Si decides quedarte

⚘ 4.Inefable ⚘

Zarión Bennett

El pequeño experimento que hice para ver su reacción fue un éxito, aunque el resultado no fue el que deseaba.

—Ella se contiene  y es demasiada cerrada—me digo entrando a mi habitación.

Me desvisto y entro a la ducha para refrescarme. Mientras el agua helada cae por mi cuerpo pienso en los ojos de ella. Ella muestra la misma falta de cordura que yo. Si ella deja de pensar y comienza solamente a actuar dejándose llevar por sus más profundos y oscuros deseos. ¡Será perfecta!

Mientras espero pienso en la chica cuyo nombre aún desconozco. Me emociona saber todo lo que puedo hacer con ella. Quiero ensuciar su alma y romperla a pedazos, deseo desvanecer la tenue luz que le rodea. Ella ahora es como un reto para mí.

—Esto será divertido.

Ella es como una muñequita de barro en mis manos, la moldearé a mi semejanza, destruiré su humanidad, me haré de su pureza y la ensuciaré con mi oscuridad, con solo verla a los ojos puedo saber que ella tiene todo lo necesario para ser mi otra mitad.

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               Blair Brown

Ya a pasado más de una semana y apenas veo a Zairón en la cabaña, según el siempre está ocupado.

Desde que llegue al internado nunca había estado fuera de noche y debo decir que la ciudad es hermosa hay muchas luces todo está adornado muy hermoso, el cielo está despejado y las estrellas se visualizan a la perfección, esto es tan perfecto, parece sacado de un cuento.

La imagen de como el mato a la chica del recado la tengo todavía en mi mente, pero la idea de verlo siendo el mismo es excitante y emocionante quizás compartimos la misma locura solo que el aún no me a liberado.

—Bonita, puedes caminar más rápido ?

—No me llames así.

—Aún no me sé tu nombre, como quieres que te llame mocosa.

Mi boca se abrió en signo de indignación.

—Es Blair, mi nombre es Blair.

El asiente.

—Mueve tus hermosas piernas, Blair...

Decido no decir más y lo sigo en completo silencio. Camino
embobada con la forma en que los músculos de su espalda se contraen, suelto un leve grito cuando el se gira bruscamente, mi espalda golpea con una dura y fría pared, jadeo por el golpe, Zairón pega su cuerpo al mío y no entiendo de qué va su comportamiento.

—¿Pero que mierda te pasa, te has haz vuelto loco?—intento zafarme.

—Puedes callarte la maldita boca,
Bonita—habla pegado a mi oído su voz es ronca.

Me agarra de la muñeca y me dirige hacia un callejón, oh mierda, va a matarme.

—Por ese lugar hay varias personas y no quiero que me vean y menos ahora que ando con una chica arrastro.

—Ah—digo mientras proceso todo, el dirige su mirada hacia la mia, nos quedamos mirándonos durante Segundos fijamente mientras ladea su cara y sonríe y como si fuera impredecible aprieta mis senos con sus manos haciéndome gemir un grito ahogado.

—Pero que demonios hace-le doy un manotazo.

—Quería ver si eran reales, no te alteres—hablo riéndose.

—No, me los implantaron cuando tenia 2 años, idiota.

—¿Por qué te enojas tanto?—
Sonríe cínicamente y camina hacia mí haciéndome retroceder-El otro día estabas deseosa por dormir conmigo, así que no finjas... sé que te gusto.