¡Denji! ¡Combate y protege el futuro! - la voz gritaba exageradamente emocionada mientras que unas puertas extrañas hechas de huesos y carne aparecía justo en frente suya.

Estás se abren y dan vista a un palacio demoníaco justo en el medio se encontraba la silueta de un gran trono y de este salían cuatro cadenas a cuatro figuras de ojos peculiares como los de Makima, pero lo interesante era que la cadena que daba con los ojos que más se asemejaban a los de Makima, se estaba rompiendo.

- ¡Para matar al jefe y evitar la profecía de Nostradamus! ¡Debes acabar con los jinetes de la manera que te plazca! ¡Control está por traicionar al final boss! - grito aquella voz en frenesí mientras manos demoníacas de diferentes tipos apuntaban al trono.

- ¡Destrozalo todo! ¡Proteje el futuro y...! Y... - al parecer la voz demoniaca se iba calmado - Intenta ayudar a realizar sus sueños... Esa es la manera más fácil... - dijo en un tono suave y tranquilizante.

- ¡Pero para entrar al infierno debes encontrar al demonio que comprende mejor que nadie a los humanos! ¡Y quién mejor que el mismísimo demonio de la humanidad! ¡Arranca su corazón y abre las puertas del infierno! - instruyó con una voz severa mientras el suelo dónde estaba parado el chico se empezaba a desmoronar para caer a un inmenso vacío.

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El chico se despierta sudando y abrazando más fuerte a Power, la cual roncaba, además de tener su cabellera toda revuelta.

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