Hermoso

capitulo 12

La primera en hablar fue la princesa. Eimmyria miró al niño en su regazo, con una expresión de absoluto deleite en su rostro, “¿Cambiar de forma? ¿Ya? ¡Loki, eso es maravilloso!”

El resto de los Elfos parecían igualmente encantados, y no fue ninguna sorpresa. Los Elfos no menospreciaban la magia como lo hacían los Aesir, apreciaban el poder (razón por la cual Loki se llevaba tan bien con ellos). Fue un estudio que alentaron y tuvieron en alta estima. Si bien a los elfos les era posible cambiar de forma, era un regalo poco común para los de su especie. Siempre que sucedió, fue un poder celebrado. Nunca entenderían por qué Asgard despreciaría a Vali por ello. De hecho, se sentirían hasta cierto punto ofendidos por ello.

Los Aesir, por otro lado, guardaron completo silencio. Thor sabía que no todos los presentes en el salón del banquete lo habían escuchado. La mesa principal lo tenía, junto con las tres mesas más cercanas a ellos. Thor miró los rostros que lo rodeaban y solo pudo desanimarse por lo que vio. La sorpresa era la expresión más común, incluso había reemplazado la compostura habitual de su madre. Un disgusto apenas disimulado estaba en un puñado de rostros, y su presencia hizo que el estómago de Thor se apretara y el corazón se acelerara (prueba final de las afirmaciones de Loki, y verlo hizo que Thor orara por no haber cometido un error al hacer esto). El rostro de su padre estaba en blanco y Thor no podía leer ninguna emoción (lo que sólo lo aterrorizó aún más). No podía mirar a Loki. El silencio sólo duró un momento y luego todos hablaron a la vez. La mayoría hablaba (o al menos lo intentaba) en voz baja, pero algunos no se molestaron. Los comentarios hicieron que la ira de Thor aumentara y deseó poder tomar el Mjolnir para silenciarlos.

Otro Lokison salió mal. Ese fue el sentimiento que Thor escuchó más. Había mucho de malo en eso, y logró menospreciar a todos los miembros de la familia de Loki, incluido Thor. Ya no era perfecto, por lo que ya no lo veían como Thorson (no es que Thor le envidiara a Loki si Vali alguna vez decidiera adoptar el nombre). Lo llamaron Lokison como si hubiera algo malo en eso, que lo hiciera a él (a todos sus hermanos) menos que ellos. Thor quería castigarlos por ello, pero temía cómo su disgusto influiría más en el destino de Vali (y en las decisiones de Odín).

“Sí”, Thor se dirigió a Eimmyria, cuyo deleite se había convertido en incredulidad al escuchar lo que se decía a su alrededor. Ella levantó la vista cuando él habló, “es maravilloso. ¡Se puso orejas de gato!” Thor todavía estaba enamorado de esa transformación en particular, “una hija también, aunque estaba un poco sorprendido con esa”, habló en voz alta y con calma, haciendo que pareciera que no estaba completamente consciente de las cosas que se decían a su alrededor. “Loki me dice que es extraordinario. Estoy muy orgulloso de Vali”.

La última parte trajo de vuelta el silencio de sorpresa. Sleipnir le había dicho que, si alguien se enteraba, Thor tenía que dejarle muy claro que Vali contaba con todo su apoyo. Thor no sólo estaba declarando su apoyo, sino también su puro orgullo. Estaba orgulloso de su hijo y lo amaba sin lugar a dudas, y todos lo sabrían.

Al mirar a Eimmyria, Thor no pudo evitar ver a Loki. La vista fue suficiente para dejarlo sin aire. Su marido parecía desolado, como si no tuviera ninguna esperanza (y tal vez así fuera). Lo peor de todo es que Loki lo miraba como si Thor lo hubiera traicionado (y lo había hecho, al menos en cierto modo, y Thor deseaba desesperadamente que Loki pudiera perdonarlo por esto).

“Vali es especial”, continuó Thor, “y es amado. A cualquiera que piense lo contrario no le gustará mi respuesta”, fue una amenaza directa, y lo que mejor silencia los comentarios cortantes. Thor no sólo había declarado su apoyo, sino su intención de castigar a cualquiera que pensara lo contrario.

“Thor”, la voz de su padre, tranquila y serena, fue lo suficientemente fuerte como para silenciar las partes del salón que no habían escuchado ninguno de los anuncios de Thor, “Me gustaría hablar contigo”, Odín miró a Loki, “ambos de ti.”