Pequeños grandes bebés 𖥔 Seventeen

Niño grosero ; Vernon

Hansol nunca se consideró como alguien que maldiciera seguido o a alguien que insultara a alguien. Todo eso cambió cuando adoptó a Jun, hace 4 años.

Por alguna razón siempre insultaba en inglés y su hijo, chino y que no sabe ni una pizca de inglés, podía decir perfectamente las palabras y hasta con mejor pronunciación que el mismo. Y eso que era nativo.

Su exnovia también era china y hablaba perfectamente el inglés, por eso se conocieron. Ah, que recuerdos, admite que aún la extraña pero tiene rencor hacia ella, mucho a decir verdad.

A veces Hansol se preguntaba porque su pequeño retoño no era como el hijo menor de Chan, Wonwoo ni sabía pronunciar su propio nombre y Jun ya estaba diciéndole insultos a la señora de la tienda.

—En verdad lo siento mucho, eso en inglés significa "linda" —Hansol se disculpó dando una reverencia hacia ella, con Jun en sus brazos y una pequeña canasta llena de comida en su mano libre.

—¡¿Crees que soy tonta y no se que significa "twat"?! —la señora gritó alterada haciendo que el pequeño niño se asustara y escondiera en el cuello de su padre.

—Lo siento mucho, Jun no sabe lo que dice —la señora con canas, soltó un grito enojada pateando la canasta de Hansol y se fue dejándolos a los dos ahí.

-—Perdón, papi —Jun lo abrazó por el cuello, recargando su cabeza en el hombro del mayor— Ahora tenemos que recoger todo esto, señora tonta.

Frunció su ceño viendo la comida que estaba sobre la canasta tirada sobre el pasillo de jugos.

Hansol solo suspiró bajando a su hijo de sus brazos y se agachó recogiendo la comida. Jun levantó un gran bote de Nutella y lo tiró sobre la canasta, se limpió el sudor sobre si frente.

—Ya me cansé, papi, cargame —Jun levantó sus bracitos hacia Hansol, quien sonrió y lo cargó— Alimentame, tengo hambre. Si no me das comida, le diré al policía que te regañe.

Apuntó con su dedito al policía que estaba cerca de los juguetes de niño.

—Apuntar es malo, Jun y acusarme con el policía por no alimentarte también es malo.

—¿Por qué? ¡Es el delito 1709 de Estados Unidos!

—Estamos en Corea y creo que no hay tantos, Jun.

—Suéltame, ya no me quiero ir contigo por no darme la razón y no alimentarme con chocolate todos los días.

El pequeño se bajó de sus brazos y salió corriendo, pero terminó chocando contra el carrito de un señor y llorando al tener un chichón morado en su cabeza.