{ɞ} 𝕋𝕣𝕖𝕤 :

442 72 10
                                    


𖥸




Waan sopla, y sopla, y sopla como la loba de ese cuento de los tres chanchitos. Y eso, se está volviendo una distracción para su padre, Nattawin, que levanta la cabeza de la Tablet en la que está trabajando un diseño, dejando a un lado el bolígrafo, encima de la libreta de apuntes. Indagando la postura de su hija que balancea un lápiz entre los dedos, mirando por la ventana, al jardín de flores. Era la mesa en la que le gustaba sentarse. Parece perdida en sus pensamientos.


—¿Qué pasa? —pregunta, capturando la mirada de su hija que se voltea, con un puchero en los labios.


—El Machiatto que pedí venía más dulce de lo normal, y eso no me gusta. Además, de que antier, ayer y hoy, no he visto a PʼMile. ¿A ti no te parece extraño? —desencaja, y el lápiz no deja de moverse entre sus dedos. —Solo él sabe cómo me gusta, con azúcar, y el toque especial que le da a sus cafés. Me pregunto si alguien lo ha notado.


Por supuesto, él, lo noto. Es cierto que el Latte, después de probarlo una vez, le fascinó. Probó todos los del menú, pero el Latte es su favorito. Y estas veces que lo ha pedido, ha sido muy simple para el paladar de su boca. No dulce, ni siquiera la leche. Y no lo había querido comentar. Aparte de ello, tampoco ha visto a Mile, en la cafetería, y menos en la florería. Por lo sabido de Waan, es a él, al que encuentran al frente, y no a Tong, el repostero estrella, que prepara con tanto deleite los postres. Agregándole, de que no había conocido a los dos meseros que andaban y venían fuera de la cocina. Ambos Betas, muy amables. Nodt y Us.


—Está de vacaciones, las personas las toman. —retoma el Tablet en su mano, y el bolígrafo en la otra. —Te quería preguntar si quieres viajar conmigo a Kalasin. Estaré hospedando en un hotel de dos estrellas, parece que el abuelo quiere presentar una pesquisa, en una sala abierta a alumnos de medicina y a los accionistas acerca de la Citología Vegetal.


—Claro que me apunto. —concede de inmediato. Irguiéndose en la silla. —¿Tengo que estar en la sala? No es que no me guste la botánica y todas sus ramas, pero no me apetece escuchar una charla de la Citología Vegetal, a menos que fuera Micología.


—No, no es una obligación. Puedes deambular por las instalaciones del hotel si así deseas, o salir a dar una vuelta. —encoge los hombros. —Solo si te interesa, decía.


—Bueno, las vacaciones están aquí. No me parece mal salir del sitio, así que, preparare un maletín de ropa, y vas a buscarme a la casa. —se inclina a la mesa, sonriendo. —He escuchado que en Kalasin gobierna una familia muy poderosa. Como aquí, con los Wattanagitiphat.


—Nadie gobierna nada aquí. —apunta con el bolígrafo a su hija, y lo aparta rápido, especulando un poco. —En la Provincia de Chiang Mai, Provincia de Saraburi, y otras también hay familias muy poderosas, no me acuerdo bien sus apellidos, pero son bastante sonadas. Y la de Kalasin, son los Romsaithong. Tengo entendido que tienen un fuerte negocio de hoteles, centros comerciales y hospitales. Y de otros inmuebles y negocios en el extranjero. No lo sé, hay muchas familias con poder en Tailandia.

Joli sourire. ᦗ ApoMile.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora